Ignazio: por supuesto, porque?
(tn): no lo se, pensé que solo lo decías en juego
Ignazio: por supuesto que no, mañana empiezo desde temprano señorita-rio tímidamente-
(tn): vale te esperare, no seré tan dura
Ignazio: eso espero, aun falta camino, quieres escuchar una canción?
(tn): claro, puedes sacar tu teléfono? porque yo si alcanzo tu bolsa
Ignazio: haha no tonta, yo te cantare una canción
(tn): ohh...pues...aun mejor
♪ ♫ Io canto il mio amore per te...
questa notte diventa poesia...
la mia voce sara...
una lacrima di nostalgia...
non ti chiedero mai...
perche da me sei andata via...
per me 'e giusto...
tutto quello che fai...
io ti amo, e gridarlo vorrei... ♪ ♫
Mi piel se erizaba al momento en el que el cantaba, la noche estaba hermosa en aquella ciudad, aquellas calles que eran testigos de aquella melodía, mis pensamientos divagaban entre tantas cosas, como ese hombre podría ser tan hermoso en todos los sentidos, apenas llevábamos días de haber coincidido y en ese tiempo mi estomago al igual que mi todo habían pasado por demasiadas reacciones que nunca en mi vida había sentido al estar cerca de un hombre...
Cuando menos lo pensé había quedado totalmente dormida en la espalda de aquel hombre.
IGNAZIO PROV:
Había algo raro pero especial en ella, no había cantado para ningún otra chica que no fueran las fans y por alguna razón no quería decirle a ella que era un tanto famoso, tenia miedo de que esta magia terminara entre nosotros, ella era diferente a las demás, eso me hacia querer conocerla mas y mas, sonreía con el simple echo de saber que había dejado que ella ganara para poder pasar un fin de semana a su lado, era un tonto que empezaba a sentir algo por ella.
Ignazio: (tn) llegamos
(Tn): ohh-bostezo- no me di ni cuenta cuando quede dormida, perdón por las molestias de hoy
Ignazio: no te preocupes suele pasar, entonces mañana estaré a tu disposición, llama cuando quieras que venga
(tn): vale, gracias por traerme a casa, descansa
Se acerco a mi dándome un beso en la mejilla, la vi entrar a su dpto, al cerrarse la puerta sin querer esa sonrisa apareció en mis labios, me sentía como un niño, no quería que esta sensación terminara, me hacia sentir vivo pero también me hacia sentir mal, no quería depender de ese sentimiento, no quería desilusionarme, deje los malos pensamientos y me diriji hacia mi casa.
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constantemente tuya
Romancesoy (tn) Glez, una chica común y corriente, la cual a sus 19 años no e vivido lo que muchos llaman "el amor verdadero" y sinceramente hace tiempo que no lo espero, pero tal vez todo cambie de un día para otro, a caso conoceré al chico que robe mis s...
