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Narrador omnisciente.

El partido de fútbol americano estaba a la mitad de transcurso, el equipo de la pelirroja iba perdiendo por varios puntos abajo haciendo que las cosas se pusieran tensas.

Por lo anterior estaban tomando un pequeño descanso.

—¿Acaso no me ves Madelain? ¡Estoy sola y no me pasas el balón!

La pelirroja frunció el ceño comenzando a enojarse ¿por qué justo ella le estaba gritando?

—No me estés gritando Alondra, si no te paso el balón es por algo.

—No porque seas la mariscal tienes derecho a mandar eh—se acercó a ella de forma amenazante.

Madelain comenzó a reír con ironía.—¿Te estas escuchando? Yo soy la mariscal, yo decido a quien le mando el balón y si no quiero pasártelo no lo voy hacer.

Sus compañeras alrededor estaban atentas ante aquella discusión, las cosas entre Alondra y Madelain estaban complicadas y tensas desde días anteriores.

—Entonces que mala capitana eres... y novia también—susurro lo último.

A pesar de que había susurrado, la pelirroja alcanzó a escuchar con claridad.

—¿Qué mierda dijiste?—la siguió por detrás.

—Que eres una pésima capitana—se dio la vuelta viéndola.—Y novia también.

Recalcó las últimas palabras.

—Chicas ya basta—hablo Sarah acercándose a ellas.

Madelain se acercó más a ella ya enojada, le molestaba que hablara sin saber y más por todos los rumores que pasaban entre Alondra y Emilio.

—¿Acaso te arde que sea yo la novia de Emilio?

Alondra río de forma burlesca.—No te preocupes no necesito ser la novia de Emilio para besarlo.

Esa fue la gota que derramó el vaso, la ira se expandió por todo el cuerpo de Madelain dándole un fuerte empujón que terminó por derribarla.

—¿¡Qué dijiste!? ¡Vuelve a repetirlo idiota!

Alondra se puso de pie rápidamente empujándola también.

—¡Me bese a tu novio y ni siquiera pensó en ti!

El resto de sus compañeras se acercaron a ellas para separarlas, Sarah tomó por la cintura a su mejor amiga jalándola hacia atrás para evitar una pelea mayor. Aunque aquella discusión estaba llamando la atención de todos.

—¡Madelain, Alondra ya basta las dos!—grito su entrenador.—¡Ambas quedan fuera del partido!

—¡¿Lo ves Madelain?! ¡No eres tan especial como crees!

La anterior mencionada intentó soltarse de los brazos de su mejor amiga, tenía mucho ira acumulada contra Alondra quien solo se encargaba de hacerla enojar.

Un nuevo agarre en su cintura la jalo por completo cargándola y sacándola de aquella discusión para llevarla a los vestidores.

No tenía ni idea de quién era la persona que la sacó de ahí, su mente estaba completamente nublada entre enojo y tristeza.

—Madelain cálmate por favor.

Por fin pudo darse cuenta quien era la persona que la sacó de la pelea, mirando a la última persona que quería ver en ese momento.

Se soltó de su agarre empujándolo hacia atrás.

—¡No me toques Emilio!—comenzó a darle manotazos por todo su torso.—¡Vete de aquí!

—Por favor cálmate—la agarró por las muñecas inmovilizándola.—Escúchame primero.

La mayor lo miró con furia a pesar de que lágrimas salían de sus ojos.

—¡No te quiero escuchar!—intento soltarse.—No supe nada de ti en días y ahora me entero que te besaste con la estúpida de Alondra.

Las lágrimas se deslizaban por sus mejillas, todo su cuerpo estaba temblando por el enojo mientras que Emilio intentaba tranquilizarla sin saber que decirle.

—¿Le vas a creer a ella y no a mí? Yo soy tu novio.

—Entonces dime la verdad ¿te besaste con ella o no?

Emilio sin dudarlo respondió.—No, no me bese con ella.

Analizó el rostro de su novio, buscando algún indicio de que estaba mintiendo sin embargo sabía que no tenía porque reclamarle no después de todo lo que ella le había hecho, de todo lo que le ocultaba.

Entonces se derrumbó, por la culpa que sentía por todo lo malo que le estaba haciendo a la persona que supuestamente ama.
Comenzó a llorar sin poder contenerse.

—Amor tranquila—la abrazó pegándola a su pecho y acariciando su cabello.—Por favor no llores.

Madelain se aferró al cuerpo de su novio continuando con su llanto, siendo consolada por el jugador del America.

Todo esto era visto por Kevin, quien se encontraba en la entrada de los vestidores escondido para no ser visto.

Una sensación de celos lo invadió al ver a la chica que le gusta abrazada a otro hombre que no era él.

Sabía que lo de ellos no tenía un título, que simplemente era el cuerno en esa relación pero él quería más.

Él quería ser el único que la abrazara, él único que la besara, él único que estuviera para ella en su peor y mejor momento, quería ser él único amor de Madelain.

Y completamente cegado por los celos fue hacia ellos, haciéndose notar.

—¿Interrumpo algo?

El llanto de Madelain se detuvo en cuanto vio al jugador de Pachuca, sabía que estaba ahí pero por la situación no se puso a pensar el porqué Emilio estaba en el partido.

Se suponía que él tenía que estar en Tijuana para un nuevo enfrentamiento del America.

—¿Quien eres tú?—pregunto Emilio sin soltar a su novia.

La mirada de Kevin estaba enfocada en Madelain, quería hacerle saber que estaba celoso y algo enojado.

—Kevin Álvarez. Vine a verte Madelain después de lo qué pasó en el campo.

Emilio miró con confusión a la pelirroja ¿de donde conocía a su novia?

—¿De dónde lo conoces?

—Es un amigo—respondió separándose de Emilio.

Aquella acción le pareció extraña al más joven de los tres, su mirada ahora se dirigió al tal Kevin analizándolo de pies a cabeza.

—Madelain está bien y nosotros ya nos vamos—respondió por los dos.

Caminaron hacia la salida del vestidor dejando atrás toda la tensión creada entre los tres, Kevin solo pudo ver cómo alejaban de él a la chica que poco a poco se estaba ganando su corazón.

ꕤ ꕤ ꕤ

Se vienen los putazoooos y solo dire q Emilio es de carácter fuerte

𝐓𝐖𝐎 𝐋𝐎𝐕𝐄𝐒-Kevin ÁlvarezDonde viven las historias. Descúbrelo ahora