De leones y corderos

Capitulo 5

"¡Aléjate de mi hijo!"

Draco se alejó de las suaves manos de Jasper ante el grito de su padre, girándose para mirar a su padre. Lucius Malfoy se veía absolutamente aterrador, su varita apuntando a Jasper y una variedad de maldiciones en la punta de su lengua.

"¡Draco! Entra", espetó Lucius, sin romper el contacto visual con Jasper, quien gruñó por lo bajo y mostró los dientes, sus instintos se hicieron cargo cuando lo amenazaron, "¡Ahora, Draco!"

"Pero padre..."

Draco dio un grito de sorpresa cuando sin apartar la mirada de Jasper, Lucius lo agarró del brazo y tiró de él detrás de él, el adolescente de repente se encontró envuelto en los brazos protectores de su madre.

"¡Váyanse de mi propiedad y aléjense de mi hijo!" Lucius le gritó al vampiro que gruñía, Draco notó distraídamente que era la primera vez que escuchaba a su padre decir una palabrota muggle, "¡O juro por todo lo que creo, que te convertiré en polvo!"

"¡Padre!" Draco gritó, "Él solo estaba explicando..."

"¡Cállate Draco!" Lucius le gritó y Draco dejó escapar un grito ahogado de dolor cuando un grito diferente llenó su mente por unos segundos, "No hay nada que él deba explicar. Ahora, o te vas ahora o te quemas".

"En circunstancias normales pelearía contigo", dijo Jasper con calma, en voz baja, "pero como puedo sentir la verdad de ti, sentir la abrumadora protección que sientes por tu hijo, iré. Pero escucha, hijo, escucha". lo que le he dicho". Dicho esto, Jasper dio media vuelta y corrió hacia los árboles a una velocidad vertiginosa. Una vez que el vampiro desapareció de su vista, Lucius se giró lentamente para mirar a su esposa e hijo, bajando su varita a su costado.
"¿Por qué dejaste que te tocara?" Lucius le exigió a Draco.

"Y-yo..." Draco tembló ante su padre, "No lo sé".

"¿Y dónde está tu anillo?" preguntó Lucio.

"Y-yo me lo quité cuando llegué a casa de la escuela", respondió Draco en voz baja.

"¡Y luego mira lo que pasa!" Lucius rugió, irrumpiendo en la casa. Draco tembló donde estaba por unos momentos antes de correr tras él, "¡Vampiro asqueroso, debería matarlos a todos por atreverse a tocarte!"

"Padre, por favor", rogó Draco, apartándose el cabello mojado de la cara con una mano temblorosa, "Por favor, no grites..."

"Lo siento", Lucius guardó silencio instantáneamente mientras miraba a su aterrorizado hijo, "Lo siento, Draco, me olvidé de..." Se había olvidado del miedo de sus propios hijos a gritar y gritar, ¿cómo podría haberlo olvidado? Oh, es cierto, ese repugnante vampiro tenía... "Estaba tan asustado cuando te vi a ti ya ese monstruo. Podría haberte matado Draco".

"Padre, tenía mi varita apuntada hacia él hasta unos minutos antes de que llegaras", dijo Draco, agitando su varita hacia su padre, "Él no me habría matado".

"Pero..."

"¿Qué te dijo Draco?" Narcissa interrumpió a su esposo, colocando sus suaves manos sobre los hombros de su hijo, que todavía temblaban. Los gritos realmente lo habían afectado, aún lo afectaban pero estaba forzando el miedo.

"Me dijo que no me lastimaría ni me mataría", Draco habló rápidamente, apretando las manos a los costados, "Me dijo que solo matan animales, solo beben de los animales. Nunca humanos. Eso es lo que hace que sus ojos dorado en lugar de rojo. Y me dijo que su hermano Edward lee la mente y que puede sentir las emociones de otras personas. Me dijo que había tratado de alejarse de mí para protegerme, pero que ya no podía. Me dijo -" Draco habló tan rápido y su voz temblaba tanto que sus padres solo podían entender cada palabra.