Entre tiempos~ Lumity Human Au

<<Mi verdad>>

Suaves rayos de sol se asomaban le la ventana, iluminando la habitación tras una cortina. Fuera de esta, dos personas se van acercando a la puerta. Un pequeño chirrido por parte de la puerta se escucho y dos figuras se adentraron a la habitación en donde una chica se encontraba aun dormida entre sus sábanas.

Sin hacer ruido se acercaron a la cama y se abalanzaron riendo sobre una peli lila, quien rápidamente despertó, poniéndose en guardia.

-¿¡pero que!? ¡Ed, Em!- le dio una mirada amenazante a ambos mientras los dos reían de su hermana menor.

-ya, ya Mittens- dijo la hermana mayor intentando contener su risa sin éxito alguno.

-admite que te gusta levantarte asi manoplas-

La cara de la menor de los Blight se puso de un color rojizo dando a entender que se habia enojado. De un tirón, se volvió a cubrir con la sábanas intentando evitar a sus hermanos. Una vez la risas pararon un silencio invadió de nuevo la habitación, ambos mayores ya habían hablado de esto cuando despertaron, tenian que hablar de algo serio con su hermanita.

-Amity...- la susodicha se sorprendió ante la seriedad en el tono que usó su hermana y del hecho que no usará ese tonto apodo que le molestaba, uno que a algunos lo consideraban tierno. Salió de debajo de su pequeña cueva viendo a sus hermanos con expresiones serias, sabia que llegaría este momento tarde o temprano, a decir verdad, era muy temprano.

-Amity lo de tu diario, ¿era cierto?- se atrevió a preguntar el peliverde. La mencionada abrió los ojos y a la vez se le hizo un nudo en la garganta impidiendo que pudiera contestar, quedo con la boca medio abierta intentando que alguna palabra saliera de esta pero nada. Su vista se empezó a ser borrosa y en un parpadeo sintió como las primeras lagrimas empezaron a salir de sus ojos. Incapaz de poder decir algo solo asintió a la pregunta, bajo el rostro y pequeños pero audible sollozos salieron de su boca y las lagrimas siguieron bajando por sus mejillas.

Los dos que estaban de frente sintieron la frustración que la más pequeña estaba sintiendo en ese momento. Sin esperar mucho tiempo, la tomaron en un abrazo en  el cual no dudo en corresponder al instante. Los sozollos aumentaron mientras sentía como acariciaba su espalda y su cabeza como un gesto cariñoso. Se sentía tan pequeña, como una niña que solo quería el consuelo de su madre después de un mal día. Tanto tiempo tratando de ocultar algo que te dio miedo descubrirlo y tanto costó aceptar. Sin saber como seria la reacción de tus seres queridos, temiendo a esta misma, creando escenarios ficticios para intentar hacerte una idea de como pasaría eh intentar prepararte para esto. Pero jamás lo estarías.

Los sozollos poco a poco se desvanecieron y los tres aun quedaron unidos por el abrazo. Emira aun acariciaba la cabeza de Amity como un gesto maternal que clamaba a la peli lila.

-¿estas bien?- se atrevió a preguntar la mayor. Esta vez obteniendo un breve "si" de parte de la menor. Acompañada de un suspiro para luego separarse del abrazo.

-lo siento- se disculpó limpiandose los restos de lagrimas que quedaron en si rostro.

-¿por qué?- pregunto ahora el gemelo- es normal sentirse así después de lo que paso, no te culpes.- tranquilizó.

- Yo, nose, no esperaba que lo supieran asi-

- ¿no nos planeaban decir?- pregunto Emira

-¡no! Digo ¡si! Yo, ¡agh es confuso!... solo quería decirlo de una forma más tranquila y tal vez en unos años, cuando no dependa tanto de mamá y papá- dijo mientras abrazaba a sus piernas evitando la mirada de ambos.