Peaches | Princesa Peach x TN

Epílogo

Habían llegado al Reino Champiñón sanos y salvos ahora sí, pasaron unos días mientras ayudabas a los Toads a reparar los daños causados en la ciudad.

Te mudaste con Peach, ella se veía tan feliz ahora, caminaste hacia Kinopio una vez lo viste.

— Lo logré, señor. —Te agachaste.

El te miró sonriendo.— Felicidades, ahora hay que disfrutar esta corta vida.

Miraron al cielo unos minutos, el sol comenzaba a ocultarse.

— ¿Que esperas para casarte con ella? —Preguntó.

Te sonrojaste rápidamente y te pusiste nervioso.— ¿¡B-Boda!?... No sé si esté listo para eso.

. . .

Pasaron las semanas y finalmente comenzaste una relación más formal con Peach, habían comenzado a salir de forma oficial.

Ambos estaban en el balcón donde ella te había entrenado tiempo antes.

Miraban el atardecer, sonreían muy felices.

— Peach... Estuve pensando algo mucho en estos últimos días. —Le dijiste.

— ¿Eh? ¿Que sucede? —Te preguntó con un poco de preocupación.

Buscabas las palabras adecuadas para expresar lo que sentías.

— Siento que... Llevamos mucho tiempo saliendo y... —Buscaste algo en tu bolsillo.— No sé cómo decir esto, nunca lo había hecho.

Te agachaste, preparaste la posición indicada para tu propuesta.

— Eres la mujer con la que quiero estar el resto de mi vida. —Sacaste una caja de dónde salió un anillo.— ¿Te casarías conmigo?

Ella se sonrojó rápidamente y sacó unas lágrimas de felicidad.

— ¡Si! —Exclamó.— ¡Si quiero ser tu esposa!

Le pusiste el anillo en su dedo y la abrazaste rápidamente, la besaste con mucho amor.

. . .

Prepararon su boda lo mejor posible, querías que fuera perfecta para Peach.

Todos los invitados ya habían llegado; tus hermanos, Pauline, quien ya había entablado una relación con Mario, Daisy, los Kongs, y unos más que habías conocido durante tu vida en el Reino.

Ya estabas en el altar, listo para entrar en matrimonio con tu querida.

Ella fue acompañada al altar de la mano de Kinopio, era tan hermosa con ese vestido blanco.

Kinopio tomó el libro sagrado y comenzó la boda.

— Estamos aquí reunidos para unir a estos 2 jóvenes en sagrado matrimonio.

Mirabas a Peach con mucha emoción, te encantaba verla, se veía tan hermosa como siempre.

El evento siguió, se estaba llevando a cabo en el jardín del castillo.

— Peach, ¿Aceptas a (T/N) cómo tú legítimo esposo, para amarlo y respetarlo en matrimonio?

— ¡Si! —Dijo muy emocionada.— ¡Acepto!

— Y (T/N), aceptas a Peach como tú legítima esposa, para amarla y respetarla en matrimonio?

Sonreíste con mucho gusto.— Acepto.

Dixie pasó con los anillos, mientras Diddy lanzaba pétalos de flores.

Tomaste el anillo para Peach y comenzaste a hablar.— Quien diría que entrar a jugar en las alcantarillas me haría conocer al amor de mi vida. —Reíste, tomaste su mano y colocaste el anillo.

Ella hizo la misma acción.

Siguieron, hasta que el final llegó, ésta vez nadie se opuso.

— Puede besar a la novia.

Se miraron con un poco de nervios, hasta que la abrazaste y rápidamente besaste su boca.

Festejaron todo el día y noche.

. . .

— ¡(T/N), despierta! —Peach gritó corriendo a ti.

Estabas dormido aún, despertaste a causa de sus gritos.— ¿Que pasa, querida?

Ella se acercó ocultando sus manos tras su espalda, se sentó en la cama a tu lado y comenzó a hablar.

— Yo sé que... Quizá no hemos pensado en, la loca idea de... Ya sabes, formar una familia...

Abriste bien los ojos con un poco de nervios, te levantaste y te sentaste con nervios, sabías lo que vendría; ella querría tener hijos.

— ¡Felicidades! —Sacó una prueba de embarazo de su espalda.— ¡Vas a ser padre!

La miraste con nervios, impresionado, sin decir nada.

— Vamos... ¿A ser papás?

— ¿No te gustó la sorpresa? —Preguntó con un poco de nervios y tristeza.

— No había escuchado una mejor noticia desde que aceptaste ser mi esposa. —Le dijiste.

Se abrazaron y cayeron en la cama, comenzaron a besarse, miraste su vientre y le diste un beso.

. . .

El tiempo pasó, y con ello los años, unos 3 aproximadamente, las cosas habían cambiado un poco.

Donkey Kong tomó el trono de la isla Kong tras la perdida de Cranky, seguían en contacto y de vez en cuando se reunían para jugar algunos deportes, juegos de mesa y Karts.

Daisy y Luigi se habían conocido y comenzaron a salir, a pesar de que él era muy asustadizo, estar con alguien como Daisy lo hizo ser más confiado de si mismo, incluso había ahorrado y se compró una mansión en el Reino Champiñón para vacacionar.

Ya tenías una familia de 2 hijos con Peach, gemelos, Kinopio había fallecido un tiempo atrás, por lo que Peach ascendió a ser la Reina.

Bowser permanecía resguardado en un calabozo oculto bajo el Reino Champiñón, ni sus tropas sabían de su ubicación, así que siguieron con sus vidas.

Todos se reunieron una vez más para celebrar el cumpleaños número 3 de tus hijos, Peach y tú estaban muy felices ahora, todo estaba de maravilla.

Habías logrado cumplir tus sueños.