El Objetivo - WandaNat Adaptación

CAPITULO 9

Natasha arrojó su mochila junto con las otras, apoyándose contra un árbol mientras se frotaba los hombros. Estaba sin aliento después de la subida, sin duda todas lo estaban. Vanessa había dicho muy poco en la última hora, pero era una comediante y sólo había pedido descansar un par de veces. Natasha se había quedado con ella. Por alguna razón, le gustaba la mujer. Tal vez era debido a la valentía que vio a Vanessa reunir cada vez que llegaban a la cima de una cresta sólo para tener otra delante de ellas.
"Está bien, damas. Terminemos este día ¿de acuerdo?"

"¿De acuerdo?" Phillips la imito "Oye, caminemos durante un par de horas más, Sarge" "Todas lo están haciendo muy bien. Entrar en las montañas es la parte más difícil. Ahora que estamos aquí, el camino será más nivelado" prometió.

"Dijiste eso hace dos horas"

"¿Podremos tener una fogata?" preguntó Layla.

"Claro que podemos. La prohibición de fuego se ha levantado aquí" Wanda desenganchó su tienda de la mochila y encontró un lugar plano a pocos metros de distancia del grupo "Les sugiero montar primero sus tiendas. Una vez que comamos, la mayoría de ustedes querrá meterse en la cama y dormir"

"Por qué molestarnos en comer" murmuró Phillips "Podría caer en la cama ahora mismo"

Natasha estudió el área, preguntándose cómo iban a encajar once, no, doce tiendas allí bajo los árboles. Le dio un codazo Vanessa "¿Dónde está tu tienda?"

"Oh, estoy compartiendo con Celia. Dos por una tienda de campaña"

Natasha asintió. Tenía sentido. Menos peso, también. Pronto, seis tiendas de campaña…azules, verdes y una de un brillante amarillo…bordeaban los árboles. Ella montó la suya un poco retirada del grupo, pensando que les daría un poco de intimidad. Tal vez Wanda Maximoff tendría algún tipo de reunión prevista para más tarde. Aunque a juzgar por sus condiciones, la mayoría estaría dormida tan pronto terminaran la cena, con o sin fogata. Se puso sobre una roca plana y sacó su pequeño quemador de propano. Pronto tuvo agua caliente y buscó entre sus comidas liofilizadas, tratando de encontrar una que pareciera apetitosa ¿Spaghetti? ¿Por qué había comprado los espaguetis? Odiaba los espaguetis liofilizados.
Echándose hacia atrás, tomó un largo trago de agua y observó a las otras. La morena Phillips estaba pendiente de cada palabra de Wanda mientras les enseñaba a encender sus fogones. Sistema de compañeros nuevamente. Contó sólo cinco estufas.

"¿Necesitan ayuda?" Natasha expresó finalmente cuando una única estufa estuvo encendida.

"No. Tienen que aprender" dijo Wanda dándole la espalda a Natasha y viendo a las mujeres.

"Ya veo" se encogió de hombros. Al parecer, Maximoff todavía no está demasiado emocionada por su presencia allí. Bueno, ella tampoco estaba teniendo exactamente el tiempo de su vida. Si estuviese sola, aún seguiría haciendo senderismo. Había por lo menos una hora más de luz. Luego de haber instalado el campamento, comería y tal vez leería un poco. En las acampadas era la única ocasión cuando ella se tomaba el tiempo para leer. Sus días tan atareados le dejaban poco tiempo para tales placeres.
La conversación fue escasa cuando todo el mundo se puso a comer y Natasha se mantuvo a la distancia, permitiéndoles su tiempo. Incluso Vanessa parecía completamente agotada mientras comía en silencio, sentada a solas en un árbol caído, un poco retirado de la pequeña fogata. Ella nunca lograría hacer las dos semanas, supuso Natasha ¿En qué demonios estaría pensando Wanda Maximoff?

"Sé lo que están pensando" Wanda le dijo al grupo "Nunca lograrán superar estas dos semanas" Natasha levantó la vista ¿Podría la maldita mujer leer su mente? "Pero lo harán. El primer día es siempre el más difícil. Mañana será un día corto. Acamparemos por algunos manantiales de agua caliente. Podrán disfrutar de horas, si lo desean. Vamos a tomarlo agradable y lento. Sé que la caminata de hoy fue dura. Sólo vi a Phillips sacar su cámara, aunque sé que todas ustedes trajeron una. Pero confíen en mí, en los días por venir, querrán parar y tomar fotos y disfrutar del paisaje. Y antes de que se den cuenta, vamos a estar caminando por Monarch Pass y se preguntarán a donde se fue el tiempo"
Natasha se preguntaba si esta era una charla que tenía que transmitir a cada nuevo grupo cuando empezaban su salida. Sin embargo, ella había estado haciendo esto durante tres años. Al parecer, sabía lo que estaba haciendo.

"¿A qué altura estamos?" preguntó Celia "Ya está empezando a hacer frío"