•Time•

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Jungkook se encontraba en la penumbra de la noche, su dormitorio siempre fue su lugar seguro, sin embargo, había algo que lo tenía ansioso, casi al borde de los nervios. ¿Será él?

Sacudió su cabeza, debía tranquilizarse. Eran al rededor de las 7 de la noche. Tae le había contado sobre la boda del padre de Jimin, él solo le había dicho que se despreocupe de todo y se divierta. Espera que lo haga, pero con tantos problemas que se presentan, ahora duda un poco.

Se atrevió a escribir un mensaje. '¿Te diviertes?' fue todo lo que pudo teclear, no quería sonar muy obvio. Estaba preocupado. Sabe que Taehyung es alguien tranquilo..

Continuó leyendo su libro mientras la música sonaba muy suave, no pasó mucho cuando su móvil sonó.

'No mentiré, la estoy pasando muy bien, he bailado mucho y tal vez esté tomando un poquito jijiji' le respondió Taehyung. Vale entonces él estaba bien, era todo lo que a Jungkook le importaba. Le pidió al peliazul que le escriba si necesitara algo sin preocuparse por la hora.

Pasaron al rededor de 2 horas y Taehyung no le volvió a escribir. Trató de no alarmarse, era normal, estaba en una fiesta, debe darle su espacio. Por muy ridículo que suene, él se siente en la obligación de reprimir sus instintos más cavernícolas con el otro. Lo último que desea es que Taehyung se asuste.

Media hora después sonó su celular, pero era una llamada. Vió el nombre y frunció el seño.

—¿Karin...

Jungkook ve al jodido hospital en el que internaron, Tae tuvo un accidente...

Demasiada tranquilidad para ser cierta. Sus latidos se volvieron erráticos, contuvo la respiración un instante en lo que colgó el teléfono y bajó a toda prisa agarrando las llaves del auto sin si quiera mirar si había un alma en casa.

Manejó sin cuidado, esquivando autos y apretando el volante hasta que sus manos se tornaron blanquecinas. Mierda, mierda, mierda ..  es todo lo que sus labios vociferaban.

¿Acaso la vida tenía algo pendiente con Taehyung? ¿Por qué su paz siempre se veía ofendida por la desgracia una y otra vez?

Apenas llegó, se medio estacionó y entró sin mirar detalles a su alrededor. Llegar a él, era todo lo que necesitaba. ¿Qué ocurrió?

Como si se tratase de una especie de visión, Jungkook sintió que su pregunta fue contestada al ver un rostro lamentablemente familiar. Vió rojo y no le faltó fuerza ni coraje para tomarlo por el cuello y estamparlo en la pared haciendo que el atacado se quede sin aire y sus ojos casi se salgan de la impresión, claramente no prediciendo la situación.

— ¿Qué mierda le hiciste hijo de puta? — declaró entre dientes. Su antebrazo abrazaba el cuello del otro de forma asfixiante.

—Ju-Jungkook suelff...me...

No pudo emitir palabra por la falta de aire, no obstante eso no detuvo a Jungkook de separarlo de la pared y volver a empujarlo contra ella con aún más fuerza incluso golpeando su cabeza.

— Wooshik te advertí que te alejaras... Si le hiciste algo soy capaz de...

— ¡Jungkook qué mierda suéltalo!— soltó Jimin quien venía del brazo de la madre de Taehyung.

Genial ahora quedaría mal con su suegra.

A Jeon no le quedó de otra más que soltarlo. De inmediato Wooshik cayó al piso sosteniendo su garganta y tosiendo ferozmente. Jimin intentó auxiliarlo.

— ¡¿Puedes decirme qué rayos pasó?! Por qué atacas al Sr. Wooshik, él ayudó a Taehyung.

— ¡¿Dónde está él? ¿Qué le ocurrió?! — demandó el azabache, sin medir la rapidez de sus palabras.

Tae no es tuyo!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora