¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Hoy le envié mi carta de confirmación a Ego Jinpachi
Estaba nerviosa, si, pero supongo que es normal luego de una decisión tan precipitada. Pero no me arrepiento.
Esa noche Rin no me dijo absolutamente nada, el tiempo que quedaba solo se limito a ignorarme y en el momento en el que su madre apareció simplemente se esfumó. Si se tratara de otra persona pensaría que se había asustado por lo que le dije.
Pero estamos hablando de Rin itoshi así que eso es imposible.
Justo estaba en el centro comercial comprando mis cosas de aseo personal. Según dicen que en Blue lock no le falta absolutamente nada a los chicos que residen ahí. Pero tratándose de una mujer- en mi caso- dudo que tengan las cosas que una mujer necesita. En especial "esas cosas" que utilizas cuando te llega el visitante cada mes.
Es mejor prevenir ¿No?
Según dijo Oliver que me alcanzara aquí en unos minutos, ya había echo las compras así que solo estaba perdiendo el tiempo mientras llegaba.
Saco mi celular de mi bolsillo y entro al chat que tengo con Oliver y dejo un mensaje.
Más te vale no hacerme esperar como la última vez, Oliver.
Su respuesta fue inmediata
Hermoso y guapo Oliver💗 No volverá a pasar, preciosa.
Rodeo los ojos al ver otra vez ese nombre estúpido, por si preguntan fue el que se agendo así en mi celular.
Más le valia no hacerme esperar otra vez.
Estaba caminado con mis ojos fijos aún en mi celular cuando de repente cocho con alguien y un líquido caliente cae en el área de mis pechos. Suelto un quejido al sentir el líquido caliente recorrer en mi piel sensible y me aparto para mirar a la culpable de esto.
Esa alta estatura,constitución delgada y de tonos claros, Cabello negro y gafas. Sonrió al verlo.
Este frunce el ceño, seguramente extrañado de que esté sonriendo cuando claramente acaba de derramar su caliente café en mis pechos.
— ¿Porque sonríes? Dios, acabo de marcharte esa camisa. Puedo cómprate una nueva o pagar la lavandería si quieres, fue un err-
— Calmate, Yukkie — suelto una risa al ver que hasta pálido se puso — No pasa nada. Sonrió porque me da gusto verte de nuevo.
Sonrie nervioso y mira el desastre que hizo en mi camisa, pero al ver dónde fue la zona afectada aparta la mirada con una leve rojes en sus mejillas. Se quita la gabardina de color beige y me la otorga, frunzo mi entrecejo ante eso.
— ¿Que-
— Tu camisa es blanca... Y se transparenta lo de abajo — me interrumpe carraspeando un poco su garganta — Pontela y porfavor acompáñame.
