⌗Frenesí⌗ ✧Hyυnlιх✧

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No había pasado ni una hora cuando Félix comenzó a sentirse incómodo con su uniforme que era algo incómodo para el que siempre usaba ropa no tan ajustada como lo era los pantalones que estaba usando y la camisa tal delgada que hacia marcar sus pezones y pecho.

Si bien no es raro que los omega hombres tengan el pecho algo grande y pezones puntiagudos los suyos eran mas notorios y grandes. Ahora los odiaba mas que nunca. Aunque se sintió afortunado de no llevar los pantalones cortos hasta los muslos como los demás empleados, Minho incluido con ellos aunque a el parecía no importarle que algunos lo tocaran el trasero sin pudor ni vergüenza.

Había pocos meseros como el, aunque las mayoría fueran chicas también llevaban ropa corta y reveraladora alguien como el. A las personas que atendió eran mujeres un poco mayores, en su mayoría betas que le pusieron varios billetes en el bolsillo trasero de sus vaqueros. Era asqueroso pero al menos eran generosas con las propinas que le daban después de comérselo con los ojos.

Y después de unos días su clienta habitual era Daehyung una de las socias mas importantes del club, y la que mejor pagaba por su compañía. Como todos los días Félix estaba con ella a un lado de la piscina sosteniendo una tolla para cuando la mujer saliera del agua.

Llevaba esa mañana un atuendo mas abrigado porque hacia frío. Y no había demasiadas personas afuera como de costumbre. Y era mucho mejor porque no tendría que estar tomando pedidos o algo parecido.

Los domingos eran mas tranquilos según le dijo Minho cuando se reunieron a cenar. Cuando finalmente pudo volver a dentro acompañando a la señora Daehyung hasta su habitación y pudo volver con sus otros compañeros.

Aunque antes de ingresar a el comer escucho que estaban hablando de el.

—Jajaja por dios, sabemos que es solo porque es nuevo. Así son todos sabes, no se preocupen por el.— dijo su compañera a quien conocía como Wooyoung.

—Callate, si Minho te escucha hablando así de el te a romper la nariz— le advirtió Sana si no recordaba mal. 

Si Minho le dijo que esas eran unas arpías  que estaban celosas de el, porque el era de la única persona de la que hablaban en el club los últimos días, además de que el era el que recibía mas propinas.

Y no era que le importará demasiado lo que decían, era que ni siquiera tenían los ovarios suficientes para decírselo en la cara.

Cuando entro a la cocina hizo de cuanta que no escucho nada y ellas actuaron como si no hubieran dicho nada.

El timbre de servicio sonó y las risas de las chicas se  
apagaron cuando vieron el número que marcaba el timbre. Era obvio que quien fuera era alguien no muy amable.

—Deberias ir tu Félix — dijo Chaewon. —eres el favorito de los clientes. Puedes con este— dijo de forma burlona con un tono cargado de ironía.

—Claro, ve esta cliente es algo exigente — sonrió Wooyoung.

Y sin decir nada más Félix se fueron sin decir nada mas porque tenia trabajo que hacer.