Al llegar al salón de Ciencia sólo entré callado y caminé rápido a tomar un asiento, tomé el primero que vi, donde se sentaba Jeongin, un amigo que me dejó de hablar de un día para otro. Estar a su lado era realmente incómodo, ninguno decía una sola palabra.
- Muy bien chicos, esto fue todo. Espero que no se les olvide entregar la maqueta para el jueves. - Dijo el profesor mientras salía del salón, ya había acabado la clase.
Pasaron horas de clase y no me vi con los chicos en todo el día, tampoco hablé con Jeongin, quería hablarle pero el demostraba ni un mínimo interés en mí... Vaya.
Ya eran las 6:00pm y ya estaba saliendo de clase, fui a una tienda cercana y compré el ramen más barato que vi.. Digamos que mi estabilidad económica no es tan buena, la mayoría de veces no ceno, mis padres gastan todo su dinero en alcohol y cigarros.
Después de comer comencé a caminar hacia mi casa, en medio del camino sentí que me perseguían... Efectivamente, ESTABA EL MALDITO DE SUN CON SU PUTA SONRISA A POCOS METROS DE MÍ.
El miedo que sentí fue inexplicable, sólo comencé a correr intentando encontrar un lugar con gente pero casi todo estaba vacío. Mis piernas eran débiles, no podía correr. Anemia de mierda.
Después de unos minutos me alcanzó y me acorraló en un rincón de una calle totalmente vacía, luego escuché más pasos. Eran más chicos, de último año.
- Oye. - Dijo Sun tirándome al suelo, agarrando mi mochila para sacar lo que había dentro tirándo todo arriba de mí.
No pude responder, estaba temblando de miedo. No quería que me hiciera daño.
- ¿Acaso no hablas o qué? Maldito, no me esperaste en la salida. ¿Se te olvidó que te dije que harías mis tareas? ¿CÓMO MIERDA LAS VAS A HACER SI NO TIENES MIS CUADERNOS? - Dijo Sun para luego darme una patada en el estómago haciendo que casi no pudiera moverme.
- Cálmate Sun. - Dijo Jay, uno de sus amigos.
- No me pidas que me calme imbécil. - Volteó a verme.
Comenzó a poner sus cuadernos en mi mochila y luego la dejó en el suelo.
- Todas esas tareas, las quiero para mañana.
Asentí creyendo que se iría y podría levantarme para ir a casa pero un golpe en mi cara cortó mis pensamientos.
- ¿Creíste que acabaría? No.. Aún sigo furioso Hyunjin, no sabes cuánto. - Comenzó a golpearme de manera que mi cuerpo casi no podía moverse. Casi no sentía mis piernas, dolía mucho.
Agarró un cutter que tenía en su bolsillo y tomó mi pierna izquierda. Comenzó a marcar su nombre en mi extremidad dejando salir varias gotas de mi sangre.
Grité de dolor y sus amigos me pusieron sus manos en mi boca para que no se escucharan mis gritos, sólo mis llantos ahogados y las lágrimas corriendo por mis mejillas.
Después se detuvo y vi mi pierna marcada, con su nombre en ella. Luego escuché las siguientes palabras.
- Así no te olvidarás de mí, todos los días a las 6:15pm nos veremos aquí, ¿entiendes Hyunjin?. - Dijo mientras sonreía y se levantaba a limpiar el cutter.
Asentí sin dudarlo, sólo quería que se fuera. Luego de asentir el se fue sin más y pude dejar de contener todo mi llanto y comencé a llorar desconsoladamente en aquel lugar, preguntándome por qué me sucede esto, ¿que fue lo que hice?.
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"Quebrado por la vida" - Hyunjin.
Teen FictionCada día desde aquel verano la vida de Hyunjin se volvió amarga, llena de llanto y dolor, algo que no podría ser sanado tan fácilmente... A menos que alguien llegara a su vida para cambiarlo. - Historia basada en experiencias reales del autor. - Pod...