Bajo El Roble

138

CAPÍTULO 138
ESTOY ORGULLOSO DE TI  II
—¿Debo colocarle la silla?— Preguntó Kunel.

Cuando ella asintió, el mozo de cuadra colocó hábilmente una silla en la espalda de Rem. Pronto le entregaron las riendas a Max y ella sacó a Rem del establo. Riftan, que ya estaba afuera con su caballo, la levantó y la sentó en el caballo.

—Dado que hace viento, no aceleres demasiado hoy.

Luego montó rápidamente a Talon y cabalgó hacia la puerta trasera. Max no perdió un momento en seguirlo, su emoción era evidente en su rostro. Cuando pensó en un incidente anterior cuando subió una colina en un caballo con él, su corazón comenzó a latir más fuerte. Sintió que su tristeza se desvanecía mientras cabalgaba alegremente.

—¿Dónde está ubicado el la-lago?— dijo, tratando de mantener su voz por encima del viento.

—Sigue este camino y dirígete hacia el oeste un poco—. Al pasar por la puerta, Riftan señaló la carretera sinuosa en el bosque. El camino estrecho bordeado de árboles desnudos a ambos lados parecía difícil de atravesar a caballo.

Max estaba un poco indeciso, aún así, condujo a Rem con cuidado hacia el camino lleno de baches con las raíces de los árboles enredadas. Ella pudo ponerse en una posición estable gracias al eficaz entrenamiento en equitación que había tenido hasta ahora.

Riftan abrió los labios. —Has mejorado  desde la última vez—.

—Practiqué de vez en cuando.

—Estoy orgulloso de ti.

Ante un cumplido que probablemente se diría a un niño pequeño, la mejilla de Max se sonrojó. Riftan observó con cautela para ver si lo estaba siguiendo. Sin embargo, pronto se sintió aliviado por su destreza y decidió acelerar un poco. Siguiendo la cola de su caballo, pasó por el camino estrecho.

Después de un tiempo, el camino se ensanchó y pronto un enorme lago que brillaba apareció a la vista con luz plateada. Max miró hacia abajo desde la colina despejada y exclamó.

En el lago redondo con forma de espejo, la montaña de color marrón rojizo y el cielo azulse reflejaban claramente. En lo alto del perímetro del lago había pinos, afilados como lanzas; densas agujas de pino azul profundo formando sus ramas que casi parecían negras.

Max, que estaba viendo la  vegetación después de mucho tiempo, sonrió. Los pájaros invernales gorjeaban alegremente sobre las tranquilas aguas, mientras que los animales salvajes pacíficamente apagaban su sed cuando se les veía vislumbrar los árboles, era un escenario tan pintoresco.

Cuando Riftan se acercó al trote más cerca de la superficie del agua, un ciervo con la cabeza fuera de detrás del arbusto se alejó corriendo como un viento, asustando incluso a los pájaros en el cielo; perturbando la tranquilidad del bosque silencioso.

—Pensé que el agua se habría congelado, pero parece estar bien—. Le dio una patada leve a Talon en la espalda y se acercó al lago.

Max lo siguió y preguntó sorprendido: —¿El la-lago se congela si es tan grande?—

—En el norte, lagos más grandes se congelan. Incluso puedes caminar sobre él . Los ojos de Max estaban tan abiertos como un platillo como si no pudiera creer sus palabras.

El único hielo que vio fue la fina capa de hielo sobre el cubo de agua que se colocó afuera durante el frío invierno. Entonces, cuando escuchó que un lago tan grande podía congelarse y la gente podía caminar, fue inimaginable.

Ella pensó que podría estar engañándola, así que lo miró con ojos dudosos.

—¿Cómo puedes caminar sobre el lago? Podría caerse al agua si el hielo se rompe .

—Hay personas que realmente murieron mientras cruzaban—. Riftan respondió con

calma como si estuviera mencionando un hecho trivial.

Max frunció el ceño y negó con la cabeza con incredulidad. —Entonces, no deberías

hacerlo—

—Si comprueba que el hielo es lo suficientemente grueso para soportar el peso y moverse, no hay problema. El norte es mucho más frío, así que a menos que haya una gran hidra parecida al demonio escondida debajo, el hielo no se rompe fácilmente.

Max abrió mucho los ojos ante sus palabras que sonaban como si las hubiera experimentado.

—Riftan, ¿tú también caminaste por el lago?

—No es un lago, pero me crucé con algo similar. Cuando era un mercenario soldado,subyugé demonios en Balton, y caminé por el gran glaciar helado  durante tres días para cruzar la meseta de Tranoa.

—¿Qué es un gla-glaciar?— ella preguntó. Nunca había viajado ni conocido a quienes habían viajado, así que todo esto era nuevo para ella.

—El hielo es más grande que esa montaña.

Max estaba asombrada . ¿Cuánto ha experimentado durante los veintiocho años de su vida? Además de enfrentarse y luchar contra el brutal y fuerte demonio y el dragón rojo, cruzó un bloque de hielo más grande que la montaña ...

Era inimaginable para Max, quien había vivido en el castillo del padre toda su vida y solo experimentó cosas después de mudarse aquí a Anatol. ¿Cuán diverso y magnífico sería el mundo que percibía Riftan? Ella sintió que él era un ser ligero completamente diferente ya que ella estaba luchando por establecerse en el Castillo Calypse y dominar la magia curativa.

—Riftan, ¿has estado en los siete países?

— No he estado en Arech y Suikan. No mucho después de unirme a ser mercenario, fui a Libadon y pasé dos años allí. Como acepté solicitudes como conquista de demonios y disputas, fui a Balton ... Allí gané una cantidad sustancial de dinero, pero pensé que no era un lugar para que viviera la gente, así que vine a Osiria. Me quedé en la capital de Osiria durante unos tres meses para participar en la competencia de esgrima organizada por el templo central, pero me ofrecieron la oportunidad de unirme a los caballeros —. Inclinó levemente la cabeza como si estuviera recordando el pasado ynarró con calma su experiencia.

—Después de regresar y recibir oficialmente el título de caballero, pasé la mayor parte de mi tiempo en Anatol y Dristan.

Créditos:

Traducción y Edición: Niella014

Raws : Donados por Catalina

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