Malak

"Hogar"

El hogar está donde está el corazón.

Y mi corazón está donde está el.

Cuando suena la alarma del fajr y termino de rezar voy directamente a hacerme un buen desayuno y prepararme para irme.

La universidad no está tan lejos de donde vivo pero tampoco está cerca, tengo que coger el bus que saldrá en menos de una hora así que, tengo que apurarme si no quiero llegar tarde.

Me miró por última vez en el espejo colocando mi hijab negro y veo el reflejo de mi móvil sonar.

Mamá.

—As-salamu alaykum —la saludo.

—Wa-alaykum salam, ¿como estas hija?

—Muy bien, ahora mismo me iba hacia la universidad.

—Que raro que te hayas podido levantar sola.

—Ya vez mama, tu hija está madurando.

—Que bien hija, entonces no te molesto más. Que Allah esté contigo.

—Igualmente.

Cuelgo y término de mirarme por última vez en el espejo.

Llevo un outfit normal y sencillo.

Unos vaqueros azules anchos en la parte de abajo, una sudadera blanca, el hijab negro que combina con los jordans negros con blanco y un abrigo largo de lana de color marrón.

Cojo mi bolso de color gris, meto mi ipad, mis libretas, el estuche y mi botella de agua (muy importante hidratarse), y creo que yasta.. ay el móvil.

Ahora si ya esta.

¿Estoy nerviosa?

Si.

Cierro la puerta para ir al ascensor pero escucho otra puerta abrirse.

—¿Malak?

—Buenos días señora Amelia.

—¿Qué tal hija?, ¿A donde vas?

—Muy bien Al-hamdulillah —digo aun que ella no es musulmana —voy a la universidad hoy empiezo las clases.

—Es verdad, hoy empiezan las clases. Se me había olvidado por completo —su tono de voz disminuye recordando algo.

—¿Tiene algún familiar que empieza las clases o como?

—Si, mi nieto. Es mayor pero tengo la costumbre de acompañarlo yo y su abuelo antes de fallecer. Espero me perdone.

—Tranquila, seguro que no se molestará, si su nieto tiene un poco de amor en ese corazón creeme que le perdonara.

—Eso espero, venga vete ya que llegarás tarde

—Nos vemos mas tarde -entro al ascensor.

—Adiós —veo que se despide con la mano cuando la puerta del ascensor está apunto de cerrarse.

Cuando llego abajo, al salir noto que el cielo está un poco nublado (quizá más tarde llueva) hace un viento muy fresco y agradable pero no para mi hijab.

Me dirijo a la parada de bus que no está muy lejos del piso.

Espero unos 3-4 minutos y veo el bus llegar, pagó el billete y veo como el piloto me mira (con cara rara) pero la verdad ya me vale si me mira la gente o no porque desde hoy el se va a tener que acostumbrar a ver una chica cubierta en su bus cada mañana, entro y me dirijo a una silla vacía. Algunos de los pasajeros también me miran pero como dije ya estoy acostumbrada a esas miradas.