❛I hope you'll still be there❜ ๑ hopev

cuando eres joven, asumen que no sabes nada

Hoseok ha estado actuando raro... diferente, con más exactitud. Taehyung no asegura conocer por completo a la persona que se pasa un cuarto del día en su departamento, pero al menos puede darse el lujo de decir que le conoce lo suficiente para saber que algo está fastidiándole o una idea está rondando por su mente. No está seguro de qué es lo que causa que Hoseok, de a momentos, se pierda en el espacio-tiempo, pero está empezando a preocuparle. Por supuesto, sabe que el ritmo de la labor de la empresa ha aumentado en evidente medida, así que no quiere presionar. Solo han sido unos días, no lo suficiente para empezar a hacer preguntas. Además, no es que Hoseok descuide su relación, en absoluto... Todo lo contrario.

La última semana el muy tonto se la había pasado a su lado, como si separarse fuera un castigo que no quisiera recibir, siempre sobre él. No le molesta, ha determinado que le gusta demasiado que Hoseok demuestre que la mejor parte de su día es cuando están acostados, hablando de todo y nada, entre besos perezosos y dulzones que, en otra ocasión, le habrían hecho tener expresión agria de "qué cursi". Pero aunque Hoseok se mantiene siendo igual de atento y apacible a diario, aún existe una diferencia. Taehyung no puede asegurar qué ha de ser con exactitud, pero puede percibirlo... Lo hace cuando a la hora de salida, mientras se acerca al lugar donde Hoseok está esperándole, le ve con expresión contrariada, tenso, suspirando y pareciendo no tener un buen momento, hasta que él se acerca y entonces por fin sonríe, aún luciendo cansado. Le hace preguntarse si es que su novio está lo suficientemente agotado como para detener los encuentros diarios por un tiempo. Se lo había sugerido, de hecho, pero Hoseok siempre negaba diciéndole que estar juntos hacía el día mejor, que su presencia se llevaba el malestar como el océano lavando todo con sus olas.

—Insisto en que deberías ir directo a tu departamento, sabes que puedo tomar el bus. —Sí, iba a volver a la carga una vez más. Hoseok sonríe apenas y niega con la cabeza. Él suspira—. Terco.

—Si estás preocupado por mis horas de sueño, entonces tomemos una siesta juntos —dice, divertido. No es una mala idea, puede notarlo cuando Taehyung parece meditarlo—. Me conozco, precioso. Sé cuando necesito estar en mi cama, mi espacio. Ahora quiero estar contigo —Hoseok logra estacionar el auto, soltando lento el manubrio para enfocarse en su novio—. ¿Me dejarás, cierto? Déjame estar contigo.

Taehyung desvía la mirada, sintiéndose tímido de pronto. La pasión en las palabras de Hoseok han causado que de pronto quiera salir del auto y gritar, o llorar mientras ve alguna película romántica mezclada con comedia de los 2000. Balbucea un "sí" que no está seguro de a dónde va, pero sabe que ni siquiera necesita responder porque Hoseok lo sabe, debe saberlo. Debe saber a la perfección que él nunca podría decir que no, que no tiene la posibilidad de desistir, que dejaría que el hombre a su lado se lleve sus sentimientos, su juventud y sus sueños. Se rinde con su propósito cuando Hoseok le toma el rostro con delicadeza y fuerza a la vez, y le besa. Jodidamente le besa, y Taehyung tiene que rodearle el cuello con sus brazos porque nunca es suficiente cercanía.

—Te quiero, tonto —dice a centímetros de la boca de Hoseok—. Mi casa siempre tiene un espacio para ti, ya lo sabes.

—Es bueno saberlo. —Es la respuesta, besos cortos incluidos—. O tendré que llevarte a vivir conmigo para tenerte a mi lado el día completo —continúa, con la mejor de las sonrisas.

—No exageres. —Entre risas, apoya su rostro en el hombro ajeno. Se toma un momento para pensar un poco más en lo que ha estado rondando por su desordenada mente—. Hoseok... ¿está todo en orden? —pregunta, sintiendo que la mano que acaricia su cintura se detiene de pronto.

—¿A qué te refieres?

—Te he notado tenso, ¿hay algo que esté molestándote? —Es más directo esta vez, las caricias vuelven—. Te hice todas las ofertas para que vayas a directo a tu casa a descansar por una razón, sabes. Creí que podrías estar hecho polvo gracias al trabajo.