Ser Sin Alas

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Mi nombre es krista ackerman von bielefend, soy una chica de 16 años, muy imperativa, soy un caso muy extraño yo nací con el cabello blanco, lo cual es imposible y en consecuencia de eso, todo mi kinder y primaria fui tratada como el "bicho raro" y todos los niños me decían cosas como: abuela, anciana, vieja, canosa, bruja etc, me decían cualquier cosa que pudiera tener blanco (por así decirlo), en secundaria no me dejaron entrar en varias ocasiones porque pensaban que me pinte el cabello de blanco, aparte de que mi piel siempre fue tan blanca como la nieve pero con unas vacaciones tomó un poco de color

Yo nací en una familia con mucho dinero, pero nunca me gusto, todo era muy frío y solitario, siempre estaba sola, mis hermanos nunca han estado conmigo, ellos siempre han sido "populares" y todos los días salían con sus amigos y regresaban tarde, los viernes y sábados no regresaban, mi madre estaba todo el día con sus amigas y sólo estaba en casa algunos días, mi padre siempre estaba de viaje... yo solo tenía de compañía a las sirvientas y el mayordomo, ellos eran mis únicos amigos, así que no me comportaba como una princesa por el echo de que ellos me enseñaron a ser humilde y las palabras que se acostumbran decir entre las familias de clase media como: chido, gua dijo el perro, no mam**, hijo te tu pin*** madre, no está tan pior, no pus si, pos pos gracias, chale,tropa, canton, carnal, chesco, gacho, iralo, me vale madres, wacha... Etc.

Desde el kinder hasta el tercer grado de primaria pensé pensé que estaba demente, porque yo podía ver alas en las personas, le contaba a mi madre pero ella nunca me creía pensaba que yo vivía en un cuento de hadas, cuando tenía seis años intente volar (pensando que yo también tenía alas) tirandome de un puente, mi hermano me detuvo, le dijo a mi madre y... Ella me llevo a terapia y luego a visitar un psicólogo, pensando que estaba demente y sufría de depresión... El colmo es que el psicólogo solo me hacía llorar, era muy cruel conmigo

Todo cambio cuando tenía nueve años,a mi madre le gustaba mucho la jardineria así que mi madre, Rosa (una empleada) y yo estábamos recogiendo tierra especial para las plantas en un monte que estaba serca de mi casa y yo intente ser extrema, así que con mi bicicleta fui cuesta abajo por el monte sin darme cuenta de que los frenos no funcionaban, no conocía bien el monte y no sabía que en la dirección en la que yo iba estaba un barranco muy profundo, cuando me di cuenta del barranco intente frenar la bicicleta sin embargo los frenos no respondían, tenía mucho miedo de caer y grite varias veces pensé que caería pero no, sentí que alguien tiro de mi blusa, provocando que cayera de la bicicleta y me salvará, la bicicleta quedó en el fondo del barranco, yo al contrario solo me arrastre cinco metros (aproximadamente) y quedará a pocos centímetros de caer... Me lleve varios golpes, incluso me salio sangre de un brazo, al día siguiente de esa caída yo tenía una venda en mi brazo izquierdo y dolía mucho, estaba sola en mi habitación (como siempre),estaba frente a la ventana, viendo el jardín, de pronto se abrió mi ventana de una forma muy brusca causando que yo cayera al suelo, después pude apreciar a una hermosa joven con alas color blanco, cabello castaño claro y de ojos marrón rojizo entrar por mi ventana

-¡¿Quien eres?! - pregunte asustada

-no te asustes, no te haré daño - dijo caminado hacia mi

-¡responde a mi pregunta! - le dije haciéndome hacia atrás hasta pegar con la fría pared

-mi nombre es kardas - respondió - soy un angel protector del cielo - mientras hacía una reverencia

-¿u-un angel? - pregunte con miedo

-exacto-

-¿que hace un angel en mi habitación?- dije con un poco de miedo mientras me levantaba del suelo sin separarme de la pared

-vine a protegerla - mientras se acercaba a mi

-¿protegerme? ¿de que? - pregunte intentando caminar hacia atrás sin embargo no me fue posible - ¡aléjate! - grite con mucho miedo

-¿no me recuerdas? - pregunto con una mirada triste sin detenerse

-¡no! ¡no te acerques a mi! - ordene

-soy, yo soy quien te salvo de caer al barranco - me dijo con una mirada triste, como si le afectará el echo de que no la recuerde

-¡¿tu?! ¡¿fuiste tu quien me salvó?! - pregunte asustada y con desconfianza

-exacto - respondió acercándose más a mi y extendiendo los brazos para un abrazo

-entonces tu, tu me salvaste, estoy con vida gracias a ¿ti? -

-así es - dijo antes de tomarme entre sus brazos y darme el abrazo más cálido que había sentido en mi vida, sin embargo yo no correspondi al abrazo así que me soltó - ¿que pasa? - pregunto viendo mi rostro, el cual no había cambiado, seguía siendo un combinación de miedo y desconfianza

-no entiendo ¿porque un angel salvo a un simple humano? ¿porque estas aquí? ¿porque quieres protegerme? -

-porque tu eres muy especial ¿no te has dado cuenta? - me pregunto con una pequeña sonrisa

-¿darme cuenta? ¿de que? - pregunte observando mis manos

-de que eres especial, dime ¿has visto otro humanos con cabello blanco? - pregunto tocando mi cabello

-no, nunca he visto a alguien más, sólo a mi - respondí viendo mis cabello muy detenidamente

-aparte ¿has podido ver tus alas o las de los demás? -

-no, no he podido ver mis alas, pero si veo las alas de los demás -

-por eso eres una persona muy especial -

-¿porque? -

-porque tu eres un humano - dijo sentándose en la orilla de la cama - sin alas y eso es muy especial -dijo levantándose y acercándose a mi

-sin alas ¿yo no tengo alas? ¿porque yo no? ¿porque los demás si pueden tener alas? - le pregunté con inquietud y desesperación por una respuesta

-eso, eso no lo se - respondió confusa y con una mirada triste - pero prometo protegerte hasta que sepas la razón y puedas obtener tus alas - volvió a abrazarme después de decir eso al cual yo correspondi abrazando la con fuerza

-gracias - dije con una sonrisa llena de confusión

-te ayudare, lo juro... -

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Hola!! Traigo otro capítulo de esta serie, es un libro olvidado, a nadie le gusta pero lo escribo con emoción y aunque nadie lo lea yo lo escribiré con emoción...
Gracias por leer!!!!!

Sin AlasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora