El Libro de las Almas

Capítulo 12

- ¿Para qué me trajiste aquí? - preguntó, al mismo tiempo en que seguía aquella energía y Rin iba a su lado

- Cállate

- No pensé que podías trasladarte por tu cuenta

- Muchas cosas cambiaron

Traspasaron una especie de barrera e ingresaron a una mansión

¿Qué es este lugar?

El libro ingresó a la casa, recorriendo aquellos pasillos estilo laberinto, hasta que descendió al sótano y se posó sóbre otro pedestal mucho más lujoso que el del templo

- Ya entiendo - sonrió - Éste era tu hogar, ¿verdad?

El libro se elevó, abriendo sus páginas

- ¿Estás lista? - preguntó la voz demóniaca

- ¿No tenía que pasar un día?

- Ya te dije... que muchas cosas cambiaron

Aquella energía envolvió a la bruja, brindándole más poderes

Se siente... se siente pesado... no puedo... respirar

Cayó de rodillas, con su mirada apuntando al suelo

- ¿Qué... estas haciendo?

- Pronto todo terminará

Yorunokagi luchaba por mantenerse estable, miéntras, en un extremo de la habitación, su mascota observaba la escena junto a la joven poseída

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Abrió sus ojos lentamente, intentando reconocer aquel techo de madera

- Kagome - murmuró

- ¿Inuyasha? - miró a un costado y vio a su esposo, sentado a su lado - ¿Qué ocurrió?

- Estamos en la casa de Youmajo - la joven intentó sentarse - Déjame ayudarte - la sostuvo en sus brazos

- Al fin despiertas niña - se acercó la bruja, con un tazón en sus manos - Parece que necesitabas descansar

- Bueno - se tomó la cabeza - Mis energías se estaban agotando muy rápido

- Ten - le extendió el tazón - Ésta comida es muy eficiente para que te repongas, además, fortalecerá a tu hija

- Moroha - sonrió, bajando su mirada

- ¿Cómo se encuentra? - preguntó el híbrido, apoyando su mano en el vientre - ¿Hmn? - abrió sus ojos, en señal de sorpresa

- ¿Qué ocurre? - preguntó ella

- Nada - sonrió, mirándola con ternura

El vientre de Kagome ha crecido... es imperceptible para ella, pero mis sentidos son diferentes y puedo notarlo... eso significa que Moroha esta bien

- Tenemos que regresar con Sango y Miroku

- Aún no - miró a un costado - Recuerda que no tengo a colmillo de acero, si salimos de aquí, esa bruja podría atacarnos... no las pondré en peligro

Inuyasha

Sonrió

- Esa niña de Yorunokagi - cerró sus ojos - No sabe en lo que se ha metido

- ¿A qué se refiere? - preguntó la joven

- Ese libro... es una trampa

- ¿He? - miró el híbrido - ¿Una trampa?