Ultraviolence | Izana x Lectora ☹︎ (2)

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A petición de ustedes, decidí hacer un final "feliz, pero con algo de realismo" (este no es el final, pero así estaré desarrollando la historia para que estén un poquito informad@s.)

Después de meses de sufrimiento e intentando huir por tu propia cuenta sin ayuda de alguien, era inútil.

Una vez intentaste uir en plena noche. Medio Tenjiku te encontró y te entregó a Izana nuevamente, el castigo qué te dio por intentar huir por milésima vez fue horrible, igual que los anteriores, pero iba empeorando.

Estabas ya a punto de cumplir 17 años, el tenía 22 años ya.

Hoy fue un día en donde intentaste huir con tus 2 hijos, actualmente un niño de 2 años y otra de 1 año. tenerlos fue horrible, aunque pareciera cruel, no les tenías cariño, pero si lástima.

Izana solía ser un buen "padre", pero nunca demostró respeto a ti delante de ellos, así que por instinto se asustaban cuando te levantaba la voz o maltrataba. Tampoco era de ocuparse mucho de ellos, la responsabilidad de cuidar de ellos siempre fue tuya.

Izana estaba molesto otra vez, por que como lo escribí antes, intentaste huir con los dos hijos.

Quisiste llevarlos porque Izana no era tan responsable, solo les daba cariño, pero hasta ahí.

Izana: ¡Encima quieres quitarme a lo que más amo! -te jaló del brazo.

Tu brazo ya estaba rojo y morado de tantos malos tratos.

-¡Ya sabes que nunca quise estar aquí! -trataste de quitar su mano- Por mi, p-puedes quedartelos... -no estabas segura de lo que decías, ellos te estaban escuchando, pero son humanos. ¿Pueden entender lo que dices?

Izana: ¡No digas eso, idiota, también son tus hijos!

- ¡Pero yo no quise tenerlos! ¡Suéltame ya!

Tu hijo mayor se veía asustado, este abrazaba a la menor.

A fin de cuentas, terminaste siendo tratada igual que tu madre...

Ya habías vivido lo que ellos estaban mirando ahora, así que decidiste calmarte y aguantar el dolor.

- Hablemos bien en otra parte. -tragate saliva, este seguía apretando tu brazo.

Izana te soltó y se fue de ahí asotando la puerta de su habitación.

No podías creerlo, todo este tiempo lo que viste en tus padres, cada pelea, discusión e insulto era igual a tu vida de ahora, vida que nunca pediste.

Con un poco de vergüenza, te acercaste a abrazar a los dos niños, estos estaban un poco extrañados por tu tacto, normalmente no lo hacías, a menos de que Izana te obligara.

- No pasa nada.

Aunque pensándolo bien, era más diferente a tu infancia, tu mamá nunca te consoló por lo que escuchabas.

-¿tienen hambre? -hablaste con tristeza, tratabas de limpiar tus mejillas húmedas sin que ellos te miraran.

La menor asintió, de inmediato los llevaste a la cocina para cocinar algo que a ellos les encantaba y era como una cura por las cosas malas que escuchaban y veían a diario.

Estabas más tranquila esperando a que los dos terminaran de comer para poder lavar los platos utilizados.

En un momento inesperado, sentiste las manos frías de Izana abrazarte, su contacto siempre te causó asco e incomodidad, no importaba el momento u hora, siempre era así.

Izana: lamento haberte tratado así frente a nuestros hijos. -besó tu mejilla, tarde después la limpiarías.

- no me toques...

Izana: Sabes que tu opinión me importa un carajo.

Izana se acercó hasta su hija y platicó con ella, aun no hablaba bien, pero le gustaba ver a su padre.

El niño mayor era todo lo contrario, te prefería mil veces a ti, pero Izana lo quería igual.

Izana: Saldré, tengo algo importante que hacer. No me esperes y no intentes hacer tus idioteces de siempre, Tenjiku está informado, si lo haces la pasarás mal otra vez.

No querías tener un tercer hijo, así que por hoy te aguantarías para no escapar.

Izana se despidió de ti con un beso forzado, una vez fuera, salió a gran velocidad en su auto.

En noches como estas, venía Kokonoi, extrañamente le gustaba convivir con los dos pequeños, siempre traía regalos caros para ellos.

Izana ni siquiera estaba enterado de nada, así que era tranquilo al saber eso.

- ¿quieres algo de tomar? -ofreciste, este estaba entretenido jugando con la menor.

Koko: oh no, ______, así estoy bien. A demás, no puedo quedarme mucho tiempo, tengo que atender algunas cosas por ahí.

- bueno, está bien.

Koko: ¿tiene 1 año ya?

- Si. -suspiraste.

Koko: discúlpame, pude impedir esto...

- oh, no, lo hecho hecho está... -hablaste con desánimo, Kokonoi no supo que decir.

Koko: escuché que Izana tiene amenazas de muerte. ¿Qué harás si le hacen algo?

- celebrar. -Koko parecía algo incómodo, pero no estaba para juzgarte o cuestionarte, era obvio y justificado tu odio.

Koko: ¿te gusta alguien por ahí?

- No... Izana me mataría si se entera de algo así, pero el si puede acostarse con cualquiera que se le cruce...

Koko: wow... Eso es caer bajo...

- lo sé, pero no me molesta, me molesta que yo no puedo hacer algo así, sino la gente me diría zorra u ofrecida, pero si un hombre lo hace está completamente bien...

Koko:¿no puedes hacerlo?...

Había una extraña tensión en este momento, pero no era desagradable para los dos...

Tus hijos corrieron hasta el cuarto jugando a las atrapadas, eso quería decir que Koko y tú estaban solos...

Kokonoi miró tus labios, estos estaban con un poco de heridas al rededor, pero, no le molestaba en lo absoluto.

- Koko...

Koko: no haré nada que tu no quieras.

El trató de olvidar y borrar sus pensamientos, hasta que...

- no me molesta.

La primera en acercarse fuiste tu, te uniste a sus labios, el estaba bastante sorprendido, pero no incómodo, era algo que deseaba desde tanto tiempo.

Se separaron cuando escuchaste a tus
dos hijos venir hacia ti, te mostraron un dibujo.

Era algo tierno para Kokonoi y para ti.

Escribir esto con el op de your lie in april de fondo es raro Jaja:(.