La traición del rey | JohnTen

Amor Eterno

Busco sus mejores prendas, se bañó y se roció un perfume para ir al palacio

Al llegar se encontró con su ángel esperándolo en la puerta mientras se acercaba a él sacudiendo su pequeña y huesuda mano

No podía dejar de sonreír, aunque era pleno día, él brillaba más que el sol, mientras más se le acercaba más embobado estaba, no podía creerlo, no podía creer que alguien irreal como él fuera la luna que ilumina todas sus noches, que aquel cabello negro lo volvía loco, que adoraba tanto cada defecto como cada lunar que estuviera en su cuerpo, amaba absolutamente todo lo que lo conformaba 

Ni siquiera se dio cuenta de cuando es que el pequeño hombre llego a él y lo comenzó a jalar del brazo para llevarlo al carruaje pero al no ver respuesta del mayor decidió interrumpir su pequeño mundo — ¿Hola? ¿Tierra llamado a Johnny? — 

Haciéndolo reaccionar y que su luna se comenzara a reír para darle un pequeño beso en la mejilla y subir juntos al carruaje

Johnny decidió mantener todo el itinerario en secreto, hasta el final

ESTACIÓN 1: CUARZO ROSA 

La primera parada fue el desayuno en el cual la pasaron muy bien para después ir a la tienda de joyas 

El castaño en realidad lo arrastró ahí así que al entrar y empezar a observar toda la gran variedad de dijes y piedras que había en exhibición Ten jaló de la mano de su novio para decir 

— Johnny ¿Si sabes que no necesito joyas verdad? —

— Lo sé, pero quiero comprar una que sea igual para los dos — contestó sin despegar los ojos de los productos y provocando que Ten sonriera tímido y se sonrojara 

Después de un tiempo ¡lo encontró! unos dijes de cuarzo rosa así que compró dos pulseras y dos dijes para luego darle y el quedarse con el otro 

— Cuarzo rosa... Significa amor me gusta — dijo Ten mientras recibía el regalo con una gran sonrisa y se lo ponía en la muñeca 

— Cuando no este junto a ti, podré mirarlo y recordarte porque siento que ambos brillan igual de fuerte — 

Cuando dijo eso Chittaphon se avergonzó por aquellas palabras que se le hacían tan melosas pero a decir verdad le encantaban, Johnny tan solo era alguien tan tierno y lindo que le daban ganas de solo darle un millón de besitos por toda la cara 

ESTACIÓN 2 : COMIDA CONTIGO

Cambiaron de plaza y fueron a comer al restaurante del que Ten había escuchado hablar a sus amigos y lo disfrutaron demasiado, los platillos eran tan buenos como la compañía

También se encontraron una obra a la que asistieron y aunque no vieron ni la mitad de ella por los pequeños toqueteos mutuos podrían decir que disfrutaron su asistencia rogando porque no les pregunten de que se trato el espectáculo 

ESTACIÓN 3: VOLVEMOS AL INICIO

— Aquí es casi el final—

El pelinegro hizo un puchero al escuchar eso  pero se disolvió con su sonrisa cuando vio la gran feria llena de colores y figuras así que se bajaron casi corriendo tomados de la mano para ir de nuevo a jugar 

Volvieron a jugar el tiro con arco en donde Johnny era pésimo y comenzó la revelación 

— Recuerdo que la última vez hice una broma aquí y te molestaste—

— No me moleste—

— ¿Entonces? —

Y comenzó, decidió revelarle lo que Taeil le hizo a sus padres, era lo primero que le decía a Ten, era la primera vez que le dejaba ver al archiduque John Suh

Esa historia aun lograba invadirlo haciendo que mientras contara la historia algunas lagrimas escurrieran por sus mejillas las cuales después serían besadas por su novio para después atraparlo entre sus brazos

Ahora entendía que ya no estaba solo, ahora tenía a Ten. Ya tenía alguien en quien confiar, alguien quien no lo juzgaría, quien no lo vería como un demonio asesino, alguien consumido por un deseo de venganza

O al menos eso era lo que pensaba él, después de todo no podía leer mentes para descubrir que lo único que pasaba por la cabeza de su novio era "¿era verdad?"

Como sea los fuegos artificiales comenzarían pronto así que se seco rápido las lagrimas y tomo al menor una vez más por la mano para llevarlo a la explanada principal y así lograr tener la mejor vista