Capitulo 6

2.1K 293 42
                                    


Al despertar Izuku siente el aroma a caramelo quemado en el ambiente.

-¿Kacchan? - Pregunta a la nada aun adormilado -

Al abrir los ojos busca por toda la habitación al dueño de ese olor tan característico y que tanto le gusta, sin embargo no lo veo por ningún lado.

-¿Lo habré soñado? - Se pregunta así mismo mientras se levanta para tomar sus cosas de ducha para prepararse para el día de escuela. -

Mientras está tomando su ducha ya con la mente más despejada comienza a recordar los sucesos de la noche anterior. Se recuerda así mismo sin poder dormir, solo daba vueltas en la cama hasta que decidió salir al balcón para tomar un poco de aire fresco que lo ayudara a despejar su mente y así poder conciliar el sueño. Luego recuerda escuchar la voz de Kacchan llamándolo, él tampoco podía dormir en un ambiente nuevo. Lo siguiente que recuerda es haberse puesto a llorar porque extraña a su madre, y luego, los cálidos brazos del lobo cenizo que lo consolaron, de ahí, ya no hay nada más en su mente.

-¿Me quedé dormido en los brazos de Kacchan? - Se sonroja tan solo de pensar en ello - Aunque suena lógico porque son muy cómodos, además su aroma me relaja en exceso y el calor que emana de su cuerpo me quita el frio que pueda tener - Su sonrojo se vuelve más notable al darse cuenta que está desnudo en la ducha, pensando en Katsuki, lo cual le ha provocado una notable erección - ¿En que estas pensando Izuku - Se regaña así mismo mientras intenta terminar con lo que hacía ignorando o por lo menos tratando de ignorar el problema entre sus piernas -

No escucha cuando alguien más entra en una de las duchas, para ser más exactos en la ducha justo al lado de donde Izuku está.

Casi ha terminado de bañarse, sin embargo, el dolor en su entrepierna ha incrementado conforme pasan los minutos gracias a que su cerebro no ha dejado de pensar en el rubio, su aroma y el calor que le transmitió la noche anterior, se emociona aun más ante la expectativa de que el rubio pudo haber dormido en la misma cama que él, ¿Qué otra explicación había para que toda su habitación estuviera inundada tan intensamente con su aroma?.

Inconscientemente lleva una de sus manos a su entrepierna, comenzando a acariciar su miembro suavemente mientras vuelve a pensar en el cenizo.

-Kacch... -Gime bajito al pensar que está solo en el baño, sin embargo la persona en la ducha contigua lo escucha gemir e incluso escucha el ruido que hace su mano al chocar contra su miembro lleno de jabón, el cual le facilita su tarea - mmm, ahg, mmm -

Conforme pasan los minutos sus gemidos se vuelven más fuertes al pensar como sería estar en la ducha con el cenizo desnudo, este ultimo pensamiento lo hace llegar a su tan esperada liberación, manchando las paredes con su semilla. Se mete de nuevo en el chorro de agua para lavar todo rastro de lo que acaba de hacer, justo cuando está terminando escucha la puerta corrediza de la ducha contigua abrirse, luego cerrarse, para seguir unos pasos que salen apresurados de ahí. 

"¿Había alguien ahí?" "Me ha escuchado" "Ahora me dará vergüenza ver a la cara a cualquiera de mis compañeros" se dice mentalmente mientras cada parte de su cuerpo se pinta de rojo intenso ante la vergüenza de haber sido descubierto masturbándose mientras pensaba en el rubio.

Al bajar a desayunar evita la mirada de cualquiera que se le ponga enfrente, su vergüenza es demasiado grande, así que va directamente a la cocina para ver que puede desayunar ya que no tiene nada más que sopa instantánea.

Al llegar a la barrita que está en la cocina ve un plato tapado con papel aluminio que tiene su nombre. Al abrirlo le llega el delicioso aroma de panqueques recién hechos, acompañados con algunas fresas picadas y junto a todo esto se encuentran varios botes para acompañar entre ellos hay miel, crema de avellanas, lechera, cajeta y chocolate. Su estomago ruge en aprobación por el delicioso manjar frente a él.

Híbrido dimensionalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora