7.- El Dulcero

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El Lunes llegó. El elfo partió temprano. Llevaba un uniforme deportivo, como un elfo del deporte debería, con el número 10 en la espalda porque este era su número de la suerte. También tenía zapatos que eran un poco como zapatos de correr. Podía correr tan rápido en ellos que no podías verlo de lo rápido que saltaba. No olvidemos la libreta que siempre lleva consigo a donde quiera que vaya. En ella escribía tres sugerencias para aquellos que querían mejorar sus vidas y lograr el éxito en los deportes.

Cuando el elfo llegó al pueblo corriendo a una gran velocidad, se detuvo frente a una casa donde todo estaba cubierto en basura

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Cuando el elfo llegó al pueblo corriendo a una gran velocidad, se detuvo frente a una casa donde todo estaba cubierto en basura. Afuera de la casa habían envolturas de dulce, latas desechadas, y botellas. Todo esto había sido tirado fuera de la ventana así que el jardín estaba lleno de basura.

¡Todos sabemos, por supuesto, quién vive ahí! Esta era la casa de Ziggy, Ziggy el dulcero. El elfo vadeó a través de la basura y se asomó por la ventana. Ahí estaba Ziggy, sentado en la cama con casi cinco kilos de dulce que se estaba tragando, al igual que papitas y un refresco para beber.

Cuando Ziggy tenía siete años le dieron un disfraz de Superman. En ese entonces corría por todo el lugar. Pero después de eso comenzó a comer enormes cantidades de dulces y dejó de ser capaz de correr. Casi dejó de ser capaz de moverse. Sólo se sentaba en la cama y tragaba dulces y eventualmente ya no podía moverse más.

Este seguía siendo su disfraz favorito y nunca se lo quitó. Pero a decir verdad, le quedaba pequeño al niño dulces y en realidad las costuras estaban estallando. La capa, que se suponía que bajara hasta sus tobillos, ¡colgaba como ropa detrás de su espalda! Sí, no era bonito ver al niño dulces con disfraz de Superman mientras inhalaba dulces en una cama cubierta de envolturas.

 La capa, que se suponía que bajara hasta sus tobillos, ¡colgaba como ropa detrás de su espalda! Sí, no era bonito ver al niño dulces con disfraz de Superman mientras inhalaba dulces en una cama cubierta de envolturas

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El elfo salió disparado a la casa y entró al cuarto de Ziggy antes de que pudiera parpadear.

"Buen día," dijo Sportacus.

Ziggy miró al elfo con asombro:

"¿Quién eres tú?"

"Soy Sportacus El Elfo del Deporte," respondió el elfo.

"El Elfo del Deporte, huhh... No tengo nada qué decirte ahora." dijo Ziggy y continuó comiendo.

Entonces Sportacus dijo:

Áfram Latibær! (¡Vamos, LazyTown!)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora