CAPITULO 60: DESPUÉS DEL CAOS

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NARRADOR 🖋️🖋️

Un gran sonido estridente se escuchó por varios kilómetros del lugar, pedazos de metal volaron por todas partes y el fuego se comió por completo el coche destrozado dejando solo el esqueleto carbonizado.

Lucy reaccionó segundos después, su cuerpo tenía algunas heridas hechas por los pedazos de carrocería que salieron disparados en la explosión, tenía cubierta su cabeza con las manos.

El recuerdo de la sonrisa de Maya la estremeció al instante en que lo recordó y se levantó de golpe sin importar sus heridas o si seguian callendo pedazos de metal.

Su prioridad era Maya, así que comenzó a correr hacia las llamas del coche, el humo y el polvo no la dejaban ver bien, su corazón se quería salir de su pecho, su querida amiga no podía morir así... No...

- ¡¡¡MAYA.... ¿DONDE ESTAS?!!! - grito desesperada al no ver nada, en dónde la vio por última vez, a unos cuantos metros del coche.

El sonido de un metal callendo la hizo girar hacia la derecha, la puerta del coche que se había vencido cayó, haciendo que se pudiera apreciar a Maya encima de HOSEOK.

Lucy llegó corriendo para ayudarla, aunque su instinto la hizo llegar a ella y abrazarla con fuerza.

Maya correspondio a su abrazo, aunque se quejo varias veces, pues ella también había recibido algunas heridas, sus brazos dolían, pues con la fuerza que le quedó, arrastro el cuerpo de Hoseok algunos metros y después corrió para tomar la puerta del coche que pesaba más que el Hoseok y poder refugiarse debajo de ese pedazo de metal.

- ¡¡Lucy... Suéltame por favor, me lastimas!!- le dijo entrecortadamente, pues la estaba asfixiando prácticamente.

- ¡¡HAY QUERIDA MAYA... ESTO NO ES NADA, COMPARADO CON LO QUE TENGO GANAS DE HACERTE... ESTA ME LA VAS A PAGAR!! - beso su frente una vez más para luego soltarla suavemente, Lucy estaba enojada, pero feliz de que su mejor amiga estaba a salvó.

- Se que te asusté, perdón mi querida Lucifer, tienes razón de estar así, pero por favor, hay que llevar a los chicos al hospital.- Maya tenía a Hoseok tomado de su mano, no se quería separar de ninguno de los dos.

Lucy hizo una cara de pocos amigos y de levanto ayudando a Maya, de a poco algunas personas comenzaron a acercarse, las sirenas de las patrullas y ambulancias se hicieron más audibles conforme se aceecaban dándole un alivio inmenso a Maya.

- ¿Dónde dejaste a Namjoon?- antes de preguntar le dió un beso en los labios a Hoseok y con algo de dolor se levantó.

- EL TIPO ESE ESTA POR HAYA, NO TE PREOCUPES, LO DEJE BIEN PROTEGIDO. - soltó de mal humor, odiaba que Maya se preocupara por otras personas.

- Está bien, quédate con Hoseok, necesito ver a Namjoon. - Lucy rodó los ojos y se sentó al lado del cuerpo del chico.

Maya llegó corriendo hasta Namjoon, este gracias al cielo, estaba bien protegido por ese gran tronco, sin importarle sus heridas, Maya tomo el torso de Namjoon para poder acomodarlo en sus piernas, lo detallo lo más que pudo, su corazón dolió al notar su labio herido, algunos moretones en sus mejillas, y aún así, lo malditamente guapo no se le quitaba.

Acaricio suavemente su rostro, quitando algunas basuras que se le habían pegado por la sangre que tenía en la frente, se culpo así misma por el daño de los chicos, estaba segura que Ángel era el responsable de éso.

Beso sus labios con suma delicadeza, deseando que el pudiera despertar como en los cuentos de hadas.

Más eso no pasó, Maya sintio su corazón doler al notar que Namjoon no reaccionaba.

DE SANTA A DIABLA +18.... SEGUNDA PARTE Donde viven las historias. Descúbrelo ahora