UNA AVENTURA ENTRE AMIGOS [SKK]

¿NUESTRO HIJO?

Dazai y Chūya seguían siendo los mejores amigos después de hacer aquello de lo que ahora se arrepentían. Fue el celo de los dos el que los hizo actuar de esa manera, pero se habían disculpado con el otro y todo volvería a la normalidad. ¿O no?

Sucedió hace tres semanas, y Chūya se había estado sintiendo extraño. Salía corriendo a vomitar, se mareaba, sentía cansancio la mayor parte del día. Lo que más lo atormentaba era saber el porqué de sus malestares.

El pelirrojo buscó a su amigo en la hora del descanso luego de ir al baño.

— Dazai... ¿Puedes venir un momento?

Chūya jaló uno de los brazos de Osamu, interrumpiendo su conversación con los demás compañeros de clase.

Dazai siguió a Chūya hasta otra aula, alejada de los demás. Entraron, y cerraron la puerta tras de sí, para evitar que alguien oyera su conversación.

— ¿Qué sucede, Chūya? Te noto preocupado.

Chūya inhaló y exhaló para disponerse a hablar.

— Estoy preocupado, Dazai. ¿Recuerdas la noche que nuestro celo... Bueno, la noche que lo hicimos?

— Sí, lo recuerdo perfectamente. Aunque me gustaría no volver a tomar el tema, Chūya, por el bien de nuestra amistad.

— No quería atormentarte pero esto me está atormentando a mí solo. Escucha, y por favor, responde.

Dazai se quedó en silencio para escuchar.

— Me he estado sintiendo mal estas semanas y... Fue a hacerme estudios a la clínica. Dazai, estoy esperando un bebé. Un hijo tuyo y mío. ¿Qué debería hacer? Mis padres... No puedo decirles. ¿Debería abortar? Acompáñame a la clínica para abortar más tarde, yo...

Dazai sujetó ambos hombros del pelirrojo, sin decir una sola palabra durante segundos. Lo miró a los ojos y lo abrazó.

— ¿Eh? ¿No.. estás molesto conmigo?

— No podría estar molesto con mi mejor amigo que me hará padre. Ten a ese bebé, Chūya. Lo vamos a criar juntos. Buscaré un trabajo para poder darle todo lo que necesita y hacerlo muy feliz.

Dazai se agachó, quedando a la altura del vientre plano de Chūya y le dió un tierno beso. Chūya se sonrojó.

— Pero... Los amigos no tienen hijos, Dazai. Te estoy quitando la oportunidad de salir con alguien que de verdad te guste. De amar a alguien...

— Prefiero amar a mi bebé que amar a alguna chica de la preparatoria. Y cuidar de Chūya.

Esa misma tarde, saliendo de clases, ambos fueron a ver la ropa y accesorios para bebé. Chūya aún sentía un poco de nerviosismo por cómo reaccionarían sus padres, pero al ver lo emocionado que estaba Dazai, se tranquilizaba.

— ¿Niño o niña? Compremos ropita amarilla, Chūya.

— Sí. Amarilla está bien.

¿Le darían oportunidad a esta historia? <3

Prometo Soft y SOUKOKU.