El diario de Cero.H Vol.3 (PAUSADA)

Parte 1 Capítulo VII

Bajo al vestíbulo ya más fresca después de haber tomado un baño y con ropa limpia puesta. El zumbido en mis oídos sigue y hay momentos en el que se vuelve más intenso y luego regresa a su nivel de siempre. Empiezo a acostumbrarme, pero sigue siendo muy molesto. Lo único que me da algo de consuelo es que hoy debo de visitar el laboratorio de la academia y si corro con suerte, ahí encontraré una cura o una explicación.

Ambas sería fenomenal, pero para este punto, con una de las dos me conformo.

Paso por el buffet y encuentro a todo mundo ahí, a mi hermano con nuestros hermanos, a Cinco y también veo a Stanley comiendo solo en una mesa alejada de ellos, Diego lo ve de reojo y luego sigue una conversación con Luther. No veo a Allison y tampoco veo a Victor, pero supongo que estarán juntos dando vueltas por la ciudad.

— Cero, ven — Cinco me ve y me llama para que vaya con ellos — Que bueno que llegas, justo estaba por preguntarte que tenias en mente hoy, ya que Klaus me estaba pidiendo que saliéramos, pero le dije que estabas pensando en una salida tu y yo, SOLOS.

Grita la última palabra, sin quitarle la mirada a Klaus y aferra su mano a mi cintura.

— Por favor, Cinco. — se queja Klaus, empezando un berrinche — ¡Será divertido! Si no es una salida de hermanos, que sea una salida de los tres. Ustedes son la feliz pareja y yo seré el adoptado de su relación. Será como si tuvieran un hijo.

Klaus toma mi mano entre las suyas y trata de hacer cara de "por favor".

— No te ofendas, Klaus, pero tengo suficiente, teniendo que cuidar de todos ustedes al mismo tiempo, como para tener que cuidar de ti a solas. — los dos guardan silencio, Cinco sigue aferrando su mano a mi cintura y Klaus sigue tomando mi mano entre las suyas, suspiro y me quito del agarre de Cinco y también me quito de encima las manos de Klaus dando un paso hacia un lado para alejarme de ambos — Yo creo que ambos deberían tener su tiempo de calidad. Les haría bien.

Cinco frunce el ceño y Klaus ladea la cabeza, ambos abren la boca para hablar y se que van a cuestionarme.

— Iré a caminar un rato, necesito tiempo a solas, además quiero ver que tanto cambió la ciudad desde que "me congelaron en el tiempo". — hago comillas con los dedos al mencionar lo último, me acerco a Cinco y le doy un beso en los labios y a Klaus le recargo mi mano en su hombro y le doy un leve apretón — Y Klaus, sabes que te adoro, pero no creo que ser nuestro adoptado sea algo que te quede. Eres nuestro hermano, y si hablamos de hijos, preferiría que fueran realmente míos y de Cinco.

Le sonrió a ambos, ellos no dicen nada, pero noto como los ojos de Cinco se agrandan un poco y a Klaus está apunto de quedarse sin mandibula.

Cuando estoy a una cuadra de la academia me teletransporto dentro para ir al laboratorio.

Pero es pésima idea.

Aparezco en el laboratorio, encontrándome cara a cara con un mueble lleno de libros en el cual caigo y y me golpeó las costillas y piernas, haciendo un tremendo desastre que termina conmigo en el suelo y varios libros pesados y enormes aplastandome.

—Maldición—me quejo sin aire, ruedo hacia un costado para quitarme los libros de encima y poder levantarme —Eso no estaba en el plan

—Por eso te dijimos que era mejor idea que esperaras, tus poderes no funcionan bien en este momento— La voz de Connor se escucha a mis espaldas y luego siento sus brazos bajo mis axilas levantándome de manera tan sencilla que hasta me desequilibra un poco al volver a tener ambos pies en el suelo.

Sacudo el polvo de mi ropa y con un movimiento de mi mano, los libros y estante vuelven a su lugar.

—Lo siento, pero es la única forma de llegar aquí sin tener que atravesar un conflicto con los Sparrow.