CAPITULO CINCO

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- Tae estás seguro que podemos ver los ensayos en el Auditorio?- Jimin se sentía con miedo de ser descubierto ya que su amigo tenia un grandioso plan para ver ensayar a sus alfas.

La carrera de danza y canto estaban organizando las presentaciones finales para su graduación, esto definiría a muchos prospectos para poder acceder a prestigiosas compañías que estarían en la audiencia en la presentación final, estaban a mes y medio de la graduación por lo que todos estaban enfocados en sus presentaciones.

-vamos amigo ni te quejes, tú también podrás ver a tu alfa, mmm... aunque no sé si te gustará mucho lo que verás- Tae de pronto recordó la coreografía de Jungkookk, ya que había ido varias veces a espiar a los ensayos.

-a qué te refieres? - Jimin estaba confundido con lo que le acababa de decir su amigo.

-pues velo por ti mismo- apuntando con su cabeza hacia el escenario.

Jimin no dudó y de inmediato dirigió su mirada al escenario y ahí estaba su amado pelinegro de la mano de una Omega ingresando elegantemente y colocándose en sus posiciones.

Acompañaba a Jungkookk una hermosa castaña pequeña y delgada se notaba que tenían química. Comenzaron el baile lento y sincronizado, realizando poses elegantes y firmes, realmente era una coreografía hermosa. El rubio tenia los ojos abiertos en señal de asombro, porque la coreografía que observaba era nada más y nada menos la representación del cortejo al encontrar a tu destinado, en tan solo 5 minutos observó como su amor encontraba a su destinada, cómo empezó a admirarla, a amarla, a desearla, para finalmente unirse y ser una manada.

-Tae por qué me trajiste aquí?- preguntó casi con la voz quebrada.

- bueno ya te dije porque... al principio solo venía a ver a Hoseok, pero también quería ver que hacía tu alfa, hasta que lo ví con ella, porque supongo que ya te diste cuenta de qué trata la coreografía...mmmm y taaaaaal vez quería que entraras en razón, porque eso que acabas de presenciar amigo mío es algo que está por pasar- Jimin lo observó confundido -he notado que esa Omega está enamorada de tu Alfa y si no te pones manos a la obra, te lo quitará- el pelirrojo lo dijo con tanta seguridad que hizo estremecer el cuerpo del pequeño rubio.

-por qué estás tan seguro de eso?- el rubio observó preocupado a su amigo.

-mira Jimin, no quería ser tan directo y quería que tú te dieras cuenta por tí mismo, pero la verdad es que me da miedo que en cualquier momento te quiten a tu alfa- dirigió su mirada a la pareja en el escenario -los he visto muy cercanos y créeme que para Jungkook ella no le es indiferente... creo que si no es amor, sí siente algo muy bonito por ella y no quiero que se confunda e intente algo con esa Omega- lo dijo serio y mirando con pena a su amigo sabiendo que tal vez lo estaba hiriendo, pero no quería verlo sufrir aún más en un futuro y arrepentirse de no haber actuado a tiempo.

El pelirrubio bajó la mirada y sólo se puso de pie y salió del auditorio corriendo, tras suyo Tae salió para darle apoyo. Pero está no sería la última vez que los astutos omegas fuesen a ver las coreografías de sus alfas, más todo lo contrario, los hiban a observar cada vez que podían, Jimin con la escusa que quería aprender más pasos y el pelirrojo fingiendo creerle esa escusa barata.

Ya estaban a un mes de acabar el semestre y llegó el grandioso día de la presentación, el auditorio estaba repleto y claro que dos omegas tenían que estar presentes para ver a sus alfas.

-Por favor Jimiiiiiiiiin!... solo será un momento, solo quiero verlo con su traje antes que nadie y luego volvemos a nuestros asientos sí? dime que sí... siiiiiiiiiiiiii?- el pelirrojo estaba totalmente desesperado porque quería ver a su alfa y por eso había llegado a esta humillación de rogarle a su querido amigo que lo acompañara.

Un ángel y su príncipe - KOOKMIN Donde viven las historias. Descúbrelo ahora