CAPÍTULO 11

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ZONA DE RESGUARDO, INDUSTRIAS HALLEN

DENVER, COLORADO

08:45 p. m. Diciembre 15, 2033

Rose había salido del vehículo en el que habían llegado, volteó en todas direcciones como una manera de cerciorarse de que nada más que ellos permanecieran allí. Aquella planta era pequeña y había sido abandonada por una compañía de electrónica hacía unos pocos años y ocupado por el padre de Rose, al principio fue acondicionada con el fin del resguardo de muchos de los materiales primarios a usar dentro del complejo principal en ese mismo estado, pero justo unos meses después se reacondicionó para albergar a personas que requerían de asilo, además de contar con un almacén destinado para la protección de armamento perteneciente a esta misma industria, un hecho que a Rose no le agradó al enterarse, pero que claramente entendió debido a la gravedad de todo lo que pasaba; en ese momento agradecía que así lo hiciera su padre.

Emily procedió a hacer lo mismo acomodándose la bufanda ante el frío que afuera hacía. Su mirada se perdía en los alrededores, aquel sitio, a pesar de ser solo una planta pequeña, le parecía muy grande.

-Entonces, adentro hay más personas como... -Emily se detuvo de continuar al hacer un movimiento con sus manos en señal de evidenciar lo que quería finalizar sin palabras.

-¿Como nosotros? -cuestionó Rose sin necesidad de observar las manos de aquella chica que seguía luciendo temerosa-. Adentro solo hay personas dispuestas a hacer la diferencia, esa es la definición correcta -aclaró, el rostro de Rose se movió hacia atrás, hacia donde le seguía Emily y sus labios se extendieron hacia los costados mostrando una sonrisa cargada de confianza.

Rose extendió su brazo izquierdo al levantarse parte de las mangas de su gabardina, lo llevó sobre un panel de seguridad y de este se proyectó una luz roja que escaneó parte de su muñeca, la cual poseía un cierto tatuaje en forma de código de barra.

Un ligero sonido se escuchó y la puerta metálica se abrió de par en par. Ambas pasaron una gran explanada en el que solo se observaban viejos modelos de montacargas aparcados en sitios destinados para ello. Algunas de las iluminarias parpadeaban como si en cualquier momento fuesen a apagarse por completo. La apariencia de aquel sitio resultaba por demás desoladora y Emily se preguntaba si realmente aquello fuese un sitio de resguardo.

-Es por aquí. -Señaló Rose a Emily.

La situación ahora resultaba algo incómodo para esta última, pues después de varios años laborando y de tener contacto con aquella mujer con quien antes hubiese convivido sin ningún inconveniente, ahora le parecía estar con alguien totalmente distinta, para empezar tanto ella como su hermano jamás dedujeron que Rose tuviese cualidades extra humanas como ellos, algo que le sorprendía, pero igual le resultaba obvio al entender el porqué aquella gran industria albergaba a personas como su hermano y ella.

Ambas giraron hacia la izquierda, hacia lo que parecía ser una especie de almacén que debieron subir por casi dos metros. Al llegar a la entrada, Rose colocó una de sus manos sobre el muro adyacente a un panel de control y de inmediato se abrió la entrada. El rostro de Emily se extrañó al no ver más que un espacio lleno de equipos de metalurgia abandonados con baja iluminación.

-No te quedes atrás, la entrada está por aquí. -Rose se había adelantado y procedido a bajar los peldaños que la conducían hasta la parte donde se encontraban aquellos equipos en desuso. Emily le siguió al momento que la puerta retornó a su posición de cerrado.

-Puedo preguntar, ¿cómo es que mis hermanos sabrán llegar hasta aquí? -Emily mantenía fija su mirada sobre la parte trasera de la cabeza de Rose al no poder verla directamente a sus ojos.

Rose siguió avanzando, para Emily aquello le pareció que solo había ignorado su pregunta, así que se detuvo y su rostro, apenas iluminado, dejó en claro las señas de estar en desacuerdo de seguir por aquel lugar.

-Daren -pronunció al fin Rose al llegar a una puerta que parecía no tener manera de ser abierta, manteniendo su cuerpo de espalda a Emily-, a quien consideras como tu hermana, alguna vez investigó sobre lo que mi padre hacía -pausó al colocarse de frente a Emily, su brazo derecho se elevó hasta quedar en un ángulo de no más de cuarenta grados respecto a su antebrazo, los dedos de su mano se movían lentamente y de entre ellos pequeñas líneas electrificadas surgían y en breve la puerta se abrió-, claro, toda aquella información la reservó para poder mantenerlos a salvo a ti, a tu hermano y a todos los que podíamos resguardar. -Sus ojos se desviaron hacia uno de sus costados como si prestara atención a algo y agregó-: Hablando sobre ellos, están por llegar.

Emily se sorprendió ante aquella afirmación, ante la información que recibía, aquella mujer que alguna vez viera como una figura de protección y con quien podía acercarse a conversar, ahora parecía cambiar, se mostraba segura de lo que hacía y muy distante, sentía que entre ella y Rose había una línea muy lejana e imposible de acortar; su inseguridad se incrementaba.

Los labios de Emily estaban por dejar cabida a unas palabras cuando el espacio se sintió extraño, una especie de vacío que tiraba de ella, por lo que se vio obligada a desplazarse hacia atrás justo cuando los cuerpos de Daren y su hermano Nathaniel aparecieron de frente a ella.

Una sensación de alegría embargó a Emily al verlos de regreso, sintió que su cuerpo se desplazaría hasta ellos y de esa manera abrazarlos, pero no pasó, solo mostró una enfatizada sonrisa al tenerlos nuevamente cerca.

-No perdamos tiempo, adentro veremos los detalles. -Rose se había adelantado al cruzar aquella abertura, su cuerpo se sumergía y sus piernas parecían ser devoradas con cada paso dado. Daren pasó su mirada de aquella entrada a Emily y con una inclinación de su rostro le afirmaba de nuevo a esta última para que pasaran, los cuerpos de ellos tres se perdieron en el interior.

Aquel espacio, reducido, se iluminaba apenas por pequeñas líneas de una tonalidad rojiza con cada paso dado. Unos metros más abajo les esperaba una pequeña habitación por completo vacía y bien iluminada.

Daren volteó a su alrededor al intentar buscar algún medio de activación que diera con una entrada secreta a la ubicación mencionada para la revisión de los datos; en ningún lado encontró algo similar.

-Esto es lo que nunca encontraría la WCU a pesar de su búsqueda exhaustiva. -Al término de esas palabras aquel espacio se movió, la sensación era como si el piso donde se encontraran parados se desplazara, aunque realmente fuese toda la habitación.

-Los pequeños detalles -entonó Daren, sus palabras salieron de modo que aquello sonó de una manera de asombro, su rostro volteó a su alrededor para después posarse sobre Rose.

-No solo la WCU tiene su propia tecnología. -La mirada de Rose admiró aquel lugar, incluso para ella aquello le resultaba por demás sorprendente-. Creo que mi tío se había preparado para esto o tal vez para algo más, pero lo importante es -pausó, su cuerpo se movió y se colocó frente a los otros tres que le acompañaban, su rostro parecía suavizado, en ese momento Emily le recordó los días en aquel lugar en el que permanecieran a salvo por algunos años, cuando la actitud de Rose resultaba por demás tranquilizante-, que no estamos solos en esto.

La habitación paró de moverse, Nathaniel volteó hacia abajo como si buscara aquello que lo obligaba a moverse y detenerse de tal forma.

-Aquí estaremos bien en lo que analizamos los datos, bienvenidos a la zona segura. -El cuerpo de Rose se movió hacia el frente y de pronto la pared, que se había mostrado sólida, se volvió traslúcida y su aspecto le hacía ver como una especie de material viscoso. Rose caminó hacia el frente y su cuerpo pasó al otro lado sin ninguna complicación.


El legado: despertarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora