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Capítulo 11

Ardeth y Rick bajaron corriendo del dirigible hacia el tres a unos metros.

Evelyn y yo nos dimos una rápida mirada, y bajamos para correr hacia las ruinas de Karnak.

- Alex es inteligente, debió haber dejado algo - dijo Evelyn.

Buscamos con la mirada algún rastro que Alex nos dejara para encontrarlo, hasta que mis ojos se toparon con su corbatita colgando de una estatua, justo debajo ví una linda escultura de arena.

Sonreí.

- Evelyn, deberías mirar esto - le dije mientras me inclinaba a ver la pequeña escultura - Debió haberla hecho Alex.

- ¡Rick! - grito Evy y se acercó corriendo hacia mi - Sabe que lo estamos buscando - me dice con un sonrisa.

- Por supuesto que lo sabe - dije mirando la escultura.

Ardeth y Rick llegaron corriendo.

- Alex nos dejó esto - Evelyn le muestra la corbatita.

- Y nos hizo un castillo de arena - reí.

- Es el templo de la isla de file - dice Evy.

- Fueron a File - mire a Rick y luego a Ardeth con felicidad.

- Bien hecho, Alex - susurro mi hermano - ¡Vamos!

Los cuatro empezamos a correr hacia el dirigible.

Al llegar a File, encontramos otro castillo de Arena.

- El gran templo de Abu Simbel - dije pasando mis dedos por la arena de la figura que Alex nos había dejado.

Veo a Ardeth colocarle un mensaje a Horus para que se lo lleve a los jefes Medjai.

Pero antes de irse volando. Me rodeo unos segundos, soltando leves gañidos y luego se alejó, volando libremente por los cielos.

Yo solo podía sonreír, mientras lo veía irse.

Continuamos yendo hacia los lugares que Alex nos retrataba en arena.

Mi sobrino era un genio. Era inteligente como su madre y valiente como su padre.

Sin duda alguna era una mezcla de sus padres y cuando creciera, habría que tenerle mucho miedo.

Ya es difícil con una Evelyn y un Rick.

- Ese es el Nilo azul - dice mi hermano y yo miro hacia abajo - Ya habremos salido de Egipto.

- En ese tiempo, todo esto era parte del antiguo imperio - explica Evy - El Oasis debe de estar por aquí.

- Descuida, lo encontraremos - dice Rick.

- Tiene razón, mi sobrino es un niño muy listo - sonreí - Nos dejara otra señal.

De la nada se empieza a escuchar un extraño ruido.

Y el dirigible se empieza a agitar levemente.

Todos nos acercamos al borde del dirigible para ver qué pasaba.

- ¡Hay un problema! - me voltee de golpe al oír el grito de Izzy.

- Debe de ser una broma - susurré. Mientras veía la enorme ola con la cara de Imhotep venía hacia nosotros.

- ¡Horus, vuela! - Ardeth hizo que Horus se fuera y por inercia me estuve del borde del dirigible.

- Izzy, ¡Gira a la derecha! ¡A estribor! ¡A estribor! - grito mi hermano.

Izzy bajo una palancas y el dirigible empezó a moverse con rapidez.

Me solté del borde y estuve apunto de caer pero sentí unos brazos rodearme.