Prohibidos | Haikaveh

Capítulo 03

Arte por @/thijikoy via Twitter.

—¿Puedes abrir la puerta? —preguntó Alhaitham saliendo de su habitación luego de que se escuchara los golpes sobre esta misma. Kaveh se volteó y también salió de su pequeño cuarto, encontrándose con el peligrís frente a su puerta.

—Oh, ¿también eso? El que debería pagarme eres tú, ¿no lo crees? —respondió Kaveh con disgusto. A pesar de eso, caminó hacia la entrada y le abrió el paso a los invitados que esperaban pacientemente afuera del departamento. Estos se encontraban serios mirándose el uno al otro. Sin embargo, Kaveh trató de hacer memoria sobre quién era el particular chico que acompañaba a su amigo, el cual, al ver al rubio dentro de la casa, se echó a reír casi sin razón.

—Oh, así que era en serio lo de que estabas viviendo aquí —mencionó Cyno entre carcajadas. El chico a su lado entregó una sonrisa tímida y se encogió de hombros. Kaveh levantó ambas cejas y se cubrió el rostro con una mano.

—¿Hay rumores? Por los siete, ahora saben que vivo con un robot —comentó lamentándose de forma irónica. Por detrás apareció Alhaitham que había cambiado de vestuario y había peinado un poco sus pelos que se encontraba alborotados momentos atrás. Le dio un leve golpe en la nuca al contrario y sonrió por la errática reacción.

—Nunca antes mejor dicho —dijo Cyno adentrándose en el hogar. Tomó de la muñeca a su acompañante con confianza y lo incitó a entrar junto con él. Ambos anfitriones hicieron un lugar para ellos y cerraron la puerta—. ¿Qué tal están? Hace tiempo que no los veía.

—Para vivir en el mismo edificio, nos cruzamos muy poco, ¿no lo creen?

—¡Es bastante cierto! —exclamó Kaveh. Luego de eso, recordó que aún no podía hacer memoria sobre la identidad de ese chico tan cohibido, por lo que prefirió preguntar en vez de seguir dando tantas vueltas mentales—. Siento la ignorancia, ¿y él debe ser...?

—Oh, claro. Casi lo olvido —dijo aclarando su garganta en el camino—. Kaveh, Alhaitham, tal vez puede que lo recuerden de la Academia de Biología, era estudiante de botánica.

—Claro. Es un placer volver a verte —Alhaitham agitó su mano, saludándolo con amabilidad, a lo que este respondió de la misma manera. El pelinegro tenía una mezcla de emociones bastante extraña, pero disimuladamente se ocultaba detrás de Cyno cuando su ansiedad social le ganaba en estas situaciones.

—Yo... creo que habré estado muy ocupado borracho, pero es un gusto conocerte. ¿Cuál es tu nombre? —preguntó ahora Kaveh extendiendo su mano hacia él. Esperó unos segundos a que el joven pelinegro correspondiera.

—El gusto es mío... —los nervios le habían ganado en ese momento, y en vez de responder con su nombre, simplemente saludó de vuelta y estrechó manos con Kaveh, que sonrió sincero. Un gesto que le había dado algo de confianza al contrario.

—Su nombre es Tighnari... y es mi novio.

Kaveh y Alhaitham se quedaron de piedra. Ambos por distintas razones, pero ninguno sentía odio o rechazo a la declaración que su amigo de la infancia les había hecho a ambos. Mientras Alhaitham pensaba en lo que bien que Cyno lo había ocultado todo este tiempo, Kaveh se sentía mortificado por la valentía de su amigo al haber hecho una confesión de una forma tan particularmente natural. Casi que pudo sentir algo de envidia nacer dentro de él mismo por la actitud tan calmada y desinteresada que mantenía a lo largo del silencio arrasador que había en el ambiente.

—Oh, en ese caso... —dijo el mayor rompiendo el silencio. Sonrió levemente y asintió con la cabeza cuando Cyno lo miró fijamente con agradecimiento—. Siéntete como en casa, Tighnari.