Jibaku Shounen Hanako-Kun || Oneshot's

«;🌃; Agujero de conejo - 2/3»

Un cosquilleo en su nariz la obliga a abrir los ojos para notar a un gato de pelaje castaño mirándola fijamente y con sus pupilas agrandadas, ella se levanta con confusión para observar al felino el cual parecía no tener ni un mínimo agrado con su presencia.

—¿Quien eres? —le pregunto al gato, el cual empezó a mover su cola a los lados lenta y cuidadosamente.

—No necesitas saberlo, Daikon —contesto sin más antes de desaparecer de su vista.

—¿Entonces como te voy a llamar? "Gato raro" no me parece un buen nombre que digamos —Sintio un peso en su cabeza por lo que supuso que el gato estaba encima de esta.

—Tsukasa, así me llamo —La cola del gato se movió justo en su nariz haciéndola estornudar ganándose un gruñido en parte del gato, el cual salió de su cabeza flotando frente ella—. Eres demasiado molesta, niña.

—Tu eres muy raro, pero bueno, quien soy yo para discriminar a un gato que habla —La chica se levantó del tronco para limpiar su vestido y ver al gato con el ceño fruncido—. Señor gato, ¿Sabes cuál es el camino que debo seguir?

El gato se quedó en silencio recostado en el aire y moviendo la cola con indiferencia sin importarle que está pasará por la nariz de la chica haciéndole cosquillas. Ronroneo suavemente antes de estirarse y aparecer frente a un árbol que dividía dos caminos: el primero estaba lleno de rosas y desprendía un delicioso olor a canela, mientras que el segundo era de flores marchitas y árboles sin hojas.

—Este mundo es confuso, todo lo bonito en el fondo es peligroso, y todo lo peligroso en el fondo es...bueno, es lo que debe ser —dijo sin más para estirar sus garras en el tronco del árbol haciendo que de ese lugar cayeran dos hojas con formas de flechas, una de color negro y la otra blanca, que se posicionaron en sus caminos contrarios.

—Entonces, dices que...¿Vaya al camino oscuro? —El gato solo la miro. Ella suspiro antes de quedar completamente confundida—. No te comprendo, gato, pero me pareces de poca confianza, ¿Por qué debo confiar en ti?

—No debes, es tu problema si confías o desconfías, después de todo, solo soy un gato perdido en medio del bosque, y tú solo eres un Daikon igual de perdida que yo —Al decir eso desapareció del árbol dejando una sonrisa al final.

La mirada de la peli crema paso desde el camino negro al de colores claros antes de suspirar y hacerle caso al gato extraño que había visto, no tenía fuerzas para discutir contra un felino, y tampoco es como si tuviera otras opciones.

Solo arriesgar.

♪~ . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ~♪

Al bajar por unas colinas se encuentra otra vez en el bosque de hongos, perdida y sola. Su corazón palpitaba con fuerza sin poder volver atrás, a ella se le había olvidado el camino en el que había caminado.

¿Paso por el camino de la izquierda? O al contrario ¿Paso por el de la derecha? No lo sabía exactamente, y tenía miedo de pasar y equivocarse.

Pero bueno.

Su mirada se dirigió a una nube en el aire, está tenía una extraña forma de estrella, al lado empezó a aparecer una con forma de luna y muchas figuras más. Todas estas venían de la misma dirección, por lo que su curiosidad la hizo caminar a ese lugar con nerviosismo.

No podía creer lo que sus ojos veían.

¿Una oruga fumando? ¿Que rayos?

—Llevamos tiempo esperándote, pequeña Alicia —dijo la oruga para soplar con su pipa una masa de humo que empezó a cambiar de formas en el aire: un corazón, un trébol, una espada, entre otras más.