De leones y corderos

Capitulo 2-8

"¿Por qué quieres el número de Jake?" Preguntó Bella mientras se sentaba en la cama de Draco con el adolescente rubio, Harry y el pequeño Teddy. Cada uno de los adolescentes estaba sentado en un borde de la cama mirando hacia adentro, vigilando a Teddy mientras jugaba felizmente en el centro de la gran cama con su osito de peluche muggle, el único que tenía y que no cobró vida cuando él jugó con él.

"Dijo que podía llevar a Teddy a verlo, pero no quiero aparecer sin avisar", explicó Harry, jugando con el cabello ondulado de Teddy. Afortunadamente todavía era su color marrón claro natural, Teddy recordó no cambiarse frente a Bella.

"Oh", murmuró Bella comprendiendo, sacando su teléfono y revisando su lista de contactos. "Aquí." Se lo entregó a Harry, quien sacó su propio teléfono móvil, comprado unos días antes, y agregó cuidadosamente el número de Jacob a su lista de contactos.

"Gracias", sonrió Harry, devolviéndole el teléfono.

"Aunque probablemente no responda," murmuró Bella hoscamente.

"¿Qué quieres decir Bella?" -Preguntó Draco.

"Me ha estado evitando", explicó Bella con tristeza, "poniendo excusas y haciendo que su padre las ponga. Aunque podría responder por ti pensando en ello, probablemente sea solo a mí a quien está evitando".

"No lo creo", Draco sacudió la cabeza.

"Sí," dijo Bella con tristeza, "Él ha cambiado desde que te lo presenté".

Draco y Harry compartieron una mirada; Sí, sabían que había cambiado. Era un hombre lobo y si su cambio de comportamiento significaba lo que pensaban, significaba que era uno nuevo. Eso no había surgido cuando hablaron la otra noche.

"Será mejor que me vaya", suspiró Bella, levantándose lentamente para asegurarse de que Teddy no se cayera de la cama cuando ella se movía. Harry apreció el cuidado que ella tuvo y puso a Teddy en su regazo, el niño gruñó levemente ante la repentina restricción de su juego. "Hasta luego."

"Nos vemos", Harry le sonrió, "Di adiós a Bella, Teddy".

"Adiós", obedeció Teddy, saludando como siempre lo hacía. Bella le devolvió el saludo.

"Adiós Bella", dijo Draco, sonriéndole mientras ella salía de su habitación, caminando lentamente por las escaleras, "Si él la lastima, lo mataré, sea hombre lobo o no, tu amor platónico o no".

"Él no es mi amor platónico", se defendió Harry. Draco le levantó una ceja perfecta. "Está bien, tal vez un poco, pero..."

"Pero nada," Draco se encogió de hombros, "Te vi mirando su trasero".

"¿Eso significa que tú también estabas mirando?" Exigió Harry, unos celos repentinos lo recorrieron. Jacob era suyo... no... no, no lo era... ¿en qué estaba pensando?

"No. Te estaba observando de manera bastante divertida", le dijo Draco. "Llamarlo."

"¿Ahora?" preguntó Harry.

"No, dentro de quince años," murmuró Draco sarcásticamente, tomando a Teddy de los brazos de Harry en un movimiento que se estaba volviendo demasiado natural. Hasta aquí sus sospechas de no ser bueno con los niños, "Es mejor terminar con esto de una vez si está siendo tan extraño como dice Bella".

"Él estaba bien con nosotros", se defendió Harry.

"¿Bien?" -Preguntó Draco.

"Ok, no está bien. Quiero decir, estaba un poco... estresado pero... sabes que no fue malo ni nada por el estilo", dijo Harry suavemente. La ceja de Draco se alzó una vez más. "Es realmente espeluznante cuando haces eso". Harry refunfuñó mientras abría su teléfono nuevamente, desplazándose hacia abajo para encontrar el número recientemente agregado de Jacob y presionando el botón verde. "Aquí va."