APUESTA TEMERARIA

Capitulo 11

Nos llevó de regreso a mi RV, el sonido de la risa de Jinnie resuena en mis oídos. Le hice cosquillas hasta que estuvo a punto de llorar, y luego lo dejé ir porque ya le había dado una lección. No es que fuera a aprender nunca. Le encanta provocarme.

Miro hacia mí y veo su pequeño cuerpo acurrucado a mi lado, con los ojos cerrados. Ni siquiera le pregunté si quería pasar la noche conmigo. Acabo de tomar la decisión por nosotros porque lo quiero conmigo esta noche. En mi cama. Mientras se pueda.

Porque ambos sabemos que terminará con Colin. El perfecto y maldito Colin.

Aunque para ser justos, tuve la oportunidad de decirle a Jinnie lo que quería. Podría haberle pedido que no lo hiciera por mí, pero simplemente no pude hacerlo. Se merece algo mejor que yo. No soy inteligente. La mitad del tiempo, cuando Jinnie parlotea sobre algo que le interesa, solo asiento con la cabeza y me pregunto de qué diablos está hablando.

No, está mejor con alguien que pueda entender toda esa mierda. Alguien más inteligente y sofisticado que yo. Alguien con quien tenga más cosas en común. Y el otro problema es que ni siquiera estoy seguro de si soy gay. ¿Quizás soy bisexual? Siempre he notado que algunos otros hombres eran atractivos, pero nunca de una manera verdaderamente sexual. Sin embargo, cuando vi a Jin por primera vez, fue como si algo hubiera hecho clic en mi cerebro. Lo quería. Lo necesitaba. ¿Y eso que significa? ¿En dónde nos deja eso?

No puedo seguir jodiendo con Jin solo para hacerlo sentir miserable al final. Él nunca sería realmente feliz conmigo. Entonces, si eso es lo que quiere, lo dejaré tener una oportunidad con Colin. A pesar de que la idea me haga sentir mal del estómago.

Honestamente, la idea de él con otra persona... acurrucado contra otra persona... sonriendo a otra persona me pone un poco furioso. Maldita sea.

Estaciono la camioneta y, en lugar de caminar al lado de Jin, simplemente agarro sus caderas y lo atraigo hacia mí. Se desliza por el asiento con un chirrido, luego está en mis brazos y lo llevo al dormitorio. Lo desvisto lentamente, dejando que mis ojos se llenen de él. Esta puede ser una de las últimas veces que pueda mirarlo de esta manera.

—¿Estás bien? —Pregunta con sus manos en mi cabello mientras me arrodillo frente a él y lo ayudo a quitarse los pantalones cortos. Quiero besar su piel y lamer un camino a través de su pecho, pero no lo hago. Esto no se trata de eso.

¿Verdad?

—Bien —Digo con brusquedad y me pongo de pie rápidamente.

Jin bosteza y luego se deja caer hacia atrás en el colchón, su pequeño cuerpo apenas ocupa espacio. Joder, se ve tan bien en mi cama. Haré un boceto de esto mañana cuando se vaya a trabajar. Agarrando la parte de atrás de mi camisa, me la saco por la cabeza y me quito los pantalones cortos antes de gatear junto a él. Me presiono contra su espalda y él suspira felizmente como si fuera todo con lo que ha estado soñando.

Que yo me acurruque con él. Alcanza su teléfono y configura su alarma, y mientras lo hace, extiendo mi mano sobre su delgado estómago, pasando mi pulgar sobre sus costillas. Apoyo mi barbilla en la parte superior de su cabeza.

—Eres muy cálido. Es agradable y acogedor —Dice atontado. Lo observo mientras abre una aplicación en su teléfono e inmediatamente aparece un revoltijo de palabras en la pantalla—. Voy a leer un rato. ¿Eso está bien?

Asiento, mordiéndome el interior de la mejilla, mientras recuerdo una vez más lo inteligente que es. Es un graduado universitario en búsqueda de su credencial para enseñar. ¿Qué diablos está haciendo él jugando con alguien como yo? Cuando tenía dieciséis años, me expulsaron de la escuela secundaria y logré terminar bajo un programa de continuación. Y apenas pude graduarme así, también. Tengo antecedentes penales y hay muchas posibilidades de que en algún momento termine con antecedentes penales por hacer algo estúpido. Soy una mierda total en comparación con él.