CAPÍTULO 10

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Shuichi se despertó con abundantes mensajes de Rantaro, que preguntaba por el número de Kokichi, pues se le había olvidado pedírselo el día anterior.
Shuichi miró los mensajes aún adormilado, y le enfadaron levemente. No le respondió, decidió levantarse y tomarse un café antes de contestar, era demasiado temprano en la mañana como para enfadarse.

Se levantó de mala gana, y al bajar las escaleras vio allí a Kokichi. ¿Es que había llegado más temprano de lo normal? Se acercó a él y llamó su nombre.

-Kokichi, qué haces aquí tan temprano..?

El mencionado miró a Shuichi, y rió suavemente.

-¿Temprano? Creo que tú te has levantado demasiado tarde... Son ya las diez, sabes?

Shuichi la miró algo sorprendido, él no solía dormir tanto.

-Oh... No sé qué habrá pasado, no suelo dormir así...

Kokichi parecía sonriente esa mañana, lo que hizo que el humor del más alto mejorara considerablemente. Mientras el pelimorado preparaba algo de café, Shuichi decidió preguntar de una vez por todas, con una sonrisa en su rostro.

-Hoy pareces de buen humor, ¿pasó algo?

Kokichi le miró por unos segundos, y le respondió con tranquilidad.

-Bueno, es sólo que no estoy muy acostumbrada a socializar, y cuando ayer conocí a Rantaro me sentí algo mejor de haber hecho un amigo.

Explicó Kokichi, aunque aquella sensación desagradable volvió a surgir en Shuichi, de nuevo destruyendo su bien humor. Sabía lo que le pasaba aunque no quisiera admitirselo a sí mismo; Shuichi estaba celoso.

-Sí, supongo que Rantaro es bastante agradable, se hace amigo de todas las mujeres que conoce.

Dijo Shuichi con un tono amable forzado. No sabía porqué estaba insinuando que su propio amigo era un mujeriego, pero sentía una necesidad de que Kokichi perdiera interés en él si es que lo tenía.

Kokichi no pareció afectado, simplemente rió un poco.

-Es normal, Rantaro es muy buen chico.

El peliazul se mantuvo en silencio. Quería seguir poniendo a Rantaro en mal lugar pero no se vio capaz. Era su amigo después de todo y Kokichi ni siquiera era su pareja, no entendía el por qué de aquella sensación tan desagradable que sentía al escuchar a su maid hablar bien de otro hombre.

-Por cierto...

Continuó Kokichi después de unos segundos de silencio.

-¿Tienes el número de Rantaro? Se me olvidó pedírselo ayer.

Shuichi no tuvo más remedio que intercambiar los números de su maid y su amigo, por mucho que él estuviera en contra. Serían muy obvios sus celos si se negara a darle el número del otro, por lo que simplemente accedió.
A Kokichi no le gustaba usar el móvil durante su jornada laboral, se supone que tenía que centrarse en sus tareas y hacer bien su trabajo, pero no podía evitar hablar con Rantaro cuando nadie le miraba. Se sentía absorbido siempre que mantenía conversación con él, tanto que casi le pillan con el móvil en múltiples ocasiones. En cierto punto Rantaro le invitó a quedar de nuevo y hablar en persona, pero Kokichi le contestó que tenía trabajo que hacer, por lo que Rantaro no insistió más.

Cuando Rantaro se quedó sin su opinión principal, decidió quedar con Shuichi, él era el que sabía más de Kokichi después de todo. Rantaro sentía una comodidad especial junto a Kokichi, le pareció buena chica a pesar de que acababan de conocerse. Le daba curiosidad su agradable actitud, aunque por algún motivo se sentía forzada, como si estuviera fingiendo su identidad. Eso sólo alimentaba la curiosidad del peliverde, el cual tenía muchas ganas de volver a ver a Kokichi.

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Shuichi aceptó verse con Rantaro en su casa. No tenía especiales ganas de verle, pero seguía pensando que todo estaba sólo en su imaginación y que en realidad no había nada entre su amigo y su maid, y tenía que empezar a tratarle como siempre lo ha hecho para quitarse esas sensaciones de la cabeza.
Rantaro fue recibido por Kirumi, la cual le guió hasta la habitación de Shuichi con una amable sonrisa. A Kirumi le gustaba la actitud de Rantaro, era muy respetuoso y tranquilo al igual que ella por lo que les fue fácil hacer migas cuando se conocieron por primera vez.

Los dos amigos estuvieron en la habitación de Shuichi, hablando y disfrutando la compañía del otro hasta que el más alto mencionó de nuevo a Kokichi.

-Y, ¿crees que Kokichi pudiera venir algún otro día con nosotros? Es una muy buena chica, me gustaría conocerla más. Sería muy agradable que fuera parte del grupo, nunca está de más tener más amigos.

Rantaro sugirió con una sonrisa. Los celos de Shuichi estaban empezando a convertirse en enfado e impaciencia, pero trató con todas sus fuerzas de ser respetuoso.

-No estoy seguro, es una chica muy tímida y creo que a Kaede no le agrada demasiado.

Shuichi estaba tratando desesperadamente de alejar al peliverde de su maid, incluso si eso conllevara mentir. No estaba seguro si a Kaede le había gustado mucho Kokichi, pero lo pudo intuir cuando no le dirigió la palabra en casi ningún momento.

-Siempre podemos quedar con ella cuando no esté Kaede, y de todos modos, no está obligada a hablar con Kokichi siempre que no le haga mal.

Rantaro continuó debatiendo, y Shuichi no pensaba rendirse tan fácilmente

-Por ahora no se siente cómoda con tanta gente, sólo conmigo.

-Podemos incluirla en el grupo poco a poco.

La respuesta de Rantaro fue casi instantánea, esto parecía el principio de una guerra, una que ninguno de los dos estaba dispuesto a perder y aún no sabían por qué. No sabían qué había en Kokichi que les intrigaba, pero Shuichi necesitaba averiguarlo como detective, y Rantaro necesitaba matar su curiosidad con esa preciosa chica.

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956 palabras

Lo siento 😭😭 de verdad, ya llevo mucho tiempo fuera del fandom y sé que no es excusa, pero no me sentía con ganas de escribir :(. Intentaré terminar esta historia y dudo que suba más cuando termine, pero también tengo una segunda historia abierta en mi perfil ("No estás solo y nunca lo estarás") y esa historia si tenía pensado que fuera larga. A ambos les queda mucha historia, pero quiero terminarla para no dejar las cosas a medias así que intentaré seguir actualizando. Siento mucho a la gente que esperaba los capítulos de esta historia, siento haberos hecho esperar tanto, pero juro que tendrán su historia terminada en algún momento tengan paciencia 😭
(Por favor no me asesinen)

Amor amor! ❤️
(Os amo lo juro mucho )

Maid Service - SaiomaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora