—Así que, ¿Logramos conseguir el contrato exclusivo con los Maple Leafs de Canadá? —preguntó Ryan mirando a sus amigos y Justin asintió con una sonrisa.
—Nos encargaremos de la transportación de todo el equipo desde que aterricen en Los Angeles el jueves y cubriremos todos los juegos de temporada que tengan aquí y en Las Vegas—contesto Justin y todos asintieron emocionados. Tanto Justin como todos sus amigos eran fanáticos del hockey y desde pequeños jugaban y soñaban algún día con conocer al equipo natal de hockey los Maple Leafs. Tras varios meses reuniéndose con los distintos representantes del equipo, había logrado un contrato exclusivo de transportación para todo el equipo. Además de que tendrían entradas para todos los juegos de temporada y eso era maravilloso. ¡Su sueño de niño se había hecho realidad! Moria por ir a los juegos y llevar a su chica. Desde que se habían mudado juntos, él se había propuesto enseñarle todo sobre hockey para cuando llegara la temporada. La había sentado cada sábado en la mañana en el sofá y la ponía a ver las grabaciones de los juegos anteriores. Había sido realmente gracioso y un poco frustrante tener que explicarle cada detalle de los juegos, pero podría decirse que ahora su chica era toda una experta en hockey. ¡Hasta había comprado camisas personalizadas para ambos con el número de sus jugadores favoritos!
—Joder, eso es maravilloso—sonrió Chaz emocionado y todos asintieron. —Tenemos que ver si nos permiten jugar con ellos en su práctica, hace tiempo que no juego—comento y Justin sonrió. Él ya había hablado eso con el entrenador del equipo y este había aceptado, pero iba a mantenerlo en secreto para sorprender a sus amigos.
— ¿Y tú podrás ir al juego el viernes? —preguntó Ryan mirando a Justin y este frunció el ceño asintiendo. ¿Por qué le hacia esa pregunta? — ¿Seguro? ¿Qué harás con Holly? —preguntó preocupado y este sonrió. Ya entendía el por que la pregunta y la preocupación de su amigo.
—Vendrá conmigo, quiere que pasemos un tiempo a solas—contesto Justin y todos asintieron con una sonrisa. —Además, me mataría si no la llevo—rio negando. —Bien saben que ahora es fan número uno de los maple leafs y es capaz de pedirme el divorcio si no la llevo a conocerlos o a un juego—dijo y todos rieron asintiendo. Sabían perfectamente que su amigo no bromeaba; nadie nunca le podía decir no a la gran Holly Bieber. —Hablando de ella...—rio al sentir su teléfono vibrar y sonrió de ternura al ver el mensaje de ella diciéndole que lo extraña.
De seguro había odiado haberse despertado sola. El siempre esperaba que ella se despertara para darle un beso de buenos días antes de irse a la oficina, pero hoy había tenido que correr porque tenían una reunión importante con un cliente. —Me voy—dijo poniéndose de pie haciendo que todos sus amigos se quejaran.
— ¿Cómo que te vas? Apenas son las tres y aún quedan contratos por discutir—se quejó Chaz mirándolo y Justin se encogió de hombros. A él no le importaba el trabajo cuando se trataba de su chica; si esta le pedía verlo porque lo extrañaba él no dudaba ni un segundo en ir donde ella. Además, Ryan se hacía cargo de la empresa en su ausencia.
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Hands Of Love {Justin Bieber Short Story}
Short StoryJustin Bieber y Holly West sentían una fuerte atracción sexual por el otro. ¿Pero solo era eso o algo más? ¿Ella era simplemente la conquista del momento o algo más? ¿Él era más que una ilusión o algo más? Ella era la nueva masajista de su spa favor...