• Odd •

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-Tae, baja a desayunar.-gritó mi mamá desde el primer piso.

-Voy ma, no me presiones, no sé qué ponerme hoy.-dije soltando un berrinche matutino, como es de costumbre.

-Da igual amor, con todo te ves bien-

-Tiene razón, me veo genial, yo lo sé, todos lo saben, tú lo sabes jeje-añadí mirándome al espejo, me gusta darme ánimos antes de ir al instituto para continuar con mi calvario personal llamado Lee Hyunje, mi ex novio desde hace como 1 año, él es la razón por la que solo tengo dos amigos y ningún pretendiente, aunque en realidad a estas alturas ya no me interesa, pero, ya me estoy cansando, he intentado de todo...

Bajé las escaleras apresuradamente, hoy solo peiné mi cabello celeste, me encanta este tono, lo eligió Jimin en una tarde que salimos de compras, él es rubio, es hermoso, si no fuera un doncel como yo seguramente seríamos pareja la más poderosa y mataríamos a Hyunje sé que Jimin me ayudaría a esconder el cadáver, eso hacen los amigos, creo.

-Buen día ma, se ve rico-dije dándole un beso en su mejilla, mi mamá se llama Yeji, es una mujer demasiado hermosa, he ahí de dónde salió toda mi belleza, parfavarr.

-Apresúrate que ya es tarde, siempre demoras tanto en cambiarte-refunfuñó mamá.

-Lo siento, me gusta ir bonito al instituto para que todos vean lo que no pueden tener, incluído el acosador- así llamaba a Hyunje casi todo el tiempo, mi mamá sabe toda la historia, ella me ha ayudado mucho, incluso se acercó a los padres de mi acosador para darle las quejas sobre lo que me estaba haciendo, pero no cambió nada, ellos simplemente se mantienen al margen. Me plantee ponerle una orden de alejamiento, pero lo cierto es que Hyunje no se me acerca casi nunca, solo tiene amedrentado a todo el instituto, y pues lo intenté, pero no me tomaron muy en serio ya que no habían "pruebas suficientes para su acoso" y que no era para tanto sino un "simple juego infantil" me enojé mucho y decidí dejar que a mi acosador se le pase su enfermiza obsesión conmigo, se aburra y me deje ser feliz, mamá no estuvo muy de acuerdo, pero ella tampoco tenía idea de qué más hacer.

Salí pedaleando muy suavemente mientras disfrutaba de la brisa de hoy, está fresco, las hojas de los árboles danzan al son de la ventisca, y los pajaritos cantan incesantemente. Adoro este clima, me hace olvidar de mis problemas, me hace sentir libre.

Que nostálgico.

Jimin me esperaba en la entrada del instituto, siempre lo hace, llueva, truene, así yo llegue tarde, él siempre estaba ahí, y viceversa. Su bicicleta es doraba, la mía es verde.

-Llegas tarde baboso, prometiste que no lo harías, y lo prometiste por el meñique, acaso ¿eso no significa nada para ti? ¿este es el fin de nuestra amistad? son años de lealtad y acompañamiento moral, ni creas que te voy a pagar el dinero que me prestaste, es lo menos que me debes por esta decepción- terminó diciendo mi amigo el más dramático.

-Buenos días a ti también Mimi, se me hizo tarde porque no sabía qué ponerme, vamos entrando-contesté ingresando a la escuela.

-Ah oki, hubieras empezado por ahí, espérame azulito-respondió el rubio corriendo detrás de mí.


🫀

Tae y Jimin se encontraban comiendo en las gradas del patio de afuera, mientras conversaban de cosas sin sentido que vieron en su programa favorito Tacaños extremos, discutieron sobre el por qué los llamaban tacaños en dicho programa, ya que para ellos todo eso era muy normal.

-Ahí está ese chico mirándote otra vez, no entiendo porque no hacen nada si se gustan-preguntó Tae en un tono muy bajo.

-Ya te lo había dicho, es muy guapo, pero es primo de tu acosador - respondió Jimin restándole importancia.

Tae no es tuyo!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora