the 1 | pedri gonzález

CAPÍTULO 17

presente

SOFÍA

mi manager me envío un vídeo de carlos hablando barbaridades, insinuando que yo nunca lo quise y poniéndose de víctima, está bien que esté enojado, pero eso no le da el derecho de gritar a los cuatro vientos que yo no lo quise nunca y que sólo era una forma de pasar el rato, como una manera de no sentirme sola, al no poder estar con pedri.

yo a carlos verdaderamente lo quiero, siento un aprecio gigante por él y le agradezco por el año que pasamos juntos, así que me duele verdaderamente sus declaraciones y diría que no me importa lo que se dice de mi ahora, pero estaría mintiendo, la prensa puede ser cruel y agradezco tener una pequeña pausa de la filmación de la serie, así puedo pasar el tiempo encerrada, sin tener que mirar a los demás hablando a mis espaldas o incluso tener que encontrarme con carlos, que a día de hoy, no quiero ver, no podría después de sus palabras me ha herido, pensé que le estaba dando mi todo y resulta que para él nunca fue suficiente.

ahora sólo quiero hornear un pastel y sentarme a mirar la película "ten things i hate about you", la carita de heath ledger me sabrá animar.

PEDRI

- fer, voy a ir a su residencia, no me importa lo que piensen los medios, ni lo que pueda salir a decir el tenista. - le aviso a mi hermano. no me importa nadie, sólo ella y sé que después de lo que carlos dijo sus ánimos han de haber bajado a 0.
- es que yo no te voy a detener o gastar saliva en ti, ni mamá y papá pueden contigo cuando se te mete una idea en la cabeza, menos voy a poder yo. - me replica y suelto una carcajada.
- eres el mejor hermano, ¿oíste? - le grito antes de salir a buscar a sofía, pero primero necesito ir al mercado a buscar ingredientes para llevarle y hacer una pastel con ella, es lo que la ayudaba con el estrés y la tristeza cuando estábamos juntos, supongo que seguirá siendo así.

SOFÍA

escucho el sonido de llamada entrante en mi celular mientras estoy acostada mirando la película y aunque quisiera ignorarlo, podría ser importante. me apresuro a contestar y escucho la voz de pedri:

- a ver, ¿pastel de fresa, red velvet, chocolate..? - lo detengo, haciendo una pregunta.

- ¿para qué o qué? - como me confunde éste niño.

- para nosotros hornearlo en éste momento, tienes que abrirme la puerta y ayudarme con todos las bolsas de ingredientes de que tengo en mano, porque sí suelto el celular para tocar, se rompen todos los huevos y no queremos eso, ¿verdad?

abro los ojos y corro a mirarme al espejo más cercano, aún con celular en mano.

- ya voy. - le cuelgo e intento hacer unas inhalaciones y exhalaciones antes de abrirle. ¡¿qué hace aquí?! quiero gritar y no sé sí de emoción o nervios.
tomo la perilla de la puerta y la abro, revelando al canario con bolsas en ambas manos y una sonrisa amplia.

- ¡holaaaaa! - me dice, entrando y dándome un beso en la mejilla. - perdón por no avisarte que venía, pero sabía que si te decía, te ibas a negar y estamos en ésto juntos, somos los mejores pasteleros de españa, ¿recuerdas?
- tengo tiempo sin hornear un pastel, pedri. pero ahora lo necesito muchísimo. - le digo, cerrando la puerta y acompañándolo a la cocina.
- ¿estás viendo ten things i hate about you sin mí? me ofendes. - deja las cosas en el mesón y toca el pecho, cerca del corazón, en señal de que le duele.
- ya llevo tiempo mirando mis cosas favoritas sin ti, la verdad. - le digo, mientras saco los ingredientes de las bolsas y él me ayuda.
- pues, eso fue hace tiempo, ya no. me tienes a mí y pienso que sí el tiempo nos puso de nuevo frente a frente es por algo, no me quiero alejar y tú menos, lo sé. - se sincera.

suspiro y lo miro a los ojos.
- ¿viste lo que dijo carlos?
- si y no hay que darle ninguna importancia. tú no eres así, jamás usarías a alguien para olvidar a otro o querrías hacerle mal a las personas en tu vida, si él dice eso es porque no te conoce y está equivocado, sofía. muy equivocado. - me dice acercándose a donde estoy, para ayudarme a sacar las tazas, la batidora y todo lo que usaremos para hacer el pastel.
- gracias, en serio. - le sonrío. - no sabía que necesitaba tanto escuchar a alguien que de verdad me conozca diciéndome eso, pero claro, tú me conoces más de lo que a veces lo hago yo. - le digo bromeando.
- ey, lo dirás en broma, pero es así. - se ríe y toma el delantal que estaba doblado en la esquina del mesón.
- para no ensuaciarme - me señala el delantal - porque fer me cocina pero no me limpia las prendas, eh.
- dice de chiste y no puedo evitar soltar par de carcajadas.

pedri sí que sabe alegrarle la vida a las personas.