OBSESSION [𝚃𝙴𝚁𝙼𝙸𝙽𝙰𝙳𝙰]

𝚅𝚎𝚒𝚗𝚝𝚒𝚍𝚘𝚜

___ ᴠᴇʀᴛɪᴢ

Mi esposo había llegado de su viaje pero no se encontraba del todo tranquilo, tenía miedo de que sospechara algo de mis salidas, él fue muy claro al decir que no quería que saliera de la casa y aún así desobedecí.

— ¿Estás bien? — pregunté sin dejar de darle de comer a mi hijo.

Cinco estaba frente a mí, ni siquiera había tocado su plato y yo no podía ni verlo ya que me moría de la pena.

— Ven aquí — indicó señalando sus piernas.

Con las mejillas sonrojadas dejé la comida de mi hijo a un lado y limpie su boquita, el bebé ya había terminado de comer así que solo lo deje en su silla y fui a sentarme en las piernas de mi esposo.

Él concentró sus mirada en mis piernas y las acaricio suavemente por encima de mi pantalón.

— ¿Qué estuviste haciendo mientras yo no estaba? — pregunto tranquilo y su mano hizo presión en mi pierna.

— Estuve bien, el bebé estuvo muy tranquilo — murmuré nerviosa.

Una risa sin gracia salió de sus labios — Te pregunte ¿Qué estuviste haciendo haciendo? No ¿Cómo estuviste? — habló mantenimiento su tono.

— Yo..

— ¿Qué estuviste haciendo ___? — repitió.

Un nudo se formó en mi garganta, decir que tenía miedo era poco. Mi cuerpo no respondía.

— Yo.... Yo salí de la casa — susurré rápidamente.

Un silencio se formó en toda la casa, el pequeño Damián veía extrañado nuestra actitud.

Solté un azote de mis muslos y y con fuerzas lanzó todo lo que había sobre la mesa. El bebé empezó a llorar y yo rápidamente me levanté para tratar de calmarlo, la mirada de Cinco era de irá pura, yo no sabía si tratar de calmar a mi bebé o a Cinco.

— Te juro que no pasó nada — me apure en decir — solo salía con Damián y jugaba en el lago luego volvíamos a casa, nunca pasó nada porfavor créeme — me excusé entre lágrimas.

Él se acercó a mi y trate de cubrirme con mis manos, sentí un par de brazos rodearme y una respiración chocando contra mi rostro.

— Y si sucedía algo malo?! — grito haciendo llorar más al bebé — ¿Y si le pasaba algo a Damián? O a ti? Eh?.

Mí cuerpo temblaba y mi boca era incapaz de soltar una respuesta a sus preguntas.

— ¿Cómo crees que podré irme de ahora en adelante sabiendo que eres una desobediente? — reclamó y yo solo seguía llorando tratando de calmar a Damián, el se alejó un momento y jalo su cabello desesperado mientras caminaba en círculos. Volvió hacia mí y tomo mi rostro entre sus manos — Entiende que si yo te doy una orden no es simplemente porque me nace de los huevos... Es para que estés segura carajo!!! — exclamó exaltado.

— Perdón... Perdón — dije entre lágrimas — Porfavor perdóname.

El volvió a abrazarme y beso mi frente.

— No lo vuelvas a hacer — dijo juntando nuestras frentes — No lo vuelvas a hacer — repito amenazante.

Asentí frenéticamente y lo besé con intención de que olvidé ese mal momento.

Hola putizorras 😘

Las ano 💕