John se encontraba en una situación complicada, su cabeza comenzó a dar vueltas que cada vez aumentaban su velocidad al punto de hacerlo vomitar ¿Qué debería hacer? ¿traicionar a los suyos por Chittaphon o traicionar a Chittaphon por los suyos?
Se encontraba totalmente atrapado entre dos mundos que parecían no querer darle tregua. Por un lado, la lealtad a la patria le obligaba a tomar una decisión difícil y dolorosa, mientras que por el otro, su amor por alguien le hace tambalear en su determinación
Es abrumador sentirse así, dividido entre dos fuegos que queman con la misma intensidad. Pero ¿qué puede hacer? ¿Cómo puede decidir qué camino tomar?
Sin embargo, sabía que cualquier decisión tendría consecuencias desagradables. Traicionar a su nación podría llevarle a una vida de remordimientos y arrepentimientos, sin olvidar que probablemente perdería a todos y hasta probablemente lo matarían, mientras que traicionar a su amante causaría un dolor inmenso
Pasaron dos días en los que nadie supo de John Suh, como era de esperar el capitán se acerco a su compañero de cuarto que también se veía algo decaído con la intención de preguntar que pasaba con el caballero y recibió las noticias que no tardarían mucho en llegarle al rey
Chittaphon cuando escuchó eso dejó todo lo que hacía y se dirigió a los cuarteles para visitar a su novio junto con su doctor de cabecera
Solo que cuando llegó, Doyoung entre abrió la puerta sin dejarle ver adentro de la habitación, diciendo que él estaba mejorando pero que no era el mejor momento, y en realidad no mentía
Pero antes de que cerrara la puerta Ten metió su pie entre ella y la pared para luego empujarla y entrar a la habitación, todo para encontrarse a quien buscaba en perfectas condiciones sentado en el balcón en completo silencio
Se acercó rápido a él — Estoy bien Ten, estoy completamente bien — fue lo único que dijo mientras reía a carcajadas excepto que su mirada seguía perdida en el horizonte ¿Acaso se estaba volviendo loco?
— Qué harías si invaden el reino, pero existe una posibilidad de salvarte, escaparías o morirías por la nación? — fue lo único que pensó, si Ten mostraba rendición tal vez Renjun pudiera tener algo de humanidad y lo dejaría en paz, deseaba que su pequeño novio le dijera que escaparía, ansiaba que fuera igual de egoísta que él
— De que estas hablando... obviamente moriría, yo soy el líder todo esto y si ellos mueren yo muero con ellos —
— Ya veo— dijo Johnny mientras se ponía de pie para tomarlo por el hombro y escoltarlo hasta la salida del cuarto
Salió a merodear en las calles viendo cada uno de los detalles que había en ellas. Mañana era su último día para matar a Ten, pero no pudo hacerlo, pero esta sería su última oportunidad. También pensó en contarle todo — el va a entenderlo — fueron las palabras que se comenzó a decirse a si mismo durante toda su caminata hasta que decidió regresar corriendo para ir al castillo a hablar con Ten
Subió las escaleras hasta llegar a la oficina que buscaba y a punto de desmayarse por falta de aire toco la puerta la cual fue atendida rápidamente por Yuna quien lo miraba con algo de asco como de costumbre pero esta vez no tenía la energía suficiente como para preocuparse y devolverle la desagradable mirada
ESTÁS LEYENDO
La traición del rey | JohnTen
Romance"Si muero podría estar contigo para siempre, pero si vivo puedo quedarme con mi familia y mi nación, son muy importantes para mi" - Los quieres más que a mí? - No, no quiero a nada ni nadie más que a ti....