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Era muy temprano en la mañana, pero aún así al tocar la puerta de Craig me abrió la puerta la chica de la otra vez.

-Creo que está dormido. Sube sin hacer ruido - Me ordenó antes de dejarme pasar- Ya sabes que habitación es.

Al subir las escaleras, entré en la habitación en la que el se encontraba, y observé como dormía con una sonrisa en la cara. ¿En que estaría soñando? ¿Era conmigo?

-Craig, des... -Fui a despertarle, pero luego me di cuenta de algo que podía hacer antes, por lo que me senté a los pies de la cama- Craig. Sé que estás dormido, pero te lo diré así antes de de verdad. Craig, lo siento. Estaba muy enfadado, por lo que me hice ideas equivocadas. Craig, se que no me querías abandonar, se que era por mi bien. Lo siento mucho, Craig. Fui mala persona...

Sí, así estaba bien. Iba a despertarle en cuanto vi una hoja de diario encima de la mesita de noche. ¿Le importará mucho sí la ojeo? Espero que no.

Agarré la hoja y la comencé a leer, antes de que un escalofrío recorriera mi cuerpo. Dejé la hoja donde estaba al inicio.

-Craig, es hora de despertar - Dije levantándome de la cama-

-Venga, llegaremos tarde.

-Craig, arriba

Me dispuse a retirar el edredón encima de él, y oh Dios. Desearía nunca haberlo hecho. La antes azul cama ahora estaba teñida de un color negro, negro a causa de la cantidad de sangre esparcida por toda la cama. Sangre proveniente del cuerpo de Craig. Puse mi mano sobre las sabanas. Estaban secas. Después sobre la mejilla de Craig.

Su habitual calor había desaparecido. Tome sus brazos, donde se encontraban cicatrices de "Anteriores intentos", entre más "Práctica", por llamarlo de alguna forma. Verticalmente, se encontraba la causa de esa sangre, la causa del nuevo color de sábanas.

En su cuello había una marca de una mano, como si le hubieran cogido de ahí con violencia, incluyendo la brecha de su mejilla.

En la madrugada del lunes 17 de mayo en joven de 17 años, Craig Tucker, después de pelearse con el chico que le gustaba y pensar que ahora le odiaba, y después de haber sido agredido por su padre por dos días seguidos, decidió cortarse las venas y acabar con todo.

D. E. P, Craig Tucker.

Me acerqué a su cara con las manos temblorosas. Quería llorar, pero no podía. Las lágrimas eran tan pesadas que no salían por mis cuencas, solo se quedaban retenidas dentro, observando junto a mis ojos lo que había hecho. Me acerqué a él, para darle nuestro más largo y delicado beso. Concretamente el último.

Su cara parecía tan tranquila... Nisiquiera reaccione cuando vi a ese hombre entrar por la puerta.

-Craig, He escuchado la puerta, ¿No hab...

El hombre al momento me tiró al lado, se quedó observando el cadáver de su hijo en frente suya

-Es tu culpa... Sabía que pasaba algo, me dio la razón en que no debía de haber ido a tu casa... ¡JODER, ES TU CULPA! -Dijo casi listo para quitarse el cinturón, en cuánto una mujer rubia entró por la puerta-

-¿Que está pasando? - Logró decir esa mujer antes de encontrarse con la escena. -

Me echaron de la casa, sin poder decir nada más. Sin poder despedirme de el, sindecirle "Sí, acepto casarme con Craig Tucker".

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Ya habían pasado dos días desde que eso sucedió. Estaba en clase, deambulando por los pasillos, en cuanto Stan Marsh se acercó a mí.

-Que quieres, Stan... No pienso volver a pelear contigo, he dejado el boxeo. -Dije adelantandome a lo que fuera a decir, sin siquiera mirarle a la cara- Si es por eso, puedes irte.

-¿Stan? ¿Tan feo soy? - preguntó mi astronauta, rascandose un poco la nuca-

No podía creerlo. No. No era posible.

- Oye, mira. Perdón por lo de ayer. Si no quieres irte a estudiar está bien, no es mi vida, pero yo te apoyaré. Podríamos ir al lago y...- Tomó mi mano y la puso contra su pecho- Oh, ¿Por qué lloras? ¿Dije algo malo?

-No, Craig. Solo tuve un mal sueño, sí. Vayamos al lago






Mi cara lucia algunas lágrimas, pero sobre todo una sonrisa de oreja a oreja. O al menos, eso afirmó mi madre, quien fue la primera en ver mi cuerpo aquella noche de mayo. Ella ya me había dicho que tanto café sería malo para mi, pero esta vez, también me salió bien, aún que no fue aposta. Supongo que estamos conectados, por que incluso al final, siempre estaré con Craig.

Pobre Diablo [Creek]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora