~#9 Cicatriz~

332 43 36
                                    

Narra Duxo

Aquino y yo nos encontrábamos en un lago buscando aquella piedra morada que había encontrado hace un gran rato, andábamos descalzos y con nuestro pantalón a nuestras rodillas para que no se mojara nuestra ropa, pero aun así sin meternos mucho al lago no divisábamos más de aquellas piedras curiosas, así que en un momento aburrido empuje a Aquino al lago para distraerme molestándolo, a lo que no era de esperarse a que él también hiciera lo mismo arrastrándome hacía la parte mas "profunda" del lago.

—¡Oe! ¡¿Qué te pasa?! ¡Eso es trampa Men! —dije echándole agua a la cara como venganza— ¡Tu empezaste pues!... ¡Hey! ¡Ya! ¡Déjame de echarme agua webon! —hizo lo mismo que yo intentado defenderse.

Aunque cualquiera que pudiese estar ahí diría que somos dos tarados echándonos agua como idiotas, pero ¿Qué mas da? ¿No? Después de todo este lugar estaba casi desierto. Así que comenzó una gerra de solo echarnos agua, hasta, no sé, ¿morirnos ahogados?

Jajaja bueno, no, pero nos entretenía mucho hacer eso. Pues en un momento ya arto de hacer eso me hundí y lo puse en mis hombros, después de todo tenía gran fuerza y tocaba el piso del lago. (Ni un chiste de mi estatura hijos de puta)

—Oye, ¿Qué haces? —pregunto Aquino intentando mantener el equilibrio—

—¿Tú que crees Aquinin? —dije con una sonrisa maliciosa para luego echarlo para atrás y escuchar un grito de su parte— ¡AAAhh! ¡Duxooooo!

¡Splash!

Se escucho el agua chapotear al caer de espaldas.

—Jajaja mírate —dije cuando salimos a la superficie respirando— Ni se te puede ver la cara Aquino jajaja. —comencé a reírme sin cesar por ver como todo su cabello rizado le tapaba la mayor parte de su rostro, pues el cabello de Aquino era un poco mas largo que el mío.—

—Sí, Sí, que gracioso idiota. —sacudió su cabello y luego se lo peino para atrás intentando arreglárselo. Pero, por alguna razón me le quede mirando. Él... él se veía bien a decir verdad.—

—¿Duxo?

Escuche decirlo con una sonrisa y su cabeza de lado intentado saber que estaba pensando.

—¿Eh? ¿Qué? —pregunte medio avergonzado por pensar que él estuviese pensando otra cosa o que lo haya incomodado tanto— Jaja ¿Por qué me miras tanto? ¿Tengo aun el cabello desordenado?

Intento arreglárselo pero yo solo lo detuve. Suerte que no menciono otra cosa, para mi hubiera sido un tanto incomodo.

—No, te ves bien Aquino. —había acariciado su sedoso cabello peinándoselo— Mucho a decir verdad. —Ahora se lo desarregle intentando desviar nuestras miradas que habían conectado por un momento. No quería que me viera hipnotizado por su tonto cabello ondulado y sedoso— Oye! no se vale.

¿𝙏𝙚 𝙚𝙨𝙩𝙤𝙮 𝙥𝙚𝙧𝙙𝙞𝙚𝙣𝙙𝙤? /𝘿𝙪𝙭𝙞𝙣𝙤/𝙉𝙖𝙩𝙖𝙧𝙞𝙣𝙜Donde viven las historias. Descúbrelo ahora