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CAPÍTULO 48
RESTAURACIÓN DEL CASTILLO CALYPSE II

—Un beso de una mujer noble es el honor más alto que un caballero p-puede recibir.

Su respuesta llegó un poco después, y la serenidad aún en sus rasgos. —Vengo de un entorno humilde, por lo que nunca tuve muchos sentimientos por historias tan anticuadas. Además, no sentiría ningún honor al recibir un beso de una mujer que hubiera fruncido el ceño ante mi insoportable hedor cuando me acerqué a ella —.

Max se sorprendió por su respuesta apática y mantuvo los ojos fijos en el suelo, su mirada fue lo suficiente como para hacer un agujero en ellos en cualquier momento.

Riftan apoyó su espada en la pared y se acostó en la cama con ella, demostrando que no tenía ninguna intención de ser sarcástico por sus preguntas sobre su vida personal y sus predilecciones en torno a ella. Al darse cuenta de que Max se tensó automáticamente ante la segunda presencia a su lado, Riftan dejó escapar una sonrisa irónica mientras rodaba a su lado.

—No te preocupes, no te molestaré esta noche. Escuché que estabas adolorido .

Max asintió con la cabeza, muy rápido para ser considerado normal, con el cuello enrojecido. Cuando Riftan la agarró y tiró para que se tumbara a su lado, colocó la tapa sobre la lámpara, apagando el fuego que brillaba junto a él. La oscuridad envolvió lentamente la habitación. Y escuchó cómo los latidos de su corazón comenzaban a relajarse, sus pensamientos olvidados.

Otro día pasó por el castillo Calypse de esta manera.

***

El almizcle de la tierra llenó el castillo mientras el aguacero continuaba durante días.

A pesar del clima, Riftan había ido inspeccionando el pueblo, la mina y las granjas. Queriendo ser responsable también, Max había pedido permiso para usar la biblioteca libremente. Se sintió invadida por la incertidumbre con todos los libros, pensando demasiado en que podría dañarlos, pero pronto su miedo se convirtió en asombro mientras examinaba las estanterías.

Max encontró un libro de contabilidad escrito por Knight Roem, quien una vez había gobernado a Anatol anidado entre los pergaminos.

Se contuvo de indagar en libros de literatura poética de la era de Roem y en su lugar abrió un libro sobre matemáticas. No estaba intentando aprender nada demasiado grandioso. Lo primero que tenía que hacer era fortalecer sus conocimientos rudimentarios sobre moneda y aritmética básica.

Pero sin alguna guía, sus esfuerzos fueron en vano, fue un gran desafío para alguien sin la educación adecuada.

— Mi señora, el presidente del gremio de comerciantes, ha venido a visitarla.

Max cerró el libro que estaba leyendo y salió de la biblioteca. Cuando siguió a Rodrigo a la sala de estar, un hombre de unos treinta y tantos se levantó de su asiento para saludarla.

—Es un honor conocerla, señora Calypse. Mi nombre es Aderon Thoner —. El comerciante inclinó la cabeza en señal de deferencia.

Max apenas podía poner una sonrisa en su rostro. Se le informó que el comerciante vendría a ella, ahora que la lluvia había amainado, pero enfrentarlo la ponía extremadamente nerviosa. Pero tal vez fuera más por las decisiones que iban a caer en sus manos.

Max contuvo el aliento antes de abrir la boca. —G-gracias por venir a través de l-la llu-lluvia—.

—No es ningún problema, señora. Pido disculpas por no haberte visitado lo suficientemente pronto —, respondió el comerciante, sonriendo generosamente.

Max se sentó frente a la mesa frente a él. Tan pronto como se sentó en la silla acolchada de felpa, todavía se sentía demasiado ansiosa para iniciar una conversación. A pesar de tener suficiente oportunidad para hablar después de reunirse con él, en lugar del silencio que su padre le exigía, no debería estar demasiado nerviosa ahora. Pero no pudo evitar sentirse nerviosa.

—Escuché que planeas renovar el castillo. ¿Tiene un lugar específico por el que desea comenzar?

El comerciante habló antes que Max, quien no se atrevió a hablar rápidamente.

—B-bueno, yo quiero ca- cambiar las ve-ventanas pri-primero. L-los pasillos están demasiado oscuros y muchas habitaciones tienen ventanas rr- rotas .

—Cambiar todas las ventanas del castillo por otras nuevas aumentará considerablemente el costo. ¿Estás pensando en balt-glass?

Max se imaginó las ventanas transparentes del interior del castillo Croix. Ella no sabía que había diferentes tipos de vidrio.

—El precio varía mucho según el tipo de vidrio. Balt-glass es el más barato, mientras que el cristal del continente sur es la variante más cara. Si lo desea, puedo preparar algunas muestras para mostrárselas la próxima vez .

—S-sí, me-gustaría mucho.

—¿Alguna otra cosa que le gustaría cambiar?

—N-necesitamos c-cortinas para t-la v-ventana y una l-lámpara de araña p-para la s- sala de b-banquete. A-también a-alfombras d-decorativas p-para los pisos -y las p-paredes…

Al darse cuenta de que esto podría ser un negocio enorme para él, el comerciante sonrió de oreja a oreja. Por otro lado, Max sintió que su garganta se apretaba. Riftan dijo que pagaría cualquier precio, pero ¿ realmente quiso decir alguna cantidad? Aún no sabe si continuar con este grande. Sin mencionar el ambicioso proyecto de ella, el comerciante había comenzado a apresurarse con sus planes. Deseoso de darle vida y embolsarse las monedas exorbitantes.

—Se necesita algo de tiempo para ordenar todos los artículos que ha enumerado. Volveré con muestras lo antes posible en el momento que más le convenga. Si me lo permite, ¿puede mostrarme los pisos y las paredes que tiene la intención de decorar, señora?

Max miró a Rodrigo con una ligera inclinación de cabeza. El comerciante sabría lo que necesita el castillo mejor que ella.

Los dos salieron de la sala y se dirigieron al salón de banquetes más grande del castillo. Rodrigo, un criado mayor, y dos guardias los siguieron por detrás. Cuando Aderon, el comerciante, miró alrededor de la habitación, pronto pronunció un largo discurso sobre qué parte de la habitación necesita qué y qué artículos necesitarían para pedir más.

Max hizo todo lo posible por recordar cada palabra que mencionó; Vanguardista, dijo, cada pieza exótica que enumeraba promete exuberancia para el interior lúgubre.

—¿Qué opinas sobre cambiar las baldosas de piedra en mármol?—sugirió, mirando al suelo con desaprobación.

—N-nosotros ss-deberíamos trabajar en nuestras p-prioridades p-primero ...— comenzó Max, tratando de no dejarse atrapar por demasiados detalles.

Pero el comerciante continuó moviendo sus manos por la habitación, sus palabras eran rápidas y contrastaban con sus vacilantes palabras.

—Creo que las baldosas de mármol en el piso y un mural - las paredes necesitarán rehacer con cal - se verán fantásticos. Obviamente, me aseguraré de que solo se utilice la excelencia en la restauración .

—Te-tendré que pensar en eso—, respondió con una sonrisa incómoda.

—Creo que es necesario volverse extravagante y elaborado. ¡Este es el castillo del mejor caballero del continente! ¿No estás de acuerdo en que se merece vivir digno de elogio como su título? El comerciante respondió apasionadamente, haciendo que Max se congelara, su sonrisa superficial se volvió casi torcida.

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Estoy de acuerdo con el comerciante… yo: Cambie los pisos!!! renueven las paredes!!! traigan cortinas!! lo mejor para el mejor! no?

Créditos:

Traducción y edición: Niella014



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