one-sexs Tomtord

el amor duele

Pinche título genérico y poco original.

[Mattsworld]

(Sadismo)

Gritos y peleas, siempre lo mismo, esta rutina comenzaba a cansar al pecoso quien se dedicaba a beber de su refresco fanta ignorando los golpes y los gritos de Edd pidiéndole que vaya. Delineaba la barra observando a la ventana aún con los gritos de fondo, más sin embargo uno lo hizo reaccionar, de la nada todo se quedo callado más segundos después se escucho al noruego soltar un grito desgarrador junto con llanto, alarmado soltó su bebida corriendo a la sala encontrándose con el extranjero sufriendo en el suelo con el brazo roto por la mitad y el marino parado frente a el sonriendo dejando su pie encima de la cadera de su rival demostrando poder y dominancia, era todo un tirano.

-Tord!- llamo a quien lloraba tomando su brazo herido ya hinchado por el dolor.

-MI BRAZO! AH DUELE AH! MATT!- Lloraba como un niño llamando a su madre después de haberse caído, sin embargo esto era más serio, soltaba lágrimas de dolor cubriendo sus ojeras negras.

El líder corrió hasta a Tord empujando al moreno para que lo dejará en paz, se arrodilló con el cuernudo aún con la mirada de las cuencas sobre el.

-hey amigo! Vas a estar bien, solo es un brazo roto, nada que no pueda sanar!- sus nervios eran terribles que todo eso no sonaba muy creíble para el cuernudo, aun que las caricias en su espalda lo tranquilizaron un poco -Edd- llamo al vanidoso que había presenciado todo y estaba asustado -llama a una ambulancia!- el castaño asintió corriendo al teléfono mientras el pelirrojo se quedo consolando al menor.

-me duele Matt...-

-ya ya, Edd llamara por ayuda, no te preocupes-

Sintió retorcerse de ver al cuernudo ser tratado como un bebé solo por un brazo roto, aun que le gustaba ver como se retorcía y lloraba, le causaba un placer delicioso hacer sufrir a su rival. Celoso se marcho del lugar sin pedir perdón.

La casa se volvió más silenciosa después de que internaron al vocalista, no había más peleas y Tom prefería salir pocas veces de su cuarto dejando al artista solo con castaño, esto fue claramente notado por el pecoso quien no se detuvo a preguntar.

-Tom, tu si quieres a Tord, cierto?- comió de su cereal esperando respuestas.

-la palabra querer tiene mucho conceptos, tengo mi forma de querer lo pero la manera en que lo quieres no es comparada ni asimilada- estaba confundido, quiere decir que lo aprecia pero de una forma muy distinta, mostro preocupación tras no entender y recordar lo que había hecho con el pobre noruego -sin embargo no digo que no daría la vida si el estuviera en peligro..- esa frase logro calmar la angustia del dueño de la casa cambiando su mueca por una sonrisa amistosa.

-me alegra que lo quieras, quizás hoy puedas disculparte con el cuando regrese a casa- el contrario no dijo nada, mantuvo la misma expresión neutral durante toda la conversación posando sus cuencas solo en la comida.

El mayor no mentía, el de cuernitos regreso en la tarde con el brazo enyesado y una cara más irritada que lo usual, se encontró con su rival, ninguno dijo nada, solo continuaron su camino dejando a un molesto británico y un atemorizado chico de piel palida. Este último prefirió quedarse en su habitación a descansar jugando con su conejo de peluche.