Nevertheless | 𝗝𝗟

chapter 44

Jennie se alistó, se puso el elegante vestido, el cual le hacía lucir su hermosa figura, cuando la menor llegó al gran comedor del crucero, este estaba hermoso: vio unos enormes candelabros que colgaban muy elegantemente sobre el techo del salón y miró como las miradas de las personas fueron sobre ella, cuando las sintió se sonrojó un poco al notar lo profundo de estas miradas.

Después, fue rescatada al ver una mirada hermosa que no dejaba de contemplarla, las demás miradas no importaban, la única que importaba era la de Lisa, la única que realmente importaba. Jennie se acercó a Lisa, quien vestía un hermoso smoking negro que la hacía lucir muy atractiva.

— ¿Te gustó la sorpresa? — dijo Lisa con una hermosa sonrisa y sin poder dejar de mirar a Jennie.

— Sí, me gustó mucho, muchas gracias por todo.

— Me da mucho gusto saber eso, Jen, porque apenas es el comienzo.

Lisa guío a Jennkey a una mesa un poco alejada de los demás y observó que el pequeño lugar fue decorado especialmente para ellas dos; ambas se sentaron a la mesa mientras Jennie no podía dejar de mirar tan hermoso y elegante del lugar. En Corea había muchos lugares así, pero nunca y mucho menos en sus propios sueños imaginó un lugar tan hermoso como ese, el cuál no era ningún sueño era una realidad.

— Lisa, esto es maravilloso ¿Por esto te desapareciste toda la tarde?

— Sí, pero creo que valió la pena mi desaparición — dijo ella con una flamante y hermosa sonrisa.

— Definitivamente Lisa, todo es maravilloso.

— No sabes lo mucho que me gusta verte sonreír, hace mucho tiempo que no veía esa hermosa sonrisa en tu rostro.

— Gracias, Lisa… — dijo ella un poco ruborizada.

— No tienes nada que agradecer, Jen, solo quiero verte sonreír.

Mientras que las dos se dispusieron a cenar la flamante cena, Lisa no dejaba de mirar a Jennie mientras que esta comía, para Lisa era un sueño verla y tenerla para ella, pero no dejaba de preguntarse el por qué tanto misterio. Lisa estaba tan sumergida en sus pensamientos, admirando la belleza de la persona que tenía en frente que no se dio cuenta que Jennie se le quedó mirando.

— ¿Que tienes Lisa? ¿Por qué tan pensativa? —preguntó la menor dándole una cálida sonrisa.

— No me pasa nada, Jen, solo me quedé pensando un momento.

— ¿En qué?

— En una mujer hermosa que es la dueña de mis pensamientos y sonrisas.

La castaña se sonrojó y siguieron cenando y Lisa le platicaba a Jennie de las muchas cosas que hizo en Gimpo, recordaron viejos tiempos, desde que se conocieron, la manera y los hechos que hicieron que su amistad fuera creciendo poco a poco y como se fue convirtiendo en algo más, pero mientras seguían hablando, de pronto se empezó a escuchar una melodía muy romántica “Kiss Me – Ed Sheeran”.

— Jen ¿Me harías el honor de bailar conmigo?

— Por supuesto.

Lisa tomó de las manos a Jennie y las dos se levantaron de la mesa para bailar. La mayor colocó sus manos en la pequeña cintura de Jennie, mientras ella colocaba sus brazos alrededor del cuello de Lisa, y mientras que ella la acercaba más a su cuerpo empezaron a bailar, dejándose llevar por el suave ritmo de la música.

El tiempo pareció detenerse en ese momento mientras se dejaban llevar por la música, tanto que hasta parecían un par de enamoradas. Jennie se sentía tan protegida en el abrazo de Lisa, dejándose llevar por la música y las sensaciones que hacía mucho tiempo no sentía, ni siquiera con la mujer que era su prometida. Lisa no podía dejar de sentir que estaba en las nubes al tener a Jennie con ella, entre sus brazos y disfrutando de su compañía como tanto lo habían hecho años atrás. Aquello era como un sueño que no quería que terminara.

— Te extrañé mucho Lisa.

— No sabes cuanto he esperado, cuanto he soñado y anhelado por volverte a tener entre mis brazos, mi dulce ángel.

Jennie no supo cómo responder a eso, quería llorar al pensar que todo era un sueño y si lo era, no quería despertar, ansiaba estar entre los brazos de Lisa por mucho tiempo más

— Pasaron más de ocho años sin vernos y aunque te creí muerta, realmente me has hecho mucha falta.

Jennie miró a Lisa con una sonrisa mientras se acercaba lentamente a su rostro, teniendo el rostro de la contraria a centímetros del suyo, estaba donde debía estar, al lado de quien debía estar ¿Así se sentía tocar las nubes? ¿Así se sentía volverse a enamorar de la misma persona?