prólogo

586 47 15
                                    

El reino de los koopas se había quedado al mando de kamek el cual estaba disfrutando de reinar.

El koopa mago estaba sentado en el trono mientras que dos goombas lo abanicaban y bebía un cóctel con una piña como decoración.

- es bueno ser rey - dejo salir al dejar la bebida a un lado.

Unos aplausos firmes pero pausados llamaron la atención del koopa levantándose enojado.

-¿¡Quien se atreve a.... a... a... - al ver de quién se trataba se quedó pálido.

Los aplausos frenaron y unos pasos de tacones se escuchaban mientras que koopas, goombas y snipys se arrodillaban con miedo.

Y todo ese miedo era causado por una mujer con el cabello largo rojo como la sangre ondulado, ojos negros, piel blanca, alta, sombra en sus ojos roja y unos labios pintados del mismo color

vestía con un sostén negro de cuero dejado ver varios tatuajes de cráneos, short de cuero y unas botas altas que llegaban hasta sus rodillas.

Lo que más llamaba la atención aparte de su belleza innegable era su corona con joyas de color negro.

- kamek dime ahora aparte de ciego eres tartamudo, cada día eres más inútil - hablo la mujer con una voz la cual era firme pero sin dejar de ser muy aguada casi siendo tierna- ahora, ¿ Dónde está el perdedor que se hace llamar rey? -puso una mano en su cintura rodando los ojos

- el está... Tocando el piano ¡Si,eso! - hablo nervioso el koopa mago - sabe que odia que lo molesten así que porque no regresa más tarde, ji.

- ¿ Que? - hablo un koopa y la mujer giro mientras que kamek trataba de que se callara con gestos lo cual no consiguió - pensé que había Sido capturado.

La mujer dió una ligera sonrisa para lanzanzarle un hechizo que le causó mucho dolor.

- no se, creo que olvidas de lo que soy capaz - apretó más haciendo que este soltara quejidos de dolor - ¿ Te haz visto por dentro? - este nego rápidamente - encantada de mostrarte - iba a lanzar otro ataque.

- ¡piedad, porfavor piedad su majestad! - grito con fuerza moviendo sus patas.

- ¡Ja! Esa palabra no existe en mi vocabulario si me mienten - lo giro y su esqueleto salió mientras que su piel quedó como un pedazo de tela - fuera de mi vista - el koopa mago fue liberado mientras que su esqueleto tomaba la piel para salir corriendo lejos.

Está  miro a los súbditos del rey koopa que miraban con temor.

-¡ Tu! - señaló a un goomba el cual se desmayo - débil... - susurro.

- su majestad - un koopa caparazón azul se arrodilló frente a la mujer - yo puedo contarle que fue lo que le pasó a nuestro líder.

Mientras tanto en el reino champiñon el rey de los koopas yacía en su celda aburrido sin saber que hacer más que hacer bolas de fuego y lanzarlas contra la pared como si fuera una pelota.

- peaches peaches peaches peaches... - susurraba aquella cancioncita que había compuesto y planeaba cantar al final de su boda la cual nunca se dió.

Derrepente la puerta se abrió dejando ver a la princesa que había robado su corazón mirándola fijamente con amor atrapando la pelota.

- princesa peach sabia que reconcideraria mi propuesta le prometo que gobernaremos juntos y seremos invencibles...

La princesa cerro la puerta de un portazo el cual asusto a los guardias de afuera.

- oh, vaya que está desesperada - alzó las cejas coquetamente.

- cinco días... - susurro dándole la espalda a bowser el cuál al escuchar la voz ya sabía de quién se trataba - ¡ Te deje solo por cinco días! ¡¿Y que haces?! - voltio para caminar hacia el y agitar su jaula - ¡Decides robar una estrella del poder para obligar a una humana a casarse contigo!.

𝕀 𝕝𝕠𝕧𝕖 𝕪𝕠𝕦Donde viven las historias. Descúbrelo ahora