Pensé que en la universidad iba a ser distinto, pero me equivocaba, su recuerdo vagaba por mi mente, estaba más hundida que antes, el daño ya estaba hecho.
Cierto día caminaba por el campus y lo vi, quise darme la vuelta y en ese instante grito mi nombre, no tuve de otra que acudir.
— Es difícil localizarte, pareciera como si estuvieras huyendo— dijo acercándose Albert.
— Nuevas obligaciones, poco tiempo ya sabes cómo es esto— susurre.
— Olvidándote de todo eso ¿Por qué te pongo nerviosa?
— ¿Nerviosa? — pregunte tratando de no tartamudear o que mi voz sonara nerviosa. No estaba acostumbrada a que el estuviera tan cerca de mí de esa manera y mucho menos después de tanto tiempo sin verlo.
Mi respiración se volvió rápida mientras él se acercaba, la forma en que me miraba, era diferente. Y me preguntaba ¿lo hacía exactamente igual con todas las demás?
Me sonrió e inmediatamente supe lo que iba a suceder.
— Bueno, Sofía— se detuvo, observando todo el campus.
Pensé por un momento.
— Eh... ¿Te enseño el campus?
— ¿Por qué no nos sentamos solos? — pregunto.
— Sí, claro— asentí, y sonreí suavemente.
Hablamos por horas hasta que cayó la oscuridad. Lo Observe cuidado, preguntándome que estaba pensado hacer. Después de unos segundos, lo vi abalanzarse hacia mí, señalizándome que estaba a punto de envolverme en sus brazos.
Él sonrió inclinándose hacia mí, lo que hizo que mi corazón casi se detuviera, al acercarse me pareció que el tiempo se detuvo.
Todo transcurrió frente a mis ojos y no me daba cuenta de lo que sucedía, cuando sus labios cálidos se posaron sobre mis mejillas mientras se despedía.
— Hablamos esta noche— susurro.
Y me quede sola, junto en a la banquilla estupefacta.
No volví a tener noticias suyas, pero me sujetaba al recuerdo, era que él podía ser tierno y distraído también generoso, era distinto y lo distinto no siempre era malo.
Me tope tiempo después con el conversamos como si nada hubiera pasado Albert, seguía siendo arrogante y el playboy que siempre había sido.
— Las cosas pueden ser diferentes — respondió después de unos momentos.
No tenía idea de lo que significaba. Tenía demasiado miedo de preguntar. La reputación de Albert con las muy buena; él era demasiado inestable demasiado superficial.
Nos quedamos en silencio durante un momento. Albert se había sentado a mi lado y me comía con la vista, yo en cambio miraba mis pantalones.
Albert me dijo que cuando mis clases terminaran fuera con él tendría que decirme algo. Era bastante obvio que me ponía nerviosa cuando lo veía, y cuando me hablaba me estremecía.
Pensé que lo había superado, pero me temo que como muchas otras veces, me había estado engañando.
Mi corazón que había estado roto desde hacía dos años, pareció volver a ganar esperanzas y volver a recomponerse. Sin embargo apareció un pinchazo.
Nunca iba a ser capaz de salir adelante si estaba perdida en alguien más.
Por fin, pensé presa de emociones y sensaciones caóticas que no entendía — esta noche hablare yo o lo hará el — no iba a seguir viviendo en la incertidumbre.
Estaba en la parada de autobús para ir a casa de Albert cuando cayó una esfera gris del cielo me sorprendió un poco pero no me preocupe. En menos de media hora empezaron a escucharse explosiones y por la ventana vi la gente corriendo como huyendo de algo.
Un auto apareció frente al autobús el chofer para no chocar giro bruscamente y el autobús se balanceo.
No recuerdo nada después de eso desperté con sangre en la cara el vehículo se había volteado había gente muerta a mi alrededor ya era noche y había perdido todo el equilibrio y mi pierna se había fracturado de modo que no me quedo de otra que arrastrarme.
Cuando me arrastraba entre los escombros, algo me sujeto la pierna, dada la insistencia hale provocándome un profundo dolor cuando voltee me topé con esos ojos rojos mientras me inyectaba una jeringa en la pierna y me sentí cansada, a tal punto que mi vista se nublo.
![](https://img.wattpad.com/cover/77339337-288-k373781.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Amar En Medio Del Caos
Ciencia FicciónPara Albert la monotonía era inevitable y asfixiante pero no actuaba para cambiar eso. Ignoraba la importancia de las pequeñas cosas y quería cambiarlo todo tan fácilmente como suspirar. No se percató que todo lo que conocía iba a cambiar y que la...