—Joder Chris, te he dicho que no voy hacer eso—bufó Justin y Holly corrió a la cama enrollándose en la sabana. Se arregló el cabello y se puso en una posición sexy. Quería sorprenderlo e iba hacerlo. De eso estaba segura. –Hermano, todos ustedes son pésimos dando consejos, mejor concéntrate en dialogar las quejas de los clientes—rio abriendo la puerta de la habitación. Los consejos de sus amigos sobre las relaciones y el amor no le servían de nada. Su relación con Holly jamás se compararía con las de sus amigos. Él no estaba casado ni tenía hijos con Holly, pero su relación era mucho mejor que la de ellos. –No jodas cabrón, tu estas...—se calló al ver a su chica mirándolo con una sonrisa pícara mientras permanecía envuelta en la sabana dejando sus piernas a la vista. La sabana apenas la cubría y llevaba labial rojo. El color favorito de este y amaba como le quedaba este a ella. su piel resaltaba mas y sus ojos verdes ni se digan. Sin duda toda una tentación. –Adiós—colgó antes de tirar el teléfono lejos y miró con incredulidad a Holly.
—Bienvenido a casa mi amor—susurró ella mordiéndose el labio con picardía y Justin tragó saliva con incredulidad. Estaba en shock, no podía creer como Holly lo había recibido. Se aflojó la corbata sin dejar de mirarla. No podía apartar la mirada de esta. De por si era preciosa, imagínense lo tentadora y exquisita que se veía siendo coqueta.
— ¿Qué significa esto? —dijo con la voz entrecortada y esta sonrió arrodillándose en la cama dejando sus muslos a la vista. La mirada de este cayó en sus piernas largas. Él amaba sus piernas, eran muy tentadoras sobre todo cuando ella las envolvía alrededor de su cintura.
—Es la bienvenida después de un largo día en el trabajo—contestó ella y Justin alzó una ceja. –¿Cómo estuvo tu día amor? —preguntó con picardía. Podía ver lo mucho que le costaba mantenerse de pie. Ella sabía que él estaba excitado. Que se estaba conteniendo para no perder el control y no mostrarse hambriento. Su excitación intensa podía asustarla y él no quería eso.
—Mal, muy mal nena—respondió Justin quitándose el esmoquin junto a la camisa. Se bajó los pantalones junto al bóxer quedando desnudo. No tenía por qué perder el tiempo. –Ayúdame a olvidar este día— pidió y Holly rio estirando sus brazos. Sabía que estaba mintiendo porque estaba desesperado por sentirla. Ella también lo estaba, lo había extrañado todo el día. Odiaba estar sola todo el día en esa casa tan grande. A veces se perdía de tan grande y silenciosa que era. Ni siquiera los del servicio hacían ruido.
—Ven aquí cariño—dijo tiernamente y Justin rio besándole los labios. Amaba lo tierna y coqueta que era a la vez. Le dio la vuelta colocándola sobre él y este gimió al sentirla cerca. Un poquito más y podría estar dentro de ella como quería. –Bienvenido a casa bebé—susurró está deslizándose hacia abajo haciéndolos gemir a ambos.
—Joder nena—gimió Justin abrazándola mientras esta daba saltitos lentos. Subió sus labios a los de esta besándola. Se había acostumbrado a ser recibido por ella luego de un largo día en la oficina. Desde que vivían juntos, ella siempre lo esperaba en la cama con la cena servida y con conjuntos sexy. Conjuntos que lo volvían loco, que lo dejaban sin aire cada vez que recibía una foto de esta mientras estaba en reuniones en la oficina. Se le olvidaba lo que tenía que decir a sus empleados. Es que cuando estaba con ella perdía la noción del tiempo y de todo lo demás.
—Bienvenido a casa—susurró ella entre gemidos y Justin sonrió besándole los labios. Amaba las bienvenidas que esta le daba. Cada vez que estaba dentro de ella se sentía en casa. Era su lugar favorito.
++++++
—Holly, tienes un cliente nuevo—le dijo Madison asomándose en su habitación y esta asintió con una sonrisa.
—Déjalo pasar—dijo Holly acomodando los aceites en el estante. Recogió la camilla y encendió velas aromáticas. –Buenos días—saludó volteándose a ver su cliente y abrió la boca sorprendida al ver a Jeremy, el papá de su novio.
ESTÁS LEYENDO
Hands Of Love {Justin Bieber Short Story}
ContoJustin Bieber y Holly West sentían una fuerte atracción sexual por el otro. ¿Pero solo era eso o algo más? ¿Ella era simplemente la conquista del momento o algo más? ¿Él era más que una ilusión o algo más? Ella era la nueva masajista de su spa favor...