• Mi Secretaria || Pablizza •

CAPITULO VIII

PABLO

Definitivamente la familia de Marizza era como me la imaginaba, unida, sencilla y sobre todo cariñosa y amorosa y eso que aún no conocía a sus abuelos y por supuesto a la festejada, por un momento cuando salieron sus hermanos creí que saldría mal parado pero gracias a dios todo salió bien, no creo que hubiera sido una buena primera impresión si golpeaba a sus hermanos. Cuando Mica y Laura -novias de sus hermanos- se llevaron a Marizza a la cocina sabía que vendría el típico interrogatorio.

-Dime Pablo cuanto hace que conoces a mi hija?-Pregunto el padre de Marizza.

-Cinco años Señor.

-Vaya, mucho tiempo ¿Donde se conocieron?

-Trabajamos en la misma compañía y también la conozco desde antes, éramos amigos. -No sabía como tomaría la familia de Marizza la noticia de que yo era su jefe y sobre todo el dueño de la constructora, es por eso que no dije mas.

-Oh, ahora entiendo porque se conocen desde hace tiempo, lo que me extraña es que no la haya escuchado hablar de ti antes ¿A que te dedicas?

-A la industria de la construcción, soy arquitecto.

-Sabes que Marizza es la mas pequeña de la casa ¿Verdad? por lo tanto las mas protegida y al igual que con todos mis hijo espero lo mejor para ella ¿Como piensas mantenerla?

-Ya basta de preguntas incomodas Martin, no es como si nuestra hija se fuera a casar con el en una fecha proxima. -Dijo Sonia, si ella supiera que esa era mi intención. -Además ya sabes que Marizza tiene novio. -Al parecer Marizza no les había dicho que Javier era historia.

-Creo que se te a pasado un pequeño detalle por alto Sonia. -Dijo Martin. -Porque a mi no se me a pasado desapercibido las manitas sudadas que han tenido estos muchachos desde el momento de su llegada y sobre todo si no estan juntos ¿Por que lo a traido?

-Si mama, desde que llegaron se noto que Marizza esta con Pablo y no con el otro estúpido, a menos que este haciendo una doble jugada. -Dijo Felipe encogiendose de hombros.

-Pero "ese estupido" me llamo ayer... -Sonia estaba tratando de darle sentido a lo que le decían, no termino de decír la frase cuando el timbre sonó, al parecer ya estaba aquí la festejada.

Marizza salió a toda prisa de la cocina en dirección a la puerta, se nota que extrañaba mucho a su hermana por la manera de correr para recibirla, Sonia aún no terminaba de entender lo que pasaba.

De repente escuche a Marizza levantar la voz desde la puerta, al parecer no era la festejada, no pude evitarlo y me acerque para ver que pasaba y ahí estaba el idiota de Javier.

MARIZZA

Maldición, maldición, maldición, maldición repetía una y otra vez en mi mente.

¿Como se le ocurría a Javier presentarse en casa de mis padres después de lo que paso? ¿Qué no entendía que esa era su peor jugada?

Tenía que hacerlo irse antes de que Pablo y mis hermanos lo vieran, aunque mis hermanos no supieran el por que había terminado con el, ni siquiera les había dicho que había terminado con el...

Salí lo mas rápido que pude a la puerta y una vez que la abrí allí fuera estaba Javier con un enorme ramo de rosas rojas y una sonrisa en sus labios.

-¿Qué haces aquí J-javier?

-Hola a ti también, yo estoy muy bien ¿y tu? -Dijo acercándose para darme un beso pero antes de que lo hiciera me aleje y volví a repetir:

-¿Qué haces aquí Javier?

-Pues como me dijiste que no podíamos vernos para hablar por que tenías que venir a visitar a tus padres pensé que sería buena idea venir. -Dijo muy tranquilo como si nada hubiera pasado.