Lurk- Toji Fushiguro

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Desde muy joven se dio cuenta de que las reglas y vidas perfectas no iban con él

Desde una edad temprana, fue consciente de la reputación de su familia como mafiosos, conocidos por su participación en el mercado de armas. Aunque algunos podrían verlos como una dinastía en sí mismos, con un linaje y un legado que rivalizaban con la nobleza europea, Toji nunca se consideró un miembro destacado. Era el tercero en la línea de su familia, pero su habilidad en el campo de batalla y su actitud rebelde le valieron el apodo de "la bestia" a la temprana edad de 15 años.

Sin embargo, detrás de esa fachada de ferocidad y determinación, había un vacío que  Toji Zen'in apenas podía comprender. Nunca conoció el amor o el afecto maternal, ya que fue separado de su madre desde una edad temprana. Aunque sabía que existía una mujer dentro del clan que ocupaba ese papel, su identidad le era desconocida. En su lugar, creció bajo la tutela de su padre, quien lo entrenaba implacablemente para asumir el poder y la influencia del clan.

Para Toji, el amor y el afecto eran conceptos distantes y ajenos. Creía firmemente que eran debilidades, características de los débiles que se dejaban arrastrar por emociones que él nunca había experimentado. Sin embargo, estaba a punto de descubrir lo equivocado que estaba.

A los 16 ya había comenzado su vida sexual con una de las tantas mujeres que se dedicaban al placer dentro de su hogar, quizás no había sido la más especial o romántica pero no conocía otra manera de desatar sus deseos y el enojo que a veces almacenaba, solo lo hacía hasta sentirse asqueado de tanto placer o al menos eso es lo que más recuerda de todo ese año en particular

—Toji — su padre lo llamó — serás el encargado de escoltar a una señorita, su familia tiene nexos con nosotros —  el menor  se encontró frente a él mientras el hombre se entregaba al licor que lo mantenía ebrio la mayor parte del tiempo —Hazlo bien, o te dejaré sin testículos 

— ¿Qué familia es? — el azabache cuestiono mientras miraba con duda a su padre

— Los Moreau — respondió su padre, claramente molesto — estas aquí para trabajar no para cuestionar

Después de ese intercambio, Toji se preparó para la tarea encomendada. 

Lo último que quería era enfrentarse al castigo de su padre, y sabía que los Moreau eran una familia prominente en las élites europeas. No parecía nada peligroso en particular, pero estaba listo para cumplir con su deber.

Lo que no sabía es que sería el día que marcaría su estadía en prisión por 25 años

—¿Está todo bien, señor Zen'in? — La suave voz de Kore interrumpió las memorias de Toji, sacándolo de su ensimismamiento.

Toji parpadeó un par de veces, como si estuviera despertando de un sueño, y le devolvió la mirada a Kore. — Sí, solo estaba recordando lo bien que la pasamos el domingo pasado juntos — admitió, aunque su expresión se volvió un tanto seria —. Creo que estoy viendo una buena amistad surgiendo de todo esto, ¿sabe?

Aunque Kore sonrió ante sus palabras, en su interior había una lucha de emociones. Por un lado, estaba agradecida por la posibilidad de cultivar una relación de confianza y apoyo mutuo con Toji. Sin embargo, otra parte de ella estaba inquieta por la conexión que sentía hacia él, especialmente después de haber tenido un sueño inquietante la noche anterior, en el que él era el protagonista.

Pero, además de esos pensamientos, Kore también estaba lidiando con las tensiones en su relación con Satoru, que parecían aumentar día tras día. Cada intento de sorprenderlo o mostrarle afecto parecía terminar en discusiones sobre sus responsabilidades laborales y los límites entre su vida personal y profesional.