Loud (MewGulf) ² (PAUSADA)

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—¿El señor Kanawut te dio un condón?

— No, Brithg, es un caramelo, ¿No conoces un paquete de golosinas?

— Oh, tienes razón, lo siento, no leí la parte de "Mentolado".

Los dos chicos no dijeron nada, algo incómodos.

Brithg comenzó a reír, dejando el condón sobre la mesa, junto a Mew, quien le dedicó una mirada molesta.

— Ahora que los jefecitos se fueron, Gulf, puedes abrir mi- digo, el regalo de Mew.

Gulf miró confundido a su novio, él ya le había dado su regalo, ¿Tendría otro?

Mew tardó un momento en recordar, comenzó a negar, intentando frenar a Brithg, pero el pelirrosa dejó la caja, pintada de negro y con un moño del mismo color frente a Gulf.

— Oh, tu color favorito, Mew— comentó Win con gracia.

El castaño pasó su mirada del regalo a Mew antes de abrirlo, ladeando un poco su cabeza al ver lo que había en su interior.

Tanto Brithg como Win comenzaron a reír cuando Gulf tomó las orejitas de gato de encaje y se las acomodó sobre su cabeza, con una sonrisa.

— Lindo— dijo el cumpleañero, con toda la inocencia del mundo.

Mew escondía el rostro entre sus manos, encogido en su silla, insultando a Brithg.

Sentía la inocencia de Gulf en peligro.

Escuchó a Gulf reír, con lo que pareció alegría, y abrió sus dedos un poco para ver, frunció el ceño cuando lo vio abrazar lo que parecía un onesie de patito, y suspiró con alivio.

— Ni te relajes, hay más— dijo Brithg, haciendo que Mew se tensara de golpe, viendo al castaño sacar un pote del interior de la caja, mirándolo sin entender lo que era hasta leer la etiqueta.

— Va-se-lina— dijo con torpeza, se preguntó por qué sus amigos le regalarían algo así, sin notar que su novio volvía a esconder su rostro con vergüenza mientras sus dos amigos reían.

Encontró un par de cartas con palabras bonitas, firmadas de parte de Brithg y Win, fue cuando comprendió que sólo estaban molestando a Mew con el regalo, sonriendo mientras las leía, se levantó para abrazarlos como agradecimiento.

— Brithg— murmuró Mew, apretando los dientes, haciendo que el pelirrosa se le acercara para hablar sólo entre ellos dos—. No fue tan terrible como pensé, aunque no creí que lo harías... Sigues siendo un idiota.

Brithg sólo rió.

— Lo iba a hacer en serio, Mew, que poco me conoces— dijo, con una amplia sonrisa—. Pero todas las cosas que quería comprarles eran muy costosas, así que sólo le dí lo más importante.

— ¿Orejitas de gato y lubricante?

— Exacto— dijo—. A demás Win me hizo razonar, y si le regalaba todas esas cosas sería algo de ustedes dos, pero el cumpleaños es sólo de Gulf, así que no sería un regalo para él, por eso elegimos el onesie. Quizás para su aniversario les de esas cositas— el chico alzó las cejas varias veces, irritando a Mew.