Misión familia

principe durmiente

El mayor esperaba una respuesta del pelinegro que el no estaba seguro de poder dar, rei no terminaba de entender con que objetivo su padre quería ver a miri.

El lo sabía, su padre era peligroso, había sido una persona particularmente estricta con el, y no del tipo de persona estricta que te exige buenas notas, más bien, el tipo de persona exigente que te hace entrenar aún con lesiones y te hace vivir cosas crueles con el pretexto de hacerte más fuerte, en definitiva la clase de persona que quisiera lejos de la vida de miri.

-- no quiero que veas a miri

Logro decir el ojiazul y el hombre mayor frunció levemente el seño, se levantó de la silla y camino hasta estar frente a rei.

-- no me dijiste que estas con un inútil, tampoco que adoptaste una niña, y ahora después de todo lo que e invertido en tu educación, para que heredaras este negocio quieres abandonarlo, creo que lo mínimo que puedes hacer para compensarlo es dejarme conocer a la niña

-- porfavor, pídeme otra cosa

Las palabras de rei eran firmes, su padre siempre lo hacía sentir mal cada que le recalcaba todo lo que había invertido en el, lo hacía sentir como si le debiera algo.

Por su parte shigeki estaba llegando a su límite, todo este tiempo sin su hijo en casa lo había pasado mal, no sabía lo mucho que podía alguien como el extrañar a una persona hasta que se fue, estaba intentando ser paciente, pensó que si lo trataba bien talvez rei querría regresar por cuenta propia, para nada espero que le dijera que estaba con quien a sus ojos era un incompetente, y que quería salir de la organización.

Le molestaba, le había dado todo a rei, ¿cómo se atrevía a rechazarlo?, eran los pensamientos que más llenaban la cabeza del hombre, pero eso solo podía ser superado por la idea de que ahora el era abuelo, y quería conocer a su nieta, si o si.

-- haremos un trato

Dijo el mayor suspirando un poco

-- solo te daré tres opciones, y creme que una no va a gustarte nada

-- de que se trata

-- el primer plan es el que mas me gusta a mi, es muy sencillo, el estúpido que vive contigo podrá irse de la organización, pero tu te quedarás aprendiendo el negocio y lo heredaras, no vas a volver a verlos, pero te doy mi palabra de que no serán atacados por la organización.

A rei no le gustaba ese trato, la idea de no volver a verlos destrozaba su alma y su padre pudo ver eso, a shigeki le dolió por un momento el ver como la mirada de rei se apagaba el escuchar el primer trato por lo que se apresuró a decir el siguiente.

-- el siguiente dejará en pendiente unos meses lo de la herencia, podrás irte de la organización, pero no dejaras de tener contacto conmigo, deberás buscar otro trabajo, uno que este dentro de la ley, y podrás ir con tu familia.

-- quiero ese.

Dijo de una manera que casi le pareció infantil a shigeki, la mirada de rei volvía a la vida poco a poco.

-- si ese trato suena muy bien para ti, pero este incluye el que me dejes ver a mi nieta cada 15 días.

-- ¿porque quieres verla?

Se atrevió a preguntar, la insistencia por ver a miri lo ponia nervioso.

-- es tu hija ¿no?

-- si

Respondió rápidamente.

-- entonces quiero conocerla

El pelinegro desvío la mirada un momento.