Druit •KookV•

Capítulo 44

El día había sido jodidamente pesado, por eso decidió escapar un momento del lugar donde se estaban quedando, quería ir a su lugar seguro para imaginar que nada había cambiado, quería creer que todo seguía exactamente igual que antes. Antes, cuando Jungkook y él eran felices.

—¿No es demasiado tarde para que un chiquillo como tú esté solo? —Escuchó una voz a sus espaldas, así que volteó con prisa, pero no porque se haya sentido alerta, más bien fue porque cada uno de sus músculos se contrajo con emoción.

Quizá era cierto, nada había cambiado o quizá, solo era un estúpido sueño. lo precia cuando su mirada encontró él trabajado cuerpo de Jungkook vistiendo un elegante traje de diseñador y en el cómo las luciérnagas volaban alrededor de él. La vista era simplemente mágica.

La postura de su prometido era arrogante y firme, nada que ver con la postura relajada que siempre tenía, pero eso ni siquiera le importó, era Jungkook, Jk, Kook, su compañero.

—¿No debería de decir lo mismo? —Dijo abochornado mientras volteaba hacia otro lado, no entendía porque se sentía tan nervioso, pero lo hacía y claramente no le gustó, él debería de aprovechar ahora que estaban solos para tratar de hacer recordar a Jungkook, pero no era correcto hacer aquello.

Unos pasos comenzaron a acercarse a él y de pronto sintió el calor y cercanía de alguien a su lado, aunque no estaban lo suficientemente cerca y eso lo estaba frustrando.

—Nunca le des la espalda a tu enemigo —El hombre a su lado parecía igual de ansioso por la pequeña distancia que los separaba, por lo que al parecer decidió quitar aquella ansiedad prendiendo un cigarrillo.

Jungkook no lo miraba, a pesar de que estaban tan cerca este solo miraba el cielo nocturno, aunque lo conocía tanto que seguramente ni siquiera le estaba prestando atención al paisaje.

—¿Quien dijo que eres mi enemigo? —Soltó aquello con mucha verdad en sus palabras, solo que parecieron ser objeto de burla para el otro, porque Jungkook comenzó a reírse y después de un rato al fin lo miró.

—Prácticamente le declare la guerra a las pandillas de Manhattan, destruí tu cedé y la cabeza de todos ustedes ya tiene precio —El de cabello negro lo miró con diversión y por alguna razón apagó su cigarrillo— Si eso no me convierte en tu enemigo, entonces no sé qué lo haga.

Él también soltó una pequeña risa ante la obviedad de la situación, pero no podía preocuparse, al menos no cuando tenía a su prometido a lado y su cuerpo clamaba por él— Toda la razón del mundo, pero en mi defensa no eres un enemigo muy bueno, al menos no cuando me haces sentir así de seguro a pesar de que sé que quieres destruirme —Dijo mientras comenzaba a hacer figuras imaginarias en el pasto con su dedo.

Aunque no recibió respuesta hasta después de un rato— ¿A qué te refieres? —La voz del de cabello negro salió ahogada, al parecer le habían afectado sus palabras y él no quería que Jungkook se confundiera, no sabía qué tan peligroso era que lo obligara a recordar, tenía que esperar a tener el libro para saber que era lo que tenía, así que soltó un suspiro pesado y dijo lo más obvio que se le ocurrió.

—Si hubieras querido hacerme daño o tomarme como rehén, ni siquiera hubieras hablado, yo no me había dado cuenta de que estabas aquí, así que hubiera sido fácil para ti noquearme. Así que sé que tus intenciones no son las de iniciar un conflicto.

—Buen punto, no vine aquí buscando pelea —Jungkook lo miró por un largo rato y parecía que la ansiedad en su cuerpo aumentaba— por cierto pequeño cachorro —Jeon lo dejó de mirar y volteó nuevamente al cielo, haciéndolo sentir celoso porque era la primera vez que estaban así de juntos y no tenía toda la atención de este.