Imagina con gormiti

Capítulo veinticinco

Narra Riff

En nuestro primer viaje, fuimos a mi hogar, el reino del fuego. Obviamente, hacia mucha calor en el camino. Por suerte, teníamos agua. Entramos al castillo y saludé a mi padre, el rey. Los otros, se arrodillaron ante él.

Riff: Hola padre. Ellos son mis amigos: Eron, Ikor, Drek, Erinelys y TN.

Rey Magmion: Hola hijo. Me alegro de ver que tengas amigos, pero no me alegro que te hayas hecho amigo de la tribu enemiga.

Riff: Lo sé. Pero Ikor es un buen amigo. Protegió a TN de los ataques con los darkans.

Rey Magmion: ¿En serio?.

Ikor: Si señor. Estoy dispuesto a hacer lo que sea por proteger a mis amigos y a cualquier que esté en problemas.

Rey Magmion: Bien, quiero que pruebes tu lealtad hacia tus amigos y a este reino. Quiero que te coloques en la soga de allí arriba y en el amigo que más confíes, te guiará. ¿A quién eliges para que te guíe?.

Ikor: Elijo a... Eron.

Rey Magmion: Bien, pues... éstas, son las reglas. Tienes que cerrar los ojos y confiar en el compañero que elegiste. Los demás, se quedarán en silencio. Si pasas esta prueba, sabré que eres leal a tus amigos y al reino.

Ikor cerró los ojos, respiró hondo y comenzó a caminar con las indicaciones de Eron. Siguieron así durante un rato. Hasta que los darkans, comenzaron a atacar el reino. Eron e Ikor pararon de hacer lo que estaban haciendo y nos siguieron hasta afuera. Cuando salí, un darkan por poco me ataca, pero por suerte, Ikor me protegió. Le di las gracias y él asintió. Todos invocamos a los héroes y los darkans fueron derrotados con tan solo unas ráfagas de todos los seis elementos. Volvimos al castillo y Eron dijo:

Eron: Su majestad, ¿proseguimos con la soga?.

Rey Magmion: Jaja. No será necesario jovencito. Ya tu amigo probó su lealtad al proteger a mi hijo y al reino.

Riff: El rastreador dice que la pieza del elestar está cerca.

Eron: ¿Y qué estamos esperando?.

Eron salió corriendo del castillo. Nosotros nos despedimos de mi padre, y fuimos a donde estaba Eron, que se encontraba no muy lejos del castillo en un árbol mediano y allí estaba la pieza del elestar. Eron lo agarró y lo guardó en su bolsillo. Todos saltamos de alegría y nos fuimos al segundo reino, que era el de Drek.