OBSESSION [𝚃𝙴𝚁𝙼𝙸𝙽𝙰𝙳𝙰]

𝙲𝚞𝚊𝚝𝚛𝚘

_____ 𝚅𝚎𝚛𝚝𝚒𝚣

Después de que Cinco... no hacia más que llorar, yo me sentía destrozada y el creía que habíamos dado un gran paso en nuestra relación como pareja. Parecía no oírme cuando le decía que parará, que ya no quería.

Después de lo del lago fuimos a la cabaña y corrí a encerrarme a una habitación temiendo de que quiera repetirlo en la noche, me preparé un baño y me sumergí en la bañera recordando los escalofriantes sucesos anteriores.

Tallaba mi cuerpo con coraje y asco, me sentía impura y estúpida. Ni siquiera me defendí, no le dí batalla. Simplemente lo deje destruirme a su antojo. Fui débil e increíblemente tonta al creer que esto alguna vez podría ser bueno.

Me envolví en una toalla y seque mi lastimado cuerpo, la fuerza con la que sostuvo mis caderas y mis nalgas habían dejado moretones, eso sin contar los hematomas que tenía en el pecho y cuello causados por sus besos y las veces que succionó con fuerza esas zonas además del dolor en mi entrepierna. Mis ojos lucian hinchados, ya no tenía fuerzas ni para llorar. Me coloqué una de las pijamas de Ocho y me tumbe a la cama donde quede profundamente dormida

Al día siguiente amanecí y sentí un peso en mi cintura y un cálido cuerpo tras el mío, al girar vi que se trataba de él. Al instante entre en pánico y no supe cómo reaccionar, me quedé extremadamente quieta tratando de no despertarlo, tenía miedo que lo de ayer se repita.

Noté como una sonrisa se formó en sus labios y mi cuerpo empezó a temblar.

- Sigo haciendo que tu cuerpo se estremezca - comentó orgulloso.

No respondí nada y solo mantuve la mirada agachada.

...

Durante todo el día el trató de hacerme platica y sacarme al menos unas palabras, yo no respondía y simplemente me quedaba viendo a la nada.

A la hora del almuerzo se sentó a mi frente a mí como de costumbre.

- Estoy muy contento por lo que pasó ayer - comentó sonriente - no puedo creer que después de tanto volvimos a estar juntos - trato de tomar mi mano pero la aparte - no sabes cómo extrañaba estar dentro de ti... Sentirte de nuevo fue maravilloso - cerró los y sonrió complacido.

Mantuve mi mirada en la comida, sujetaba y apretaba con fuerza los cubiertos, no podía soportar su cinismo y su despreocupación por lo que sucedió ayer.

- ¿Que te pareció a ti ? - levanté la cabeza y lo mire incrédula - ¿Si te gusto? - pregunto con picardía.

Esa fue la gota que derramó el vaso.

- Tu me violaste - murmuré entre dientes.

- ¿Disculpa? - fingió no escuchar.

- Me violaste!!! - levanté la voz.

- No sabes lo que dices - le resto importancia y siguió comiendo.

- Me violaste! - dio un fuerte golpe a la mesa - Me tomaste a la fuerza y abusaste de mí!.

- Tranquila - habló en tono de advertencia -Te recomiendo que te tranquilices Ocho...

- DESGRACIADO!!! - tiré todo lo que estaba en la mesa.

- Ya Basta! - se levanto abruptamente - Yo te he salvado, te he salvado...

- ¿Quién te dio derecho a meterme en mi vida? ¿Quien te pidió ayuda? Eh? - escupí con coraje dentro de mi corazón.

- Ocho cálmate - advirtió.

- ___! Mí nombre es ___! Maldito psicópata, me llamo ___ Vértiz y no soy tu maldita Ocho! Ella está muerta!!! - grité y al instante sentí su mano impactar con mi mejilla.

Sobe mi mejilla adolorida y el trato de acercarse.

- Ocho, perón... Perdón - pidió asustado

- No me toques! Eres un enfermó, un demente que solo sabe hacer daño. Puedes encerrarme aquí pero nunca vas a lograr que yo sea ella!!! - se le inundaron de lágrimas los ojos - Yo no soy Ocho, ella está muerta y yo te odio - golpeé su pecho - te odio!!! TE ODIO!!!.

Repetía entre lágrimas, el sujeto mis muñecas y me empujó levemente para detenerme. Se acercaba a mí y el miedo otra vez volvió a mí, sentí que está vez me mataría.

- Vete! - dijo entre lágrimas - Vete ahora!!! - gritó.

No sabía si esa era uno de sus juego pero de todas formas no me importaba, salí de la cabaña y corrí tan lejos como pude de ese lugar.

Debía estar lejos de él.

Hola putizorras 😘

Espero estén disfrutando de la historia.

Las ano 💕